Hecho a la medida

Capitulo 17 (5-5).

Si!

Mis días en el hotel se estaban agotando, en dos días me mudare, la noche fue bastante larga para mi, el insomnio reinaba, cada vez que intentaba dormir los recuerdos invadían mi mente, era de esas noches en las que mi cuerpo se hartaba de la cama, una posición diferente no ayudaba, contar ovejas menos. Al amanecer tendría que ir a la universidad, estaría segura de que me dormiría en clases, nueve horas entre las rejas del conocimiento, pensar en lo que me esperaba me proporciono unas horas de sueño, cuando sonó el despertador la típica historia de no querer levantarme. Aveces deseaba casarme con la cama, para mi dormir es como practicar tu propio funeral a diferencias de que al día siguiente despertaras.

La agenda de esta mañana estaba muy apretada, solo faltaba una hora para que las clases empezaran y yo aun en el hotel, tenia que llevar el Mustang a encerar, en la tarde vendrían por el, una ultima vuelta no era mala idea, tome mis cosas, le marque al comprador de apellido Valenzuela, lo cite en la universidad a las cuatro de la tarde, lleve el auto al lavadero, al conducir tuve el cuidado debido para no ensuciarlo, lo deje en el estacionamiento, subí el aula y justo a tiempo grite:

- Presentee...- Todos confundidos me miraron, menos la maestra en tonos bajos me dijo:

- Me hubiese gustado dejarte ausente, toma asiento y para la próxima recuerda que esto es un lugar de personas civilizadas.- Esa mujer nunca en la vida me ha soportado, siempre esta de mal humor y nada de lo que hago le place.

- Perra.- Eso se me chispotio, pensé que lo había dicho en mis adentros, pero no, en voz alta, para que no solo me dejen ausente, a ella le llenaría de placer quemarme el modulo.

- Como dijo?- Pregunto mientras bajaba sus lentes y me observara de pies a cabeza.

- Perro, pata, pito, pequeño, parásito, planta...- Una mentirilla mas y directo al infierno.

- Que quiere dejar dicho?- Su cara estaba mas y mas fea.

- Solo es un juego, para ver la agilidad mental...- Un juego mental? enserio: si!, cállate vocesilla en mi cabeza.- Las personas de la mediana edad como usted deberían practicarlo, evita el alzheimer.

- Tome asiento, vuelvo y repito...- Le dije vieja, al parecer lo noto, respiro profundo para continuar.- Y sus jueguitos déjelo para otra ocasión!

Un punto para mi, Dios tu sabes que nada de esto es intencional, así me hiciste, quizás sea un defecto de fabrica, pero me gusta, dos horas con esta mujer luego de tan estresante teatro seria el infierno, le puse atención a cada detalle que salia de su boca, una grabadora era lo que parecía, la muy bruja quería hacerme quedar como una estúpida, pero yo tenia el truco bajo la manga, respondí cada una de sus repentinas preguntas. A la hora del almuerzo me reuní con mis amigas, les comente todo lo que me había pasado en esta semana, mientras tomaba mi malteada y escuchaba detenidamente a Helensilla (Helen) sentí un cosquilleo en el bolsillo de mi pantalón, cuando toque para ver que era, el celular, llamada entrante de Kat, extrañada pare la conversación y conteste:

T:- Kat...- Susurre.- Eres tu?.

K:- Taylor!- Grito emocionada!.

T:- A que se debe tanta felicidad?- Burlesca mente pregunte.

K:- Estoy en el aeropuerto, donde estas?