No deje de pensar en Emma, en todo el día. Ni en toda la semana.
Era casi imposible no hacerlo. Segui hablando con ella por mensaje, no era muy frecuente, pero me gustaba. Un día nos pasamos el receso juntos, esta vez no salimos de la escuela, ni fuimos a ninguna plaza, solo, caminamos.
Me gustaba verla, todo el tiempo, su sonrisa fresca y sus expresiones al reirse, era perfecta.
- ¿Es cierto que sales con Emma Queen? - preguto Cassidy.
- ¿Que es para ti salir? - Pregunte yo
- ¿Es tu novia? - continuo - por que yo he escuchado que es una perra.
- No es mi novia Cass, y no le digas asi por favor - exigi y continue haciendo las actividades de matematicas.
- Si no es tu novia, ¿por que la defiendes? - reclamo - aparte, no digo nada que sea mentira - dijo encogiendose de hombros
- Basta Cassidy! - explote - no porque la defienda significa que sea mi novia. Y a mi no me importa lo que sea, no quiero hablar de eso!
Le di la espalda y continue con mi trabajo. La verdad, todo lo que dijo me dejo atontado. En cuanto todos supieron que me gustaba, los rumores de que era una cualquiera, salieron volando. Yo sabia que las cosas no eran asi, pero me molestaba demasiado estar escuchando esas cosas.
Cuando dio el timbre de receso, sali junto con mis amigos y nos dirigimos al patio deportivo. Mientras caminaba me encontre con Fabian. Era un niño de primero, demasiado popular y nada vanidoso. Era lo bueno, el no estaba conciente de lo atractivo que lo encontraban las niñas, fueran de primero o de tercero, y precisamente por eso su ego no estaba muy cargado.
- Hey! Como va todo? - pregunte palmeandole el hombro.
- Pesado - respondio con cara de fastidio. - Ya son los examenes finales y no me siento seguro. Practicamente, no estudie nada con Olmos.
Olmos era el profesor que impartia matemáticas a los Primeros, en Segundos estaba Arevalo, que tambien era más que odiado. Y en Terceros estaba Estrella, del que no habia escuchado ni una queja. No se si por miedo o por que fuera bueno.
- Te aseguro que nadie lo hizo - trate de calmarlo - Sus examenes son de chicle. No lo olvides.
- Si por lo menos. Y tu? Como estas?- pregunto.
- Pues la verdad no lo se - suspire
- Por?
- No me puedo concentrar hace tiempo que no se donde tengo la cabeza- conteste cabizbajo.
- De pura casualidad... no sera por alguna personita en especial? - pregunto elevando las cejas.
- La verdad... si, hay alguien que me tiene... loco!
- En serio? - dijo Fabian con una sonrisa.
- Si y tu? - pregunte
- Pues.... si hay alguien. Es de segundo pero no se si me conoce. Ni siquiera se si sabe de mi existencia. - dijo con la cabeza baja.
- Quien es?
- No lo se. No se como se llama - iba a empezar a reir hasta que me acorde que yo pase un año sin saber el nombre de Emma.
- Te voy a decir algo, a mi me paso lo mismo. A mi la niña de la que te estoy hablando me empezo a gustar desde que estaba en primero y nunca supe su nombre. Hasta hace poco mi primo me dijo como se llamaba y me ayudo a acercarme a ella. Si no me hubiera animado ahorita ella no sabria de mi existencia. Asi que acercate y habla con ella todo va a estar bien. Te lo aseguro.
- No estoy completamente seguro. Es decir, no es una presumida, de hecho no se hace notar. Pero no se si yo le vaya a gustar.
- Tienes todavia un año hasta que se vaya. Aprovechalo.
Le guiñe un ojo y sali corriendo.
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¿Almas Gemelas?
Novela Juvenil- Te amo demasiado! - dijo Emma con sus ojos llorosos - Entonces, ¿por que estas con él? - pregunte con voz ronca - Porque no puedo romperle el corazón. - ¿Pero a mi si? - y sentí como un lagrima se deslizaba por mi mejilla.
