Una vez que su hija desapareció - ¿no crees que Pan duerme mucho últimamente? - pregunto Videl tomando el último sorbo de su café.
- mmm - él asintió con la cabeza.
- ¿qué? - pregunto ella. Sospechando que él estaba pensando en algo.
- no, nada - le resto importancia. Sabía que no era eso que decía su esposa, ya lo sospechaba. Pero no iba a decir nada por el momento. Sabía que en poco tiempo su hija hablaría con él y por su cabeza ya pasaba un plan macabro.
Continuará...
La oficina elegantemente decorada dejaba entrar por sus grandes ventanales los primeros rayos de luz color anaranjados, que daban a entender que el tiempo había pasado muy rápido para su gusto. Miro el reloj de madera que se posaba sobre su escritorio de caoba el cual marcaba las 7.56 de la tarde. Suspiro de alivio al mirar documentos, carpetas y solicitudes que ya había terminado de revisar. Dejó su pluma con tinta de color negro en uno de los cajones a su lado izquierdo sin poder evitar recordar a su hija. Se lo había regalado hace un par de semanas atrás, diciendo que lo había visto en una tienda y sin poder evitarlo se había acordado de él. Ella grabo el nombre de su padre con color plateado y elegante en la pluma y se lo regaló.
Cerro el cajón, se puso de pie y comenzó a ordenar el desorden que tenía sobre el escritorio. Una vez terminado cogió su chaqueta detrás de la silla y volteo, solo para ver una fotografía de su familia. Ahí en el marco de madera decorada estaba la imagen de él abrazando a las dos mujeres que más amaba en el mundo, su hija Pan y su esposa Videl, los tres sonrientes. Tomo el marco y examino la foto de más cerca por unos segundos. Sonrió una vez más recordando el carácter de su hija, tan igual a Videl y su madre Chichi. Luego esa sonrisa se borró al recordar todos los episodios en donde ella lo preocupo de maneras inimaginables. Y a la vez sin escaparse de su mente se vino la imagen de Trunks, ese chico que tenía engatusado a su hija.
Se puso la chaqueta, tomo su maletín y con un último vistazo salio de la oficina cerrando la puerta tras él. La secretaria se puso de pie cuando lo vio salir - hasta mañana señor Son.
- hasta mañana - respondió como todo un caballero, como siempre. Iba a girar por el pasillo cuando de pronto se volvió a ella - ¿qué hace aquí todavía? - le pregunto - debería haberse ido a las 6.30, su hora de salida, no es necesario que se quede hasta que yo me vaya. - le sonrió.
- sí, lo sé - le respondió la joven chica - pero quería adelantar un poco mi trabajo para no estar tan atareada mañana.
- ahh ya veo - empujo sus lentes con el dedo índice hacia arriba, acomodándolos en su nariz. - bueno, que tenga un buen día, nos vemos.
Ella se despidió cortésmente y Gohan por fin salio de la facultad de medicina de la Universidad mas prestigiosa de Japón. En la salida algunos estudiantes y profesores se despedían con gestos de manos o saludos cordiales. Siguió su camino hasta los estacionamientos en donde encontró su automóvil, entro y se dejo caer pesadamente sobre el asiento del piloto, se quedo quieto ahí por un minuto mirando hacia delante y principalmente hacia la nada. Se sentía cansado, no físicamente si no mentalmente. Ser el decano de la facultad de medicina requería mucho trabajo, revisión de documentos, realización de charlas, juntas de la directiva, asesoramientos, solución de algunos problemas, etc. Miro su reloj una vez más, las 8.06 de la tarde. Arranco el motor y partió, ahora a casa de Bulma.
Mientras conducía se dejaba llevar por su mente, recordando viejos tiempos en que no tenía tantas preocupaciones por su cabeza. Tener dos trabajo podía parecer mucho para algunos, pero para él no era tanto. Era sólo hoy que se sentía exhausto y no sabía por qué. El puesto que la amiga peliverde de su padre le había ofrecido hace ya varios años atrás le encantaba. Estar encargado del departamento de Salud y Medicina de corporación cápsula le parecía muy interesante ya que allí se dedicaba a la búsqueda y recolección de datos de enfermedades y sus curas, también la confección de nuevos tratamientos para sanar enfermedades que afectaban a la población. Se acordó cuando Bulma le había ofrecido el puesto por primera vez, él, recién egresado de la universidad ya tenía uno de los puestos más prestigiosos que cualquiera pudiera desear. No era solamente que se lo hubiera ofrecido por ser hijo de su gran amigo, si no más bien porque la mujer de Vegeta sabía el gran potencial que tenía Gohan.
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Sentir
RandomSecuela de "Sentimientos". Ahora que Trunks y Pan están juntos, ¿Cómo se desarrollará la vida de ambos con el paso del tiempo? ¿Será todo amor y paz entre ellos? Nuevos integrantes, enredos, rupturas, problemas y reencuentros, todos generados por el...