Mi vida amorosa y aburrida.

Romeo y Julieta

Faltaba poco para salir de vacaciones, una semana; por lo cual las clases se me hacían más y más eternas.

De nuevo era otra clase aburrida de español.

Todos estábamos mal sentados y ansiosos, en mi caso llevaba en mi mano el lunch. Dieron el toque y la avalancha contra la puerta era gigante.

Salí y de nuevo, corrí hacia el bosque para apartar y alcanzar una mesa. Con suerte la conseguí y simplemente me senté a esperar que lleguen.

Ya reunidos, seguimos hablando sobre Paulina y Rogelio, yo ya los había visto agarrados de las manos, mirándose a la hora de la salida.

-Ya córtalo, si lo conocieras de verdad...- decía Elly, otra amiga de Lya.

- Si es un presumido- Dijo Jenny

Todas decían cosas en contra de Andrés (Rogelio) y lo juzgaban de forma verídica, es un presumido, mal pagado y mentiroso.

En nuestra mesa seguimos hablando sobre esa ya famosa pareja.

Recuerdo que unos días antes tomé como excusa haberme encontrado un billete para preguntar en el salón de Lya, que se encontraba al lado del mío. Cuando llegué, la maestra no estaba y todos le decían cosas a Lya como: Ay Lya ya traes novio.

Preferí irme y quedarme el billete.

Después de un rato, seguíamos hablando; pero algo nos intrrrumpió. Un compañero de Lya llamado Javier estaba mirando a Andrés fijamente y frente a frente. Javy empezó empujando a Andrés y empezarle a decir cosas.

Al parecer a Javier le gusta Lya.

Javier estaba feo, no como Andrés pero creo que Lya no lo voltearía a ver.

-¡Ya por favor dejen de discutir!- Dijo Lya muy enojada.

Dieron el toque y entre susurros nos fuimos al salón.

-¿Romeo, Romeo y tu Julieta?- Dijo un compañero.

-Alguien más me la quiere quitar- Dijo Andrés.

Después de un rato los llamaron para ir a la dirección. Eso me hacía feliz por Andrés pero triste por Lya.