La llamada

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-oh, Disculpa me sentí mal y me quite en taxi. Se escuchó un quejido.

-dime, ¿qué escuchaste?.

-¿de qué?. Dije nerviosa.

-en las duchas,. No te hagas a la que no sabe, que se muy bien que estabas ahí.

-si sabes que estaba ahí porque preguntas. Dije enojada y dolida con él.

-Eli, si quieres dejamos para otro día la cita, debes estar muy ocupada. Dijo Marcos, yo asentí

-¿con quién estas?. Dijo Anthony molesto.

-con Marcos. Dije enseguida

-¿QUÉ HACES CON ÉL? ¿ESTÁN TENIENDO UNA CITA?. Me grito.

-pues él es dueño de su taxi y no, gracias a tu llamada no la pudimos tener. Dije tajante

-hablamos en la casa. Dijo y colgó

-vamos a tu nueva casa entonces, debo admitir que siento celos del paliducho de Anthony.

-¿por qué?. Dije confundida

-pues él te vera diario, que no daría para verte diario. Yo me puse roja, detuvo el taxi

-Realmente me gustas mucho Eli. Cerré los ojos

-llévame, por favor. Dije incómoda

Llegamos a la casa de Anthony y me despedí de Marcos, abrí la puerta y ya todo estaba apagado. Mis muletas me cansaban, subí las escaleras lentamente, al llegar al último escalón alguien me Agarró del brazo y me metió al armario gigante que estaba al lado de mi nueva habitación.

-¿qué hacías con él?. Dijo con autoridad.

-pues él me paso a buscar...

-¿qué tienes con él?

-pues solo es mi amigo...

-¿por qué te cae bien?

-porque es buena persona...

-te trata mejor que yo es eso. Dijo con la voz temblorosa.

-tu no me tratas bien. Dije seria.

-¿es que tú no entiendes? lo que paso hoy...

-¿chicos, son ustedes?. Dijo la mamá de Anthony desde abajo

-solo soy yo ma. Dijo Anthony.

Yo camine lo más rápido que pude con mis muletas y me tire en la cama.

Que me querría decir Anthony, acaso le pasaba algo?

Cerré los ojos, paso un rato y entre sueño escuche un ruido y un.

-maldición. La voz parecía de Anthony, decidí ignorarlo y seguí durmiendo.

Hoy era viernes y no tenía las primeras tres clases, solo las últimas dos y la del final era educación, así que decidí dormir más y no ir a clases.

A las 8 me llego un mensaje de "Imposible"

*qué esperas para bajar, no haz desayunado, ni te has metido a bañar.*

Enseguida le conteste.

*no tengo las primeras tres clases solo las 2 últimas y la ultima es educación y yo no puedo hacer deporte, solo iría por una y no vale la pena. * Le mande y en 30 segundos contesto

*ok, en ese caso nos vemos luego, cuidate.*

Enseguida le conteste

*Gracias, chao. *

El día paso lento, yo no baje para nada pero la mamá de Anthony me llevaba comida a montón. Me dormía por ratos.

Mi celular sonó y era un texto de Marcos.

*¿Hoy si nos podemos ver? ;)*

Espere un rato para contestar.

*Hoy quiero estar todo el día en la cama, a lo mejor en la noche y yo te invito a un helado.*

Enseguida contesto.

*claro que sí, me parece perfecto, yo te paso a buscar a las ocho, pero yo invito.

*ok, a las ocho, bueno, chao. *

*Bueno, en 5 horas nos vemos."

Dijo emocionado.
Sentí miedo pues no sabía que decirle a Marcos, no podía decirle y contarle sobre mis sentimientos hacía Anthony, le rompería el corazón, aparte sería muy incómodo.

-¿Eli?. Dijo Samuel.

-si Samuel pasa. El pasó y se sentó en el mueble de enfrente.

-quiero decirte algo...

-hijo ¿qué haces aquí?. Dijo la mamá de Anthony.

-oh, nada ya me iba. Samuel salió y detrás de su mamá me hizo la seña de que después continuaríamos.

Yo sonreí.

-¿y cómo has estado?.

-bien, a las 8 debo salir un ratito a comer helado con un amigo.

-cual amigo. Dijo Anthony con los brazos cruzados en la puerta

-Marcos. Dije

-mamá me dejarías a solas con ella. Ella asintió y enseguida salió

-¿Qué pasa Anthony, no deberías estar en la escuela?. Dije confundida

-si tu no vas ¿por qué yo debería de?. Me sorprendí

-Es que realmente no sé qué es lo que pasa, primero eres muy frio y hasta me ignorabas sabiendo ya mis sentimientos, y ahora quieres de un día para otro estar conmigo y hasta me besas, pero como tú lo dijiste solo soy un juego y yo no quiero ser parte de él . El quedo pálido

-Es que... dudo al decirlo y se paró de golpe -no puedo creer que seas tan tonta para no darte cuenta. Salió a paso rápido y con delicadeza cerró la puerta pero antes de eso me echo una ojeada.

Es que cual era su problema, si no me quiere para que me ilusiona, se me quitaron las ganas de salir y e mande un mensaje a Marcos

*Creo no podremos salir, me siento mal y pues estaría incomoda.*

*Está bien, nos vemos luego.*



Todo empezó con un besoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora