Cuatro.

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Mi vida se cayó. No salgo, no hablo, no como, me sorprende que aun pueda respirar. Siento un peso grande en mi pecho que no se va. Estoy sola. No puedo dejar de llorar. Me repito constantemente que lo que hice no fue suficiente. Si tan solo me hubiera dado unos minutos más para explicarle, si tan solo hubiera llegado antes, o si no hubiera sido tan dura el día que lo termine.

Siento que estoy muriendo. No dejo de llorar, mis ojos se inundan y no puedo evitarlo, es algo que no puedo controlar.

Me he encerrado, he desconectado el teléfono, no quiero saber nada. Solo quiero estar sola.

No sé cuánto tiempo ha pasado, pero se siente como una eternidad.

Mis amigos dejaron de visitarme hace mucho. Creo que ya hasta olvide sus nombres. Solo Dante me visita algunas veces. Sospecho que solo verifica que siga viva.

No sé nada acerca de mis padres desde la última vez que los vi. Fue una gran discusión la que tuve con mi madre. No quiero un novio, no quiero conocer un chico mimado hecho de dinero, no quiero una vida lujosa, solo quiero sanar mis heridas.

Tres meses, quizá más. Dante vino hoy, dice que me veo más delgada, y que luzco muy pálida. No sé cuándo fue la última vez que me mire en el espejo, todos los espejos que tenía en mi departamento los quebré o los tapé. No estoy interesada en saber lo mal que luzco, ya me siento lo suficientemente horrible por dentro, no es necesario ver que tan horrible luzco por fuera.

Mi departamento es un desastre. Todo está regado siendo que antes odiaba dejar algo fuera de su lugar, hoy no me importa. Tome un baño, fue relajante, pero mi tranquilidad era tanta que mi corazón se hincho y lloré de nuevo. Lloré otra vez. Pase horas en la tina y la piel de mis dedos se me arrugo.

Hoy note los huesos de mis rodillas, son más notorios, Dante tenía razón.

Pasé frente a un espejo cubierto con una manta, tuve la sensación de quitarlo pero me contuve. No estoy lista para ver en lo que me he convertido.

Mi madre vino hoy... por primera vez, vi compasión en sus ojos. No derramo ni una lagrima, pero sé que quería hacerlo. Tocó mi mejilla amablemente y su labio tembló. ¿Es normal querer morirse?

Parece que todos insisten en que valla con un doctor. No estoy enferma. Aún estoy enamorada.

¿Cuánto tiempo ha pasado desde que se fue? Fue la pregunta que le hice a Dante el día de hoy. Me miro con tristeza y pena, hizo una mueca con la boca y solo me abrazo. Un año, me susurro en el oído. Sentí ese frio en el pecho, el mismo frio que he sentido desde que él se fue.

Solo un año pasó y se siente como si hubiera sido en otra vida. Solo quiero otra oportunidad. Quiero una nueva vida, eso es lo que quiero. Haber hecho lo correcto, o no haberlo conocido.

Hay un objeto sobre la mesita de centro del salón, y me recuerda cada segundo lo que paso. Las imágenes se reproducen en mi cabeza y las lágrimas brotan de nuevo. Justo ahí, en una orilla de la mesa, está el dije de Mariposa que usaba Axel. Su nombre ahora me suena tan irreal, tan lejano, tan doloroso. Todo es doloroso, incluso respirar.

Mi madre me visito de nuevo. Ha sido más frecuente últimamente, me insiste para que vuelva a casa con ellos y mi pequeña hermana. Pero me gusta mi soledad, puedo llorar tranquila sin que nadie me haga preguntas, o me juzgue.

Mamá vino hoy de nuevo, pero esta vez fue muy diferente. Papá está enfermo y quiere verme. Acepte ir, pero no me quedaré, estoy a gusto con la soledad.

Dios mío... ¿Por qué todo lo hago mal? ¿Por qué tengo que sufrir tanto? ¿Por qué a mi padre? Me hubiera quedado con él. Un mes después de ir a verlo, mi padre cayó en coma. Paso otro año y creo que hoy lo declararan clínica y oficialmente muerto.

Papá ha muerto.

...

...

Tres años, nada ha mejorado. Mi depresión cada vez es más severa. Mi madre ya no me visita. Dante viene una vez al mes, o una vez cada dos meses. Vivo dentro de enormes pantalones y suéteres. Las épocas de invierno me hacen recordarlo. Ya no festejo las fechas importantes, Navidad es solo un día más en el calendario. Mi cumpleaños es solo un recordatorio de que estoy dejando que la vida se me valla de entre mis manos.

Mariposa Azul (She)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora