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-¿Qué hace... Hace... Samuel alli?-
Ella guardo la foto en su bolsillo y se dirigió hacia la puerta principal, pero derrepente vio una puerta abierta.
-¿A donde se dirigirá esa puerta?-
Ella camino lentamente, mientras qué la madera rechinaba en el suelo.
No tenia ni un sólo foco ese sótano, ella sólo podía notar el umbral del día, no le importó y bajo a oscuras.
-Qué asco, como apesta-
El olor era desagradable, ella se imagino lo peor y si fue así .
El cuerpo del joven qué supuestamente había asesinado a su novia la noche del velorio , estaba sentado y atrás de el estaba el bote oxidado.
La cara de el joven estaba quemada y no tenía una mano, se lo habían cercenado.
Elizabeth subió las gradas corriendo y cerró la puerta principal.
Tomó su bicicleta y manejo hasta su casa.
Ella presentía qué alguien la observaba entre los árboles que rodeaban la casa.
Manejo más rápido y llegó.
-¡Mamá!- gritó
-¿Qué sucede?-
-Mamá, quienes son los padres de Samuel-
-Él no tiene padres, él vive con el Hno. Timoty- mencionó.
Elizabeth estaba sudando y asustada.
-Mamá ya se quién es el asesino-
-Nena, tómate tus pastillas-
-No mamá, escuchame-
-Tómate las malditas pastillas- gritó.
-¿Qué pastillas mamá?- preguntó.
Margareth tomó el cabello de su hija y se lo peino con sus dedos.
-Tranquila mi amor-
Suspiró.
-Mi mamá esta loca- pensó elizabeth.
-¡mamá!-
-¿Qué cariño?-
-Sabes donde vive mi tía-
-3ra, calle b...-
-No Mamá, no hablo de Tía Nancy, hablo de... Tu sabes-
-Nena Porfavor, no vayas con ella-
-¿Porque, quiero hablar con ella?-
El teléfono sonó.
-Ahora vuelvo- dijo su madre.
Elizabeth sabia que el cuerpo de su tia, yacía en el suelo del cuarto prohibido.
Ella subió y entró al cuarto prohibido, solamente quería asegurarse.
El cuerpo de su tía seguía en el suelo.
Ella cerró la puerta.
-Mi mamá mato a su hermana o fue mi padre-
Realmente no sabia que hacer.
No tenia que avisar a los oficiales, la creerían demente, tenía qué buscar a Samuel y matarlo.
-Pero... ¿quién es Trent?-
Ella tomó las llaves del cuarto de su madre y se dirigió al cofre, sacó el cuchillo que aún tenia un poco de cabello, y lo envolvió en un poco de periódico.
-¿Qué demonios haces revisando mis cosas?- gritó su madre.
-¡Mamá! ¿Tu asesinastes a la esposa del pastor?-
-Nena, puedo explicarlo-
-Me engañaste- exclamó
-Nena-
En ese momento la madre le iba a abrazar cuando Elizabeth le ensartó el cuchillo en el estómago
-No... Puedo... Creer... Que... Me HAYAS MENTIDO- le gritaba y le daba más puyones en el estómago.
La madre comenzó a sangrar y cayó al suelo.
-Eli... Za... Beth, to...ma...te... Las... Pasti....- y murió.
-¡MALDICIÓN!- gritó Elizabeth.
Tiro el cuchillo y salió de la habitación

La Mitad Oscura.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora