Rapunzel

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Rapunzel, un personaje que todos hemos conocido en nuestra infancia, una especie de heroína dulce y cándida que envuelta en su inocencia no puede escaparse de esa enorme torre donde se encuentra presa, pero quien inteligentemente utiliza sus largos cabellos, producto de tantos años de encierro, para que su amado y esperado príncipe azul suba a rescatarla. Pero creo que nadie, ni Disney, se ha detenido a pensar que nuestro personaje también tuvo una historia verdadera que nunca se quiso hacer publica por razones de imagen que haría que Disney cancelara su contrato de manera permanente o que el acoso de los paparatzzi fuera tan grande que pudiera terminar en una tragedia real.

Resulta difícil imaginar que la pobre Rapunzel no llego a esa torre por causa de su inocencia al creer en una bruja malvada, ya que realmente esta bruja que menciona el cuento no es nadie mas que la esposa de aquel rey encantador que Rapunzel conoció mientras el cabalgaba por el bosque, estaba montado en su corcel blanco y su ropaje tan fino y vistoso acorde al brillo de las piedras de su corona, cegaron no solo la vista física de Rapunzel, sino también su vista a la realidad, el rey la invito a cabalgar a lo que ella no pudo negarse y ayudada por sus manos fuertes cabalgaron por ese enorme bosque y fue ahí donde desato por primera vez sus instintos montando ese corcel blanco y en los brazos de ese encantador rey, quien omitió decirle que estaba casado; la experiencia a pesar de ser un tanto dolorosa, como toda primera vez, fue hermosa para la ya no tan inocente Rapunzel y para el rey fue simplemente deliciosa, como se lo expreso a su caballero mientras le narraba los inicios sexuales de la bella chica, sin darse cuenta de que la reina, como acostumbraba, estaba escuchando tras la puerta del palacio, escucho también que existía una cita para el día de mañana y decidió ir en su lugar.

Rapunzel se levanto esa mañana menos adolorida y con una "cosquillita" escondida en su pubis, la cual percibía mucho mas que el dolor y la cual la hacia caminar con mas prisa hacia su encuentro con nuevas experiencias, pero su sorpresa fue grande al ver en lugar del corcel blanco y la sonrisa del guapo rey a una humilde mujer acompañada de dos caballeros, quienes se identificaron como parte de la servidumbre del rey y le dijeron a la chica que la esperaba en la torre mas alta del castillo donde le mostraría sensaciones mas grandes que la de montar sobre un corcel. Rapunzel sufrió un sobresalto en su vientre, adelantándose a su encuentro con el rey y corrió apresuradamente hasta llegar a la torre mas alta del castillo, pero se sorprendió y asusto al no encontrar al rey y al sentir que a sus espaldas la enorme puerta se cerraba, convirtiendo desde ese día a la enorme torre en su prisión.

Fue así como Rapunzel llego a la torre mas alta del castillo y paso ahí por años y años mientras su cabello, que siempre fue hermoso y fuerte crecía y crecía; pero su encierro se hacia mas insoportable cuando aquella "cosquillita" que le hizo sentir el rey aparecía de nuevo y sufría sintiéndose infeliz por estar sola, descubrió que la imaginación es algo supletorio en casos como el suyo y aprendió que sus manos tenían mas usos que el de bordar, como le habían enseñado sus nodrizas y eso le permitía pasar el tiempo con menos nostalgia y mas satisfacción.

Una tarde después de incontables años, Rapunzel miraba por la ventana de la torre y miro a lo lejos un corcel blanco a todo tropel - es mi rey amado - pensó, pero reflexiono de inmediato al recordar todo el tiempo que había pasado ya y empezó a llorar, sus lagrimas parecían cascadas deslizándose por las paredes de la torre; el príncipe, por cierto hijo del rey primer protagonista de nuestra historia, se detuvo frente a la torre y al ver llorando a la hermosa Rapunzel le dijo:
- ¿Por que lloras tanto bella dama? Como puede un rostro tan bello reflejar tanta tristeza?
- Tengo muchos años de estar encerrada en esta torre, le contesto Rapunzel y ya quiero salir, conocer el mundo y el amor.
- Yo te rescatare bella dama y te convertiré en mi princesa, pero necesito subir - le dijo el príncipe, entonces Rapunzel dejo caer de lo alto sus largas y fuertes trenzas.

El príncipe escalo por media hora hasta llegar donde estaba Rapunzel, quien al verlo tan guapo, con sus cabellos rubios y sus ojos azules volvió a sentir esas "cosquillitas" en su vientre y en agradecimiento por que iba a rescatarla lo beso y lo beso, mientras el príncipe seguía en su mente los consejos de su padre y elevaba aun mas alto que la torre los deseos sexuales y reprimidos de Rapunzel hasta que después de una semana de estar juntos en la torre decidieron bajar y cabalgaron hasta el reino, donde los padres del príncipe se sorprendieron de tener ante sus ojos a Rapunzel y siguiendo el protocolo de la corte y cuidando por supuesto la imagen de la realeza, contaron la historia que conocimos de niños, omitiéndole a todos, especialmente a Disney quienes compraron a muy buen precio su historia, el inicio de todo y las cabalgatas nocturnas de Rapunzel y el príncipe por el bosque que ahora llaman encantado debido a gemidos y al tropel de caballos que se escuchan por ahí.

Fin...

No Existe El Final FelizDonde viven las historias. Descúbrelo ahora