▪Agente 201▪

Cap. 13

Caminé alrededor de 15 minutos hasta llegar a casa, Austin se había quedado atrás de mi. Al entrar a casa note a Kaila viendo televisión, me senté aun lado de ella y le arrebate la lata de Coca-cola que tenía en las manos.

—Sabes, hay en el refrigerador.—se giró a verme y al parecer noto que algo pasaba— ¿Pasa algo?

—Volví a besar a tu hermano.—terminé la Coca-cola en un solo trago, mire a Kaila y tenía el ceño fruncido.

— ¿Son novios?—cuestionó, negué con la cabeza y me levante del sofa para ir a mi habitación. No quería estar cuando Austin llegara a casa.

—No. Y nunca lo seremos.—sentí los pasos de Kaila detras de mí.

— ¿Por qué lo dices?—ambas entramos a mi cuarto y me sente sobre el borde de la cama.

—Kaila, soy la agente 201 del cuartel secreto de Los Ángeles, no puedo salir con alguién.—Kaila posó su cuerpo delante de mi para fijar su vista hacía a donde me encontraba.

—Gina, se que somos agentes, pero ante todo somos humanos y una persona necesita ser amada.—puse los ojos en blanco ante lo que decía mi amiga, no estaba en contra del amor, solo que tenía un poco de miedo.

—Yo no necesito amor, jamas lo he necesitado.—me pare enfrenté de ella y la miré un poco molesta—Estaba mejor antes de venir a este lugar.

—Sabes, puedes irte si tu quieres.—habló Kaila, noté como su expresión cambió. Me sentí un poco culpable ante las palabras que había dicho, antes de decir algo ella salió del cuarto.

Me recosté un rato sobre mi cama, en estos momentos solo quería hablar con alguién, pero Kaila no era una opción después de nuestra pelea. Tome mi teléfono y marqué el número de Harry.

—Hola Gina.—escuché al otro lado la dulce voz de Harry.

—Hola Harry.

—Te notó deprimida ¿Qué paso?—escuchaba de fondo a gente hablando.

—Sólo necesitó hablar con un amigo.

—Estás con Kaila, ella es tu mejor amiga ¿Por qué quieres hablar conmigo?—me incorporé en la cama y tome uno de los cojines para colocarlo sobre mi regazo.

—Tuve una pequeña pelea con ella, solo quisiera que estuvieras aquí.—reí un poco, en éstos momentos quería un apoyó masculino.

— ¿Quiéres que este contigo en Texas?—preguntó, me imaginé a Harry con una sonrisa en el rostro.

—Sí, Kaila está un poco malhumorada y te necesitó.

—Hablando de Kaila ella ya te dijo...—escuché la puerta e interrumpí a Harry.

—Tengo que colgar, alguién toca la puerta.—no esperé respuesta de Harry y solo colgué.

—Gina.—noté el rostro de Kaila asomarse por la puerta, hice un movimiento con la mano y ella entro—Siento haber reaccionando de esa manera.

—No Kaila. Yo lo siento, tu solo has tratado de ayudarme y yo no supe valorar eso.—me dedicó una pequeña sonrisa y se la devolví.

—No quiero que una discusión arruine nuestra amistad. Y aunque me golpes se que te gusta mi hermano pero lo niegas.—arrojé el cojín justo en su cara.

—Nada arruinará nuestra amistad.—me levanté de la cama y abracé a Kaila.

❝Las mentiras destruyen hasta las amistades más antiguas.❞