10:35 a.m. de un 10 de julio
El cielo es de un maravilloso color azul con alguna que otra nubecilla color blanca y una que otra ave tomando agua en la fuente.
Mi nombre es Uriel montano Gonzales y tengo 20 años, actualmente estoy cruzando la universidad y estudio la carrera administración de empresas. Me considero una persona inteligente, extrovertida cuando lo es necesario, me gustan las cosas tranquilas, la música relajante y me fascina conocer lugares nuevos para mí.
Mi mirada está perdida en esa casa, en la que viví, crecí y ahora la dejaría después de 20 años. Los autos de mudanza se encuentran detrás de mí, esperando a que papá y mamá salgan de casa, para marcharnos a una nueva ciudad, lejos, muy lejos de aquí. Papá sale con una maleta mediana y mamá con mi bastón de selfies entre sus manos.
- Papa, ¿es necesario irnos?
- Si Uriel, es lo correcto _dijo papa_
- Pero, ¿por qué?
- Mira Uriel _ dijo mama_ tu papa consiguió un trabajo más bueno en otra ciudad.
- Pero si él ya tiene un buen trabajo como gerente de publicidad _replique yo_.
- Pero haya me ofrecen un trabajo mejor _interrumpió papa_.
Mama camino hasta el Mustang de papa y yo solo me quede con el. Los nos quedamos mirando la casa y ni uno de los dos decía ni una solo palabra, yo solo deseaba que el celular de papa sonara y que detrás de la línea una voz de una secretaria le dijera:
- Lo sentimos señor, pero lamentablemente su puesto ha sido remplazado.
¡Pero no! Sé que eso no pasará. Papa toma su maleta y se la coloca en el hombro derecho.
- Eso es lo mejor para todos _dijo el poniendo su mano en uno de mis dos hombros_ lo siento hijo.
La nostalgia me invade, solo me quedo parado ahí, viendo por última vez a mi casa, camino un poco y me siento en la barda de la fuente del jardín.
- Yo no me quiero ir _me decía mentalmente_ yo quiero estar aquí con mi familia, con mis amigos y con todos esos recuerdos que se quedaran en esta ciudad. Pero me tengo que ir...
Camino hacia el auto y me subo con una fuerza en mis pies que no desean al igual que yo "el irse". Me siento atrás del copiloto, saco mi celular y mis audífonos, y su vez me los coloco en los oídos, tratando de olvidar esta triste despedida. Solo deslizo mis dedos por la pantalla de mi IPONE y desbloqueo la pantalla, me encontré con las aplicaciones del menú, elijo la aplicación música y escucho una canción titulada "More Than This".
Papa enciende el motor del auto y poco a poco nos vamos alejando de casa...
Continuara...