Syl

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«¿Qué es esto?» Se preguntó Syl al ver la nota en su taquilla, ¿en serio esto sucedería? Sus expectativas resultaron erróneas o simplemente su trabajo le trajo malos comentarios. Syl arrugo la nota y la tiro dentro de su taquilla, decepcionada y triste, cerró de golpe la puerta de su taquilla y vio su horario de clases, por lo menos en su primera clase resultó excelente, pero lo demás no.
-¿Qué sigue? -Se preguntó Syl a sí misma.
Artes visuales. Salón D
Se encaminó hacia su siguiente clase y afortunadamente estaba cerca, entro y vio que todavía la clase no empezaba, busco con la mirada un pupitre vacío y finalmente vio uno; no conocía a nadie, solo las mismas caras de la clase anterior, tal vez su anónimo este entre todos ellos. Ella se encaminó hacia el pupitre de la esquina lateral derecho y se sentó tranquilamente. En si, no sabía que clase era, ya que en la Preparatoria los nombres de las clases son distintas que la secundaria, pasaron unos minutos y el profesor todavía no llegaba, la mayoría estaban hablando entre ellos mientras que Syl seguía sola. Sacó su cuaderno, el que vio primeramente, lo abrió y empezó a trazar cosas, cosas que salían de su mente, ella dibujaba. Durante 10 minutos, el profesor finalmente llego y se presentó. Syl levantó la mirada y vio que era una mujer de unos 29-35 años, todos se calmaron y se sentaron adecuadamente.
-Buenos días chicos, primero que nada les doy la bienvenida -Hablo la maestra y haciendo señas con los brazos conforme con lo que decía- ustedes son ahora los nuevos. Mucho gusto, yo soy la Profesora Damaris, y les estaré impartiendo durante estos dos semestres la asignatura de Artes Visuales, como todos son nuevos, cada uno preséntese con orden y, empecemos por aquí. -Señaló a la fila lateral derecha donde Syl se encontraba.
Una chava de mi edad, pelo rubio, realmente era bastante linda para nuestra edad, se levanto y se presentó.
-Soy Kim Swagen. -Dijo con gracia.
Luego, otro se levanto y se presentó.
-Buenos días, yo soy Damián Corp. -Siendo honesta era bastante atractivo.
¿Porqué todos aquí son guapos?
Seguía yo de presentarme, estaba temblando y mi corazón se aceleró de manera remota, me levante torpemente y mire a todos con una sonrisa.
-Soy Syl Hurttan.
Todos solo me miraban, algunos me sonreían e incluso me dijeron hola, sentí temor que no les haya caído bien. Luego, pasaron todos los demás. Difícilmente sería aprenderse los nombres, soy mala en eso, honestamente.
La clase duro 40 minutos y fue bastante bien, platique con algunos compañeros, intercambiando comentarios, palabras, risas, incluso conocí a Nilda, es bastante linda de actitud, espero llevarme muy bien con ella.
Pasaron varias clases después e hicimos lo mismo; presentarnos. Finalmente fue la hora libre, y dura dos horas, eso es fascinante, mientras que salía de la clase de Cálculo, tenía mi cabeza fija en mis notas y mi mochila en medio brazo sujetado, todo mundo salía de los salones y se veía como un mercado de frutas, era fascinante, conocer a toda esta gente seria loco, observó a todos como caminaban, algunos seguros, otros con su grupo de amigos, otras riendo y hablando, otros estaban como yo, solos.
Me dirigí a mi taquilla y guarde todo, solo me quede con mi mochila y teléfono. Lo cerré y camine hacia la sección verde, donde había un patio enorme con árboles y zonas con sombras y bancas, algunos estaban acostados en el pasto, otros bailando, otros sentados platicando en el pasto, estaba realmente fascinada, me dirigí hacia un punto en que vi un lugar realmente cómodo, era un árbol enorme que daba sombra, me dirigí hacia él y me senté en forma de quedar recargada en el tronco; saque mis audífonos y me los coloque, luego mi libro de El Retrato de Dorian Gray. Estuve leyendo, durante casi 30 minutos. ¿Cómo puede ser así Dorian? ¿PORQUÉ? Estaba tan entrada al libro que no me percaté que alguien estaba enfrente mío hablándome. Sentí como había más sombra de lo normal, levante la miraba y era Klov, el primero que conocí aquí. Le sonreí.
-Oh, perdón ¿te molesto? -Dijo él en tono de disculpa.
Me quite los audífonos y apague la música. Cerré el libro, obviamente con él separados dentro, luego no sabré dónde me quede.
-¡Para nada! Hola, Klov. ¿Qué haces? -Le hice la seña de que se sentará.
Él hace caso omiso a mi seña. -Hola, Syl. Pues andaba caminando por el campus y me llamó la atención que estuvieras aquí sola leyendo, no se ve a menudo una persona leyendo, la verdad. -Me dice Klov serio. -Y eso es bueno, esta generación, no te ofendas -Soltó una risa-, viene muy rebelde, rara, ¿puñetas? No sé explicarlo adecuadamente.
-¿Mamona? -Dije sonriendo.
-¡Exaaaacto! -Se empezó a reír Klov.
-Pues espero no verme mamona. -Me empecé a reír.
-No, para nada, de hecho tú y otra chava nos cayeron bien, bueno a mi semestre, y eso es bueno... Hay que soociaaalizaar -Klov movió sus manos en forma de círculo conforme a lo que dijo, expresando a todo el mundo.
-Supongo, pero tú sabes que el primer día, por lo menos el primer año es difícil para los de nuevo ingreso, y soy mala socializando... -Agache la cabeza.
-Vamos, ya me conoces, y esto es el comienzo. -Dijo Klov de forma alentadora.
Subí la mirada y lo mire sonriendo, por un instante olvide lo que había sucedido hace algunas horas, que hizo sentirme como basura. Hice una mueca al recordarlo y pareció que Klov se dio cuenta.
-¿Que sucede? ¿Dije algo malo, Syl? -Me dijo al instante.
-No -hice una pausa. -No, todo bien. -Intente sonreír como suelo hacerlo.
Klov pareció no creerme, yo sé que sería malísima en teatro, pero vamos, esto no puede ser tan difícil de creer.
-¿Qué te hicieron? -Me preguntó seriamente, más de lo normal.
Me estremecí. ¿Cómo que qué me hicieron?
-¿Hacerme algo? -La pregunta se salió de mis labios.
-Llevo casi dos años dentro de esta preparatoria, conozco como son la gente de cagapalos.
Klov sonaba enojado o serio, supongo que entiende o a pasado lo mismo que me sucedió hoy, estaba dudando en contarle, no es bueno confiar en la gente en un instante, lo miraba con duda y él esperaba a que dijera algo, quería salir de esto, no quería meterme en problemas y solo dejar pasar lo sucedido. Pero tenía el temor de pasar esto yo sola.
Asentí. -Esta bien. -Dije finalmente.
El solo se quedó callado y con la mirada sería, se acomodó un poco para escucharme hablar. Y dijo:
-Dale pues.
Reí por su comentario.
Inhale aire y suspire despacio. -Bueno, después de toparme contigo, ¿se acuerdas, cierto?
-Efectivamente. -Asintió.
-Bueno, fui por mi horario y luego a mi taquilla, en fin, en la primera clase estuve en Artes y el profesor nos puso hacer una escultura de algo cotidiano, como una mujer embarazada, una familia, etc. Que fuera algo motivador...
-Si, su típica primera clase para los de primer semestre, te entiendo. Saque un 6 en esa estúpida cosa -Lo mire frunciendo el ceño. Oh perdón, perdón, progresa... -Se empezó a reír.
Me reí igual. -Que fuera algo motivador, así que hice una escultura de una mujer con otra mujer besándose, realmente me salió bien y el profesor me felicito aunque insinuó decir que era lesbiana, lo cual es incierto...
-¡Puedo ver tu obra! -Exclamó Klov con emoción.
Reí. -Claro, después. Déjame seguir...
-Oh si, perdón. -Klov se puso en postura de "Prestando atención" o "Analizando".
-Entonces me pregunto el porqué elegí esto, y le dije, al final cuando salí del aula, fui directo a mi casillero y al abrirlo, me encontré una nota diciendo «No te creas tanto, niña gay.»
Fue ahí cuando Klov sobresalto sus ojos y me miró seriamente.
-Mira. -Su tono de voz cambio a una más grave y eso me llamó la atención en mili segundos. -Yo estoy completamente seguro que los demás semestres no son tan mamones, te dicen tus cosas, pero en la cara... Y te aseguro una cosa, si los demás se enteran que alguien, ya sea mujer u hombre, andan de fregones, los demás se los friegan en una semana, enseñándoles que aquí no se hace eso. Y si tú vas y te quedas callada, la persona que te hizo eso lo seguirá haciendo e incluso peor, y que bueno que me dijiste, porque me los voy a llevar a la chingada. Hijos de su maldita madre. -Su mirada era sombría y protectora.
Me quede plasmada, no sabía cómo reaccionar.
-No quiero que te vayas a meter en problemas lo correcto sería arreglar el malentendido...
-No. -Me interrumpió de golpe Klov.
-¿No? -Le pregunte.
-No. -Afirmó.
Lo mire desconcertada y el me miró burlón. Luego el volteo a un costado mío y sonríe de oreja a oreja. Hizo señas, como si llamara a alguien y así fue. Vino una chava, de la misma edad de él y Klov se levanto y la cargo abrazándola terminando con un beso en los labios.
Eran novios, una pareja.