*Holly.
Después de hablar con el Director Fury acompañé a Haymitch a su oficina, ansiosa de poder hablar en privado con él, de lo contrario sentía que explotaría. Llegamos y apenas él cerró la puerta, comencé a hablar agitadamente.
- ¡Trajo aquí a una asesina rusa! - Haymitch hizo un gesto con las manos para que bajara la voz, lo intenté, pero fue inútil - ¡Y la está defendiendo!... No le importó nada, ni SHIELD, ni Fury... ni si quiera yo... ¿Qué le sucede? ¿Y en que pensaba Fury? ¿Por qué no la elimina él mismo y ya? ¿Por qué...? ¿Por qué...? - respiré hondo, me tapé la cara con las manos y finalmente me dejé caer en la silla. Haymitch dejo pasar unos minutos antes de ofrecerme una taza de thé.
- ¿Puedo hablar ahora? - me preguntó con precaución. Tomé la taza.
- ¿Tiene algún sedante? - le pregunté mientras olía la infusión.
- Es manzanilla - explicó, mientras se sentaba y acomodaba la silla para estar frente a mí - De bolsita - dijo señalando la caja - Nada de drogas ni sedantes, pero permíteme felicitarte; desconfías incluso de mí...
- No es por eso... - intenté disculparme.
- No, lo digo en serio. Cualquier otro agente hubiera tomado el thé así sin más, bajo estas circunstancias y eso supondría una grave falta al protocolo de defensa que tanto me he empeñado en enseñarte... en fin, volviendo a nuestro tema... si desconfías tanto de la rusa y te cae tan mal ¿Por qué apoyaste a Barton? ¿Por qué no dejar que se defendiera solo? - me preguntó con gesto serio.
- Porque no podía dejarlo solo - le respondí y le di un pequeño sorbo al thé - Toda la agencia está en su contra ahora ¿no? - él asintió levemente - Es mi hermano. Es lo único que tengo en la vida...
- ¿No tenías más familia? - me preguntó. Le lance una dura mirada.
- Sí... una hermana que no quiere volver a verme y que nos da por muertos a mi hermano y a mí, un padre que nos abandonó... una abuela materna tampoco quiere saber de mí... y la otra abuela me odia... mi madre está muerta... - enumeré lentamente.
- Bien. Ya entendí - concedió - Pero si desconfías tanto de la rusa, quizá deberías hablar con Fury.
- No - dije rotundamente - Voy hablar con mi hermano... y haré que me explique todo... investigaré cada detalle...
- ¿Para qué?
- ¿Cómo que para qué? - pregunté incrédula - Para... saber cuáles son sus intenciones con ella...
- Creo que eso ya lo sabes - me dijo, con una sonrisa de suficiencia - No me digas que no le preguntaste qué sentía por ella. Quizá pudiste engañar a Fury, pero no a mí. Dime, ¿tú hermanito se enamoró de una asesina rusa?
- No se lo pregunté - le dije, pero él me miró incrédulo - No pude - aclaré - No me atreví. Tengo miedo de que sea así, de que se haya enamorado de una mala persona... de que salga herido - él suspiró antes de hablar de nuevo.
- No puedes evitar que sea así, eso es parte de la vida - me dijo - La rusa no es la única mujer que puede lastimarlo, eso podría hacerlo cualquier mujer...
- Esa es la cuestión, Haymitch. Hay millones de mujeres en el mundo y él acaba enamorado de su objetivo... de una asesina. ¿Qué tal si todo es una trampa y él acaba muerto?
- Tú hermano es uno de los mejores agentes de SHIELD, estoy seguro de que si se equivoca, sabrá defenderse y enmendar sus errores - me dijo en tono tranquilizador - En cuanto a ti y a tú decisión de apoyarlo... creo que hiciste lo correcto, Barton necesita confiar totalmente en alguien y nadie mejor que tú para eso. - Asentí levemente - Ahora creo que lo mejor es que te vayas a descansar... son casi las tres de la madrugada. Vete a descansar - ordenó Haymitch, al ver que no me movía de la silla - Lo necesitas, han sido muchas emociones en muy poco tiempo... te daré el día libre, para que puedas hablar tranquilamente con Barton y aclarar todas tus dudas, ¿de acuerdo?