¿Ahora qué hice?

Capítulo 20

Qué monada tener a mi bebé de nuevo, lástima que para mi suerte no sólo estaba Rusty mi moto, sino que también estaban dos mastodontes ya conocidos por mi llamados Dillon y Cameron, los dos mejores matones de Padre y mejores amigos Tate, y al ser yo mejor amiga de Tate >te duele decirlo y se nota< me odian ya que supuestamente yo hice que él se volviera más "cuidadoso" con lo que hacía.

-Miren que tenemos aquí, a la pequeña y tonta Scarlett -Dijo Cameron agarrándome del brazo y bajándome de Rusty.

-Miren, si es que el mamut puede hablar. 

-Idiota no te pases de lista.

-Perdón que te diga pero yo no me paso de lista, ni siquiera me considero lista.-

-A la próxima le decimos que mande a alguno de los otros. - Le dijo "susurrando" Dillon, pero no sé en qué parte entra la palabra susurro sí lo que dijo se escuchó hasta China.

-Scarlett esto lo diremos una vez y esperamos que lo entiendas y que no trates de escapar o algo, porque sí eso llegará a pasar, se podría decir que no saldrás del hospital por un tiempo largo ¿Entiendes? - Me dijo Dillon y mi sangre se heló, la última vez que me dijeron eso estuve en coma un mes por no querer hacer el "trabajo" y en comillas porque este era pasar una noche con un socio de Padre -¿Entendiste?

-Sí.

-Tienes que dejar el intituto e irte de ese lugar, mañana por la tarde.

-¿Por qué? Sí se puede saber, solo quiero saber eso y si podré seguir estudiando en algún otro lado.

- Porque Padre lo quiere así, y estudiarás en el instituto en el que está Tate y tú amiga esa, y vivirás en la misma casa que ellos. - Sin más, dejándome a mi con la boca abierta y todavía sin comprender se fueron.

>Será mejor ir con Tate y preguntarle sí sabe algo<

Me monte a Rusty, con todo el dolor del mundo ya que los golpes eran muchos y no había ninguno que estuviera curado.

...

Un golpe, dos golpes, tres golpes y cuatro golpes.
Estaba por dar el golpe número cinco, pero apareció por la puerta la horrenda cara de Mariana y no la golpeó solo porque quiero hablar con Tate tranquila.

-Miren sí es la rarita suicida.

-¿Está Tate?

-Si ¿lo llamó?

- Sí por favor.

- ¡Tate te buscan! - Le gritó desde la puerta con una gran sonrisa plasmada en su hermoso rostro, para que mentir la chica es una puta modelo.

-¿Ya llegó Sophie? Ya bajo linda, gracias por avisar. - Le gritó Tate y la sonrisa de Mariana se agrandó a más no poder.

El maldito estaba esperando a Sophie, su novia, llevan juntos un año y ella era mi mejor amiga casi hermana, pero después de juntarse con él le deje de hablar, esa traición no se perdona nunca ya que sabía que a mi me atraía.

Se escucharon paso y luego un golpe >el idiota bonito se cayó< y al rato apareció Tate al lado de Mariana, le dio un beso en el cachete y luego me miró, su sonrisa se borró y lo único que dijo fue "¿Eras tú? ¿Y Sophie?" y eso también se escuchó ¿no? Pues claro, si fue mi corazón rompiéndose en partes más pequeñas para solo dejar restos.