Fairy Tail- Nalu- Las cosas han cambiado...

27: Lissana

Narrador Normal

Después de que la rubia y el peli rosa se hayan reconciliado entraron al gremio anunciando que eran pareja, la mayoría del gremio se puso a llorar, algunos lloraban porque su pequeña hermana estaba creciendo y otros porque el tarado de Natsu por fin ya no era asexual. En el momento que el maestro supo de la pareja, armo una fiesta, todos empezaron a cantar y a bailar porque al fin Natsu y Lucy se habían reconciliado, la rubia se subió arriba de una mesa y llamo la atención de todos, todo el gremio se quedo en silencio esperando a que su amiga hablara.

- Como es una fiesta, y seguramente Mirajane igual los hará pagar la cerveza... Entonces... ¡CERVEZA GRATIS PARA TODOS! ¡POR CUENTA DE NATSU! - Dijo Lucy en un modo infantil en el momento que nombro a Natsu.

- ¡Aye!... Espera, ¿Qué? - Dijo Natsu en el momento que escucho a su novia, muy confundido abrió los ojos como platos pensando todo lo que iba a tener que pagar - Mierda.

Lucy se bajo lentamente de la mesa mientras se reía al ver a su novio, al momento lo abrazo haciendo que Natsu volviera a la realidad, le sonrió con ternura para luego besarlo, el sonrió en el momento que sus labios se unieron para luego corresponderle, los dos se sentían cómodos estando juntos, se amaban demasiado.

- Sigo sin entender como es posible que yo haya podido vivir todo este tiempo sin ti, Natsu.

- Te equivocas, porque yo siempre estuve a tu lado, aunque la distancia nos separaba, yo siempre desde lejos te estaba apoyando y esperando a volver a verte - Dijo Natsu en un susurro sobre los labios de su rubia haciendo que esta sonría al escuchar esas dulces palabras

- Te amo mucho Natsu. - Dijo Lucy mirándolo a los ojos con 100% de sinceridad en sus palabras-

- Yo también te amo mucho mi Lucy - Dijo Natsu para luego volver a besarla.

Desde lejos de aquella pareja se encontraba todo el gremio mirándolos, las chicas estaban encantadas con la escena mientras disimuladamente cada una veía a su pareja, algunos chicos, como Gajeel y Grey, estaban riéndose por su amigo, aunque en el interior los dos estaban mas que feliz por ellos.

- ¡¡ERES UNA PERRA!! - Grito una albina de pelo corto mientras entraba por las puertas del gremio, todo los integrantes del gremio se dieron vuelta mirando hacia a la entrada, Natsu y Lucy también se dirigieron a donde estaban los demás, todos se sorprendieron al ver a Lissana transformada mientras estaba con la cara enojada - ¡TÚ! LUCY HEARTFILIA. ME SACASTE A MI HOMBRE, AL AMOR DE MI VIDA, ME SACASTE A TODOS, ERES UNA JODIDA PERRA. -Dijo gritando mientras miraba directamente hacia Lucy, su mirada se fijo hacia Natsu y puso una mirada triste - Natsu... Mi amor, no estés con ella, ella es una perra solo te esta usando, ven conmigo amor, nosotros éramos felices ¿No? al fin y al cabo nos vamos a casar... Tu me lo prometiste.

Todo el gremio estaba confundido sin saber que hacer, Mirajane y Elfman estaban sorprendidos, estaban llorando pero no de alegría, si no porque su hermanita estaba viva pero no era ya ella misma.

- Perdón Lissana, me alegro que estés viva, pero esa promesa que hicimos de chiquitos nunca fue verdad, yo pensaba que el casamiento seria comer, pero ya se lo que es, y yo solo pienso casarme con Lucy. -Dijo Natsu mirando fijamente a Lissana, el no entendía que estaba sucediendo, solo entendía que su amiga de la infancia se había vuelto loca.

La mirada de Lissana cambio y su vista se fijo en aquella rubia que según ella, le había robado al amor de su vida, Lissana dio un paso en modo de ataque, y la mayoría del gremio, hasta el maestro, se pusieron al frente de Lucy en modo de ataque, para defenderla. Lucy no sabia que hacer o decir, ella nunca había conocido a Lissana y no tenia nada en contra de ella, Lucy siempre había querido conocer a la albina para que sean amigas o tal ves hermanas, le habían hablado tan bien de aquella albina que Lucy no reconocía a la persona que estaba casi al frente de ella pasando a los integrantes del gremio.

- Lissana... Hermanita... ¿Qué estas diciendo? - Dijo Mirajane mientras miraba a Lissana, Mirajane después de su encuentro con Laxus bajo al escuchar los gritos de felicidad, al bajar Laxus la había seguido, aquel ahora se encontraba al lado de su hermana en modo de defensa por si la albina atacaba

- Es la verdad Mira, Lucy es una maldita perra y me las va a pagar... ¡TODOS USTEDES ME LAS PAGARAN! ¡SON EL PEOR GREMIO, Y LOS ODIO CON EL CORAZÓN! - En ese momento se escucho un golpe, todos dirigieron su mirada hacia donde provenía el sonido y todos se sorprendieron al ver a Lucy al frente de Lissana dándole una cachetada.

- Odias a las personas que te cuidaron, te amaron, y te hicieron una chica feliz, a la persona que se debería odiar eres a ti, porque mientras tu estas diciendo cosas malas de este gremio, ellos en cambio están hablando bien de ti, ¿Sabes? yo pensaba que podríamos ser hermanas si tu volvías... Pero me di cuenta que no, que lo que decían los demás, eran puras ilusiones, y si no eran ilusiones y eres verdaderamente alguien buena, bondadosa y de buen corazón, demuéstralo, porque ahora solo estas mostrando a una perra en celo tratando de matar a alguien que no te a echo nada, y si soy culpable de que me haya enamorado de Natsu, entonces no me declaro inocente, si no que me declaro culpable, porque lo amo, y como tu lo amas también, deberías saber que cuando uno ama, no trata de hacerle mal al otro alejándolo de quien ama, si no que lo deja ser feliz - Lucy se quedo callada esperando una respuesta de parte de Lissana, pero lo único que encontró fue lagrimas que corrían por la cara de Lissana - Por favor vete del gremio, y regresa cuando hayas razonado y pensado lo que te dije, si te arrepientes vuelve, y si te quieres vengar, hazlo, pero recuerda que el bien siempre gana al mal.

Lissana se dio la vuelta y se fue en silencio, todo el gremio estaba serio, solo Elfman y Mirajane estaban demostrando tristeza al ver a su hermanita, se quedaron callados al escuchar las palabras de Lucy, porque sabia que ella estaba teniendo la razón, y aunque les duela admitirlo, su hermana estaba actuando como una perra.