Tomo Confianza con Ella...

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08 de Octubre de 1991

Querido Amigo:

                          Anoche salimos a comer. Fui con mi papá, Sally (que ahora es su novia) y Jason. No puedo creer lo rápido que papá se acostumbró a él y yo a Sally. Se lo presenté hace unos días. Cuando terminamos de comer, papá y Sally insistieron en que Jason se quedara a dormir, ya que era muy tarde y tenían miedo de que se vaya manejando (aunque solo eran las once y media). Lo que me sorprendió fue que, aunque él es dos años mayor que yo, lo dejaron dormir conmigo en mi habitación. No hicimos nada.

                                  A la mañana siguiente, cuando me desperté, él todavía seguía durmiendo. Un ratito después se despertó. Cuando nos levantamos, bajamos a desayunar si tener la menor idea de la hora que era. Mi papá le pidió a Jason hablar a solas. Yo me quedé sola con Sally en la cocina. Charlamos un rato, y me dio una noticia que yo no quería, voy a tener un hermanito. Cuando me lo dijo, le respondí (más cortante de lo que pretendía) que yo ya lo tenía, y que él me cuidaba y acompañaba sin la necesidad de estar presente. Pero lo que siguió, si que no lo vi venir... Tuvo "la charla" conmigo. Ni bien terminó salí corriendo para mi habitación, en las escaleras me encontré con Jason saliendo del estudio. Mi papá estaba atrás de él. Subimos la escalera mientras yo sentía la mirada de los otros dos en la espalda. No se si Jason también la sintió. Recién cuando llegamos a mi habitación hablamos:

                                -Me dio "la charla" -dijimos al unísono. Y empezamos a reír. Cuando paramos, comparamos las diferencias y parecidos que le habían dicho a cada uno.

                               -Voy a tener un hermanito -le dije-. Eso fue lo primero que me dijo Sally.

                               -Sile, ¿estás bien? Ya sabés... ¿Estás lista para eso?

                               -Si si -le aseguré, aunque no muy segura -. Va a ser un poco raro, pero bueno, la vida ya es así, un poco más de rareza no me a hacer daño.

                                A la noche, cuando nos sentamos a comer papá y yo, me dijo que le había propuesto matrimonio a Sally. Sinceramente no lo podía creer. Era como si de golpe hubiera olvidado a Leo y mamá. Pero lo veía feliz, algo que hacía tiempo no lo hacía; aunque en sus ojos todavía queda una pizca de tristeza por la pérdida de su hijo. Eso es algo que va a ser muy difícil de quitar.

                                                  Con mucho cariño,

Silena







Hola:) Perdón por la tardanza para publicar esta carta, pero sinceramente, la escuela me tiene de esclava. No lo prometo, pero voy a ver si puedo publicar cada diez días, mas o menos. Si seguimos así vamos a llegar a las doscientas!! Besoos:)



Una Escuela cambia TODODonde viven las historias. Descúbrelo ahora