Desperté en mi cama, bastante aturdida y con dolor de cabeza, no recuerdo como llegué aquí. Al intentar levantarme, unos brazos me tiraron de nuevo a la cama, eso me asustó, miré a ver quién era el dueño de esos brazos... Ethan.
¿Qué narices hace en mi casa? No recuerdo haberlo dejado entrar... Bueno ahora que lo pienso, recuerdo haber pasado la noche con él y tuve aquella conversación sobre... Espera, eso era un sueño ¿no?
Volví a fijarme en el chico que estaba a mi lado en mi cama, su pelo negro y alborotado caía sobre su cara, formando algunos rulos casi perfectos, parecían hechos apropósito, tenía una barba de unos tres días de estas que pican si las tocas, la boca entreabierta y su respiración era suave, como la de un bebé... Todo es muy bonito, pero necesito romper esta armonía.
- ¡Ethan! - Grité - ¡Despierta! - Le tiré de la cama.
- Joder - se quejó - Preciosa ¿Era necesario romperme la espalda de tal manera?
- Tampoco es para tanto, no te quejes, al menos ya estás despierto.
- Que, entonces... - Dijo levantándose del suelo a duras penas y sentándose en la cama con las piernas cruzadas - Que opinas acerca de... ya sabes, lo que soy.
- ¿Lo que eres?
- Si, lo que te dije ayer Domi.
- Así que no fue un sueño... genial - susurré - ¡Mi amigo es un vampiro! Quien lo diría... - Sonrió - En fin ¿Desayunamos? - Intenté sonar lo más normal posible, él asintió.
Bajamos las escaleras y fuimos a la cocina, Ethan se sentó en una silla.
- ¿Qué te preparo?
- Sinceramente, la comida humana no me gusta, me debilita.
- Pues aquí es lo único que hay - me crucé de brazos.
- ¿Hay animales cerca?
- La vecina tiene ardillas.
- ¿Ardillas? Pueden valer, enseguida vuelvo.
- Es la casa de la derecha, la azul.
- De acuerdo - Salió por la ventana.
Me hice cereales y me senté en la mesa a que Ethan terminara de comerse las ardillas. Nunca imagine que diría algo como esto... Tardó como unos diez minutos en volver.
- Ya estoy.
- ¿Estaban buenas? - Dije como si yo todos los días viera como personas comen ardillas.
- Sí, bueno, no son suficiente pero creo que aguantaré hasta la noche.
- Tienes un poco de sangre ahí - dije mientras metía una cucharada de cereales en mi boca.
- ¿Dónde? ¿Aquí? - Se señaló el labio.
- No, aquí en el moflete - dije cogiendo una servilleta y limpiándolo.
- G-Gracias - Se colocó el pelo - Se me hace extraño.
- ¿El qué? - dije mientras volvía a sentarme para seguir desayunando.
- Al fin y al cabo eres una humana.
- Pasas todo el día con humanos en el instituto ¿no es así?
- Pero ellos no saben lo que soy, tú sí - Asentí despreocupada dándole la razón.
- Dejando de lado que yo soy humana y tu no, me alegra que te hayas comido las ardillas, era muy pesadas.
- Entonces, mañana me como las que faltaron - Me guiñó un ojo - ¿Qué vamos a hacer hoy?
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El nuevo® 1Temporada (EN EDICIÓN)
WampiryNada sucede por casualidad, en el fondo las cosas tienen su plan secreto, aunque nosotros no lo entendamos. Nada es lo que parece. Ni nadie es quién dice ser. **** Todos los derechos reservados. No se acepta copia y/o adaptación de la historia. Recu...