Mirando Hacia Abajo

Capítulo 2: "El Quiebre"

Una voz masculina se acerco a mí y me dice "Mamá murió, John".
A este punto me habían informado que estaba en coma ya hace 2 años y mi hermano (Derek) y la tía Nancy no querían que me desconectarán "Aun no".
-Ella...tomo unos antidepresivos y se durmió, no sufrió nada..tengo miedo John -Derek empieza a llorar- desde que te fuiste todos hemos estado preocupados, yo sabía que no tenía que manejar esa noche, lo sabía, y ahora estas...estas..luchando entre la vida y la muerte, y no puedo solo John por favor, dame fuerzas, no sé si estas escuchando esto pero por favor -aprieta mi mano- por favor despierta.
Siento como los pasos de Derek se van apartando de mi camilla poco a poco, esta podía ser la última vez que lo escuchaba, que oía su voz, la voz de mi hermano -llore-

-¡Derek! No te vayas, ¡Por favor!, ¡No me dejes hermano! ¡Derek vuelve! por favor Derek...Vuelve -exclamé desanimado-

Esa fue la última vez que me sentí vivo y lucido, Derek ¿Que había pasado con él? Los meses pasaron y yo no despertaba, hasta que un día...mi suerte cambio.

Mis manos las cuales estaban atadas se desataron, mis pies, todo, ya por fin podía moverme pero aun no era capaz de levantarme.

Me hacían ejercicios, por ejemplo, "Si reconoces esta canción, mueve un dedo" y yo lo movía, podía notarlo por las lagrimas que tocaban mi piel las cuales podía sentir, estaba avanzando, ya movía los dedos e incluso los ojos, mis piernas, (las cuales ya no se sentían adormecidas), me sentí feliz pero aun no podía salir de ese infierno el cual mi cuerpo tocaba y a veces, incluso lesionaba.
Con el paso del tiempo mis manos empezaron a tener lastimaduras, esto quería decir que aun habían complicaciones mientras yo estaba en coma con dios sabe que. Sentía como los insectos olían la carne, mi carne, su festín era literalmente mi cuerpo y me estaban comiendo, no quería imaginarme como me veía en ese momento, físicamente durmiendo, día tras día, noche tras noche, desfigurado, 3 años y mi cara lo hacía notar, bueno, mi cuerpo en si. Me volví loco y veía cosas que no estaban.
De todas formas, sentía que moría y sin esas maquinas yo no era nada, solo un cuerpo, mi alma estaba enterrada, encerrada, no podía salir de ese lugar, mi cuerpo estaba arriba y yo estaba abajo.
La gente me veía, ¿Que veía? ¿A un cadáver? ¿ A alguien más muerto que vivo? ¿Qué pensaban? eran tantas preguntas y no podía responderme ninguna, eso era lo que más me aterraba.
Lo peor de sentir, es que no estás muerto, estas torturándote, no sé si es bueno o malo, no sé si tengo que agradecer el simple hecho de respirar con maquinas, ¿Tengo que agradecer? Me sentía vació y en ese punto ya quería morir, quería salir de ese lugar, ese cubículo, esa pesadilla, no merecía eso o eso creía.