Al llegar a casa, Jake se sintió que había valido la pena volver, pues el calor de su hogar era irremplazable. Todo en su casa seguía igual, excepto los ánimos familiares. Su madre estaba muy enferma y esa noche todo el grupo y miembros de la iglesia llegaría a la casa para realizar oraciones por su recuperación. Al llegar a su casa, ya se encontraban allí sus dos viejos amigos John y Lisa quienes tenían muchas inquietudes para compartir con él, y al mismo tiempo, estaban allí para apoyar a su familia por este momento que pasaban. Sin duda alguna, lo que Jake extrañaba más de toda Allison, era a Kooper, su compañero fiel de vida. Esta mascota parecía haberse llenado de emoción y le salto para arrojarlo al suelo y lamerle todo con el fin de mostrar su felicidad y alegría al Jake estar allí con él. Kooper demostraba que, una vez más, jamás se equivocan cuando dicen que los perros son los mejores amigos para esta humanidad.
Al llegar a su cuarto todo seguía intacto, como si no hubiesen pasado esas semanas en las que él no estuviese allí. Su cama estaba tendida de la misma manera como la había dejado, lo único que había cambiado era el olor a humedad. Jake salió de su habitación y llegó a la de su madre. Ann siempre se había caracterizado por ser una mujer valiente y guerrera. Era una mujer muy blanca con unos hermosos ojos color miel y unos rizos con tonalidades rojas, nativa de Allison. Paso su infancia entre cultivos y siembras de frambuesa y mora; su familia tenía la mejor cosecha de todos los tiempos. A los 10 años su padre se convierte en Pastor de una iglesia cristiana con principios muy estrictos y religiosos, donde las mujeres debían ir con faldas largas y con velos que no descubrieran su cabeza, no podían usar maquillaje y siempre debían ir de forma decorosa. A los 19 años conoció a Harry, el padre de Jake, quien también se congregaba en esa iglesia. Ambos crecieron bajo el adoctrinamiento del sistema religioso. Sus enseñanzas y modales en el hogar fueron moldeados por la cultura arraigada a la que se estaban sujetando en ese momento. 6 años después nace el pequeño Jake, quien pasaría a ser el único hijo de la pareja. Justo en ese momento la pareja tuvo que casarse y comenzar a vivir juntos, para evitar rumores en la sociedad. La relación de ambos se fracturó cuando Harry fue infiel a Ann, pero esta por motivos de renombre social, prefirió ocultar su separación y continuar con el matrimonio. A pesar de esto, Harry siguió con su amante, incluso llegó a viajar fuera de Allison por dos meses con ésta. Sin embargo, siempre quisieron inculcarle los mejores valores a Jake, que creciera en un hogar de paz, que aprendiera cual era el camino "correcto"; así que todos los domingo asistía a la iglesia y a todos los servicios de congregación.
Jake se acercó a la cama de Ann, quien en un tono bajo le dijo: Hijo mío, pensé que ya no vendrías a casa, a tu casa. Claro que si madre, debía venir a acompañarte en este momento- respondió este con lágrimas en los ojos. Tomó a su madre de la mano y se inclinó para abrazarle. Esta le tomó de una mejilla y le dijo: Quiero que estés bien, que no te metas en problemas, el Señor quiere lo mejor para ti, y sabes que lo mejor para ti es estar aquí con nosotros, con tu familia, acá te podemos cuidar, acá hay chicas hermosas de las que te puedas enamorar y formar una familia, tienes amigos que te quieren y te apoyan; nosotros somos tu familia y te apoyamos; sólo no quiero que sigas tan lejos, el demonio podría hacerte caer en tentaciones y cometerías pecados que luego no son perdonables, además, ya la venida del Señor esta cerca y tienes que prepararte en Santidad para que no te quedes. Jake no sabía que responderle solo le abrazó de nuevo y pidió de le dieran agua a Ann, y justo allí, el salió de la habitación y bajó a la sala.
¿Qué tal es la Capital? ¿Es cierto que la gente es extraña? ¿Qué tal la universidad?, preguntaban sus amigos John y Lisa quienes estaban ansiosos por compartir con Jake. Es bastante normal para ser sincero, sólo que el día pasa más apresurado y la gente, bueno, la gente es como eléctrica- respondió Jake entre sonrisas y sentándose al lado de ellos- hay personas buenas, y como en todos lados, personas malas; hay muchísimo tráfico, pero en general es una grandiosa Ciudad. John solo puntualizó: ¿Y qué tal son las chicas?; JAJAJA ¿las chicas?, bueno son bonitas y agradables, en la universidad hay mujeres hermosas- respondió Jake con un tono bastante incómodo. John se levantó y salió, quedándose en la sala solamente Lisa y Jake. Esta chica miró hacia las escaleras y le comentó casi susurrando: ¿ya has dejado atrás esos extraños sentimientos y pensamientos que tenías no? ¿Te gustan las chicas como todos los demás chicos normales? Tu madre hace varios días conversó conmigo sobre el miedo de creer que bueno, seas gay. Me dijo que oraría por ti para alejarte de esos caminos desviados y te centraras en conocer a una chica. Yo no quise comentar nada, pero creo que debería seguir los consejos de tus padres, ellos siempre van a querer lo mejor para ti. Jake se le quedó mirando fijamente y le dijo: me iré a mi cuarto, quisiera arreglarme para más tarde.
Subió a su habitación y cerró la puerta, busco entre su ropa algo que colocarse para meterse a duchar, y mientras se bañaba, a su mente llegaron muchas preguntas: ¿Acaso es lo correcto? ¿Qué debo hacer? ¿Y si sólo sigo mis instintos? ¿Y si me equivoco? ¿Será un pecado amar?
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El Mayor de los Miedos
Romantik¿Qué hacer cuando tus instintos van en contra de tus principios? Jake King es un joven común y corriente, criado en un hogar "cristiano" que ha logrado clasificar entre los nuevos estudiantes de la carrera de Medicina de una prestigiosa universidad...