capítulo 2

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-¿A qué te refieres?-

Drina le pregunto a Zander.

Zander apretó sus labios, no sabía si era el momento indicado para decirle ¿pero si no, cuando se lo iba a decir? tal vez esta sería su única oportunidad

-tú tienes magia-

Le sonrió Zander.

-¿lo dices como que soy especial, o como que tengo poderes?-

Drina movió los dedos de arriba a abajo al decir "poderes" como imitando al mago de una película que había visto cuando era niña.

-como ambas pero sobretodo como poderes-

Dijo Zander y de inmediato Drina soltó una gran carcajada.

Zander simplemente corrió su vista al notar su reacción se sentía abrumado al ver que no le creía.

-es enserio-

La risa de Drina se detuvo

-sí, claro como si pudiera ser verdad-

Dijo ella con un tono algo amargo.

Cuando tenía cinco años ella solía creer que si deseaba algo con fuerza surgirá magia que la ayudaría concretarlo. Pero todo eso cambio cuando a su madre unos meses después le descubrieron cáncer, la veía llegar descompuesta a su casa luego de quimioterapia, deseaba con todo su corazón que su madre se sanara pero ninguna clase de magia surgió de ella y su madre termino muriendo cuando el cáncer ya se había extendido por todo su cuerpo.

-claro, que lo es-

Dijo mirando a Drina seriamente

-a ver ¿habías visto esto cuando llegaste?-

Zander apunto a la blanca flor que había surgido cuando Drina voto su última lagrima.

-no, pero eso no demuestra nada-

-claro que sí, surgió cuando votaste tu última lágrima-

Drina rio de nuevo y Zander se estaba comenzando a desesperar

-hey no soy tan crédula, podría haber estado ahí antes de que llegáramos y no la haya visto-

Zander se froto los ojos con desesperación y luego se le vino otra idea a su mente. Alzo dos dedos con dirección al cielo y comenzó a rotarlos hasta atraer unas hojas de la copa del árbol en el que estaban apoyados, y cuando ya las tenía levitando sobre sus manos las comenzó a rotar hasta que se convirtieron en una pequeña pulsera de oro con colgantes, que amarro en la muñeca de Drina.

-wow eso fue impresionante-

Zander sonrió pensando que ya la había convencido.

-la verdad es que no pude notar como lo hiciste, deberías trabajar en algún lugar ganarías mucho-

Zander ya había agotado su paciencia pero no se detendría hasta que le creyera.

-dios, que necesito hacer para que me creas que tienes magia-

-Acéptalo, no te voy a creer por mucho que lo intentes, es el mundo real la magia no existe-

Zander toco su frente bajando la mirada, Ya no sabía que más hacer. Entonces sus ojos se encontraron con la muñeca derecha de Drina, estaba cubierta por una fina ceda color azul marino que contrastaba con su blanca piel. Recordó el brillo que emanaba de ambos signos cuando estaban cerca, asique decidió comenzar a sacarse muñequera para mostrarle ambos signos.

Drina no prestaba atención a los actos de Zander simplemente miraba como la gente caminaba y así tranquilizaba un poco sus confusos pensamientos sobre lo que había ocurrido durante el día. Pero esto se vio interrumpido cuando sintió el tibio tacto de los dedos de Zander sobre su piel.

No reaccionó mal, solo lo observó calmada.

-¿Qué es lo que estás haciendo?-

Le dijo a Zander y el solo levantó su mirada.

-hacer que me creas-

-eres una persona muy extraña Zander-

Dijo ella, y él simplemente bajo su mirada concentrándose en desatar la cinta.

Drina no tenía ni la menor idea de porque Zander lo hacía, y se sentía extraña dejando que lo hiciera. Algo de él le emanaba confianza a pesar de recién haberlo conocido.

-¿porque te esmeras tanto en que te crea?-

Zander soltó un suspiró y luego levantó la mirada. Para él no tenía sentido decirle, ya que no le creería.

-Porque eres la única capaz de ayudarme-

En ese instante Zander término de desatar la cinta y la guardo en su bolsillo, luego junto ambas manos esperando que Drina bajará la mirada. En ese instante ambos signos comenzaron a brillar como nunca antes y el tiempo se detuvo.

Drina no podía creerlo, miraba a su alrededor y veía a todos detenidos, la gente no seguía caminando, las aves permanecían en el cielo pero ni siquiera aleteaban.

Solo seguían ahí Zander y ella, pero el temor comenzó a hacerse presente en su corazón y la luz que producían ambos signos comenzó a parpadear hasta pronto extinguirse al separar ambas manos con miedo.

Zander también estaba impresionado, dentro de sus años en la tierra jamás había logrado hacer algo así, no sabía que pensar, decir o reaccionar.

Al apagarse la luz todo volvió a ser como antes la gente caminando, los pájaros siguiendo su rumbo, y los perros ladrando.

Drina quería decir algo pero el temor ya era bastante. Le creía a Zander ya no podía buscar una explicación lógica, simplemente lo miro con temor estaba en shock pero logro salir de el cuándo escucho la sonora risa de emoción de Zander

-¡eso estuvo genial! En todos estos años jamás había visto algo como eso, juntos llegaremos lejos chica-

-que.... Que fue eso-

Drina comenzó a alejarse de a poco de Zander y de inmediato a él se le borro la sonrisa.

-Drina, tranquila, te explicare todo solo necesito tiempo-

No alcanzo a terminar lo que estaba diciendo por que de inmediato ella lo interrumpió pegando un grito que dejo a todos los que estaban en el parque observando la escena.

-¡no! ¡Basta, yo no quiero esto!-

Drina se levantó del pasto, con las lágrimas corriendo, no estaba segura de porque lloraba pero gran parte era el temor a lo que podía causar con eso.

-Drina por favor tranquilízate si me dejas contarte lo que se-

-¡no quiero saber Zander! ¡No quiero volver a verte! ¿¡Quién se supone que eres!?-

Zander se quedó callado, no sabía que decir. En ese momento en que se miraron en silencio los ojos de Drina mataban las esperanzas de Zander, y luego casi las mata para siempre al salir corriendo.

-¡Drina, detente!-

Zander trato de seguirla pero ella ya se encontraba muy lejos.

°°°

Hola!

Bueno, aquí les dejo el nuevo capítulo de la novela.

Para ser sincera lo encontré muy corto, y que no pasaba mucho, pero cada vez que pensaba en cómo podía continuar cambiaba de tema por lo que tendría que crear un nuevo capítulo, y seguiría con el mismo problema. Así que les prometo que el siguiente capítulo será más largo.

En multimedia les dejo una foto de Jane Levy como Drina.

Eso es todo, espero que les haya gustado ;)



The Sign Of the FlowerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora