Caminas por una desolada calle a altas horas de la madrugada, los perros le aúllan a la luna mientras el posta encandece tus miedos. A pocos metros de tu hogar sientes que alguien te persigue; miras por sobre tu hombro y no ves a nadie sin embargo sientes un escalofrió que corre por tu nuca y baja hasta tus tobillos. Jadeas y aceleras el paso, huyendo de la paranoia que te persigue y busca sucumbirte. El viento golpea los techos de lata; las sombras forman figuras humanas, comienzas a correr hasta llegar a la puerta de entrada y sin vacilar sacas tus llaves, no la consigues, te irritas. Pruebas cada una de ellas mirando a los lados esperando lo peor, los perros te observan, la luna te observa, introduces la llave correcta y entras. Te gobierna la calma, sueltas una sonrisa torcida y a oscuras te acuestas en el sofá, acto patrocinado por un día ajetreado. Estás a punto de quedarte dormido y entonces la luz se enciende, te despabilas, no has sido tú y tampoco vive nadie más contigo.
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Semillas de un yo
Cerita PendekPorciones disconjuntas de un todo, Cortos que deambulan en mi cabeza unificados todos en un mismo contexto. Semillas de un yo.