Capítulo III

4.3K 381 56
                                    

Te ves algo solo... siempre y pues, varios se preguntan cómo eres. ― Esa risita que ya detestaba con solo conocerla en este mismo día y su personalidad detestable, no eran una buena combinación. ¿Ahora que debía hacer? Ni loco le seguía el juego y preguntaba por aquellos que se intrigan por mi persona. Ni debe ser cierto, no confiaré en él; un completo extraño.

Arreglo mi mochila y doy media vuelta, esto se tornaba cada vez más incómodo, por suerte mi anatomía en este caso me ayudó al caminar lo más rápido que pude. No pretendía dejarlo hablando solo para quedar de mal educado, sino que necesitaba salir de ahí, su personalidad me estaba intimidando. ¿Y si era él quién se sentía interesado por mí? ¿Por qué hacer las cosas de esta forma? ¿Para qué?

Kim SeokJin, hoy no es tu día pero espero que ya nada fuera de lo cotidiano suceda, todo estaba yendo a la perfección. ― Pensé en voz alta ya estando dentro de mi apartamento dirigiéndome a mi cuarto y luego al baño para una ducha. Realmente tenía deseos de dormir y descansar por lo sucedido hoy.

Al cerrar mis ojos solo pude ver ese tono lechoso y ojos profundos de Min YoonGi. ― Estoy consciente de que no tengo experiencia en esto... pero que su rostro quede tan presente en mí y notando su personalidad, no creo que sea buena idea. ― Mis ojos casi por acto de reflejo quedaron mirando el cielo en mi cuarto debido a que los abrí abruptamente. ― ¿Estoy pensando en un chico? ¡No! ¡No! ¡No! ¿Será que le vi algunos rasgos afeminados a YoonGi? Aish... no veo nada bueno de esto y sé que debo cuidarme porque siento que desde ahora no estaré solo pero debo tratar de alejarme de él.

Los días pasaron y yo me escondía más de lo habitual, no tenía problemas con eso además que todo iba como yo deseaba, no me sentía observado ya que realmente no quería toparme con YoonGi a pesar de que su rostro no salía de mi mente. ¿Soy demasiado aburrido y por eso las chicas no se inmutan cuando me ven? ¿Para un hombre no lo soy? No sé qué pensar de esto, puede ser que yo imagine todo y YoonGi solo se acercó para ser mi amigo... de una forma bastante rara pero para ser mi amigo al fin y al cabo.

Ya que todo iba bien y en toda la semana pasada no me había encontrado con aquel chico, sentía que podía caminar con naturalidad sin tener que preocuparme que llegara a hablarme con sus frases intrigantes y su confianza en exceso.

SeokJin-si... ¿No crees que estuviste evitándome demasiado ya? ― Sentía mi cuerpo tensarse con cada palabra emanada por esos labios que obviamente ya sabía de quién eran dueños.

Min... Min YoonGi, ¿Por qué haría eso? Yo solo he estado viniendo como siempre y luego retirarme a mi hogar. ― Mis ojos se cruzaron con aquella mirada que ahora se tornaba ¿amable? No dejaría de sorprenderme con este chico jamás.

No es necesario el nerviosismo. Hagamos algo ¿sí? ― Su voz cambió totalmente y lo vi algo pensativo, como si buscara las palabras correctas en su mente ― Empecemos de nuevo. ― Se sentó junto a mi enderezando su espalda para mirarme fijamente y que la sombra del árbol en que nos encontrábamos no dejara de cubrir nuestros rostros ― Soy Min YoonGi, Suga para mis cercanos y me gustaría llevarme bien contigo... muy bien...

¿Eh? ― Para cuando terminó de hablar me sorprendí más aún ¿Acaso seguiría con esas frases raras? Admito que me da un poco de miedo que se quiera "llevar muy bien" conmigo. ― Ah... YoonGi no sé. Estoy algo ocupado con los estudios y hay cosas en las que debo enfocarme más... no creo que sea tiempo de hacer amigos. ― Una sonrisa falsa se perfiló en mi rostro, espero ser bueno y que no me descubra aunque del todo no sería mentira, si hay cosas que no se me dan para nada y debo dedicarles más tiempo de estudio, lo que queda ya es para dormir o descansar observando aquel parque desde mi apartamento.

Sin expresión alguna en su rostro se quedó mirando mis ojos para luego bajar a mis labios provocando que me sonrojara. ― Creo que no nos estamos entendiendo Jinie... Seremos amigos y como buen amigo te acompañaré pero esta vez no dejaré que salgas casi corriendo como el otro día ¿sí? ― Su mirada aún seguía en mis labios y eso me ponía demasiado nervioso, para evitar aquella acción del contrario llevé mi índice a su mejilla corriendo delicadamente su rostro, por suerte dejó mis labios y sonrió, al parecer mi sonrojo era excesivamente notorio. ― Bueno ya que esta todo mejor ¿Me permite acompañarlo en su camino a casa, Jinie? ― De inmediato me levanté para que mis mejillas no estuvieran al alcance de su vista y asentí repetidas veces.

YoonGi... ― Preferí callar y comencé a caminar en silencio por lo incómodo que me ponía su presencia. De vez en cuando lo miraba de reojo y podía notar que iba sonriendo pero en todo el camino no pasó nada interesante, solo caminamos como si cada quien fuera por su cuenta. Al llegar a mi departamento lo invité a pasar, había sido un largo camino, o eso sentí yo.

Se quedó toda la tarde y como ya estaba oscuro le insistí que debía irse por lo peligroso que se tornaban algunos lugares por los que estaban camino a su departamento. Fue un momento muy agradable y me atrevería a decir que conocí al verdadero Min YoonGi, no ese patán intimidador que llegó hablándome por primera vez, también supe que está en la selección de baloncesto en la universidad y que es un gran amante de su almohada, eso explicaría su ojos adormilados la gran parte del día y esa caminata tan pausada y relajada tan única en él.

****

Llevamos dos meses siendo amigos, me es demasiado agradable su presencia pero aún tengo esa extraña sensación de que algo oculta, sin dejar de lado que hace unos cuántos días volví a sentir esa fuerte mirada que me vigila pero cada vez que busco a mi alrededor no hay nadie, le he preguntado a YoonGi repetidas veces si él también tiene la sensación de que lo miran pero dice que mi infinita colección de Mario Bross y amor por las alpacas ya me afectó demasiado, haciendo que imagine cosas donde no las hay, seguido de una estridente risa.

También debo reconocer que el haberme sentido atraído por YoonGi las primeras semanas fue bastante raro. En definitiva, me di cuenta que me llamaba la atención su forma de ser, ¡ES QUE ESTABA LOCO DE PIES A CABEZA!, aun así puedo decir que me agrada y postula para el mejor amigo que jamás pude tener.



From the darkness [NamJin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora