La muñequita me mira sin saber que decir o hacer, en ese momento me siento tan estúpido por haber hecho eso - o al menos por haberlo intentado - sus ojos se ven tan hermosos como en el parque - algo me dice que esta noche será interesante.
-Principito no te sale el sarcasmo - mientras se pone tensa
- en ese caso deberías ser mi profesora particular de sarcasmo - Se acerca un el señor con mi pedido
-Joven pensé que usted... -lo detengo para hablar
-Quiero el pedido aquí, gracias - sin dejar de mirar los ojos a la muñequita
-Como usted diga joven - esboza una sonrisa
La muñequita toma un poco de vino y saca su libro sin tomar en cuenta que aún seguía ahí observando casa gesto que hacía.
-Te gusta ese libro - rompo el silencio incómodo - ¿cómo se llama?
-Me encanta, ¿acaso no has leído ciudades de papel? - me mira frunciendo el ceño
- A decir verdad, no lo he leído - la muñequita me mira con un gesto de desprecio - pero si quieres lo leeré
-No digas que leerás para impresionarme como han hecho muchos hombres, hazlo porque te nace leer, porque quieres saber más.
Sus palabras me conmocionaron y me di cuenta de que Claudia es una chica muy inteligente.
-Inteligente y hermosa, cada vez me sorprendes más - mientras le quitó el libro y sus ojos verdes me quedan mirando fijamente, ésta molesta porque le quité el libro
-Serás muy guapo, pero sigues siendo un patán - siento un dolor cuando dice eso
-¿piensas que soy guapo? - me pongo tenso y luego aclaró mi voz - pues si lo soy, soy muy guapo - respondo con ironía
Hace un esfuerzo por no molestarse - Claro que no, lo dije por cortesía
-¿Qué haces en la ciudad? y no quiero sarcasmo - quería saber más sobre ella
-tuve que venir porque mi madre quería que la visite, además tengo que cerrar un trató acá y la verdad solo vine por eso
-¿te importan más los negocios que tu familia? - me quede sorprendido
-Puede ser, ella nunca me cuidó y ahora quiere que yo la cuidé a ella - se pasa su cabello por su oído - vaya madre la mía
-Al menos tienes una - conteste en un tono muy despacio
- Tú... No... - se pone las dos manos en la boca y parece que se siente culpable - Disculpa Valentino, yo no quería...
- La asesinaron hace mucho, tan sólo tenía cinco años cuando todo paso - la miro a esos hermosos ojos verdes y le sonrío - pero todo pasa por algo
-bueno, tienes razón ¿comemos? - un cambio realmente radical
-claro, las damas primero - le hago un asentimiento
-En ese caso tú deberías comer primero - suelta una risa sincera y se ve hermosa al hacerlo
-Muy graciosa - agarró una rebanada de pizza y se la llevó a la boca - tú come primero - esbozo una sonrisa
Claudia aceptó la rebanada de pizza y la noche se pasó volando, con cada palabra que salía de su boca me hacía sentirme demasiado cómodo. Lamentablemente se hizo muy tarde y no iba a dejar que se vaya tan tarde y mucho menos sola.
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Te Apuesto Un Deseo
Novela JuvenilValentino dejo de lado su infancia tras vivir un infierno, tratara de ser una persona normal aunque su pasado lo haya marcado de por vida. Esta historia no será como otras conocidas, te lo digo desde ya. Una historia llena de cosas inesperadas y so...