Infinity (Camren)

Capitulo 21

Camila POV
Le di un leve beso en su mejilla que por cierto estaba fría, me gusta su piel, es suave y fría. Pasé mi mano en su mejilla y la acaricie lentamente, con mi dedo índice seque una pequeña lagrima que salía de sus ojos verdes, esa lagrima estaba arruinando su maquillaje pero para mí... Lauren tal vez no sea la chica más dulce y gentil que he conocido en mi vida pero, Lauren es como un guardián, es fuerte y valiente, de cierta manera hay veces que me siento segura a su lado. Aunque esa lagrima demostró que hay personas que son muy débiles por dentro aunque por afuera sean unas rocas.
Me acerqué más a su mejilla, otra lagrima salió de sus ojos. Mis labios se acercaron a dicha lagrima, un beso corto seco sus lágrimas.
—Es hora de irnos—le susurré a su oído. Ella sonrió y parpadeo varias veces parar parar esas lagrimas, prendió el auto y dejó salir un suspiro.
—Camila, hay veces en que odio y te amo a la vez
Habíamos emprendido un viaje a mitad de la noche. Habíamos tomado la carretera principal y era solamente parar nosotras.
Baje un poco la ventana para que el dulce aire entrara al auto y rozara en mi rostro.
Cerré mis ojos y sentí como el viento hacia el resto.
—Camila—interrumpió Lauren, abrí los ojos y dirigí mi mirada hacia ella.—Todavía no comprendo muy bien ¿por qué te ofreciste a acompañarme?
Baje un poco la mirada, deje salir un suspiro y pensé por un momento, es decir, el día que me ofrecí fue de manera involuntaria.
—Porque eso hacen las amigas.—dije con una sonrisa.
—¿Tú? Mi amiga—contesto ella con una sonrisa sarcástica.—Ok, amiga mía, estamos cerca del aeropuerto y espero que no seas de esas amigas que se marean mucho y les da miedo las turbulencias ¿verdad que no eres así amiga?—bueno tal vez había momento en que Lauren estaba actuando como Lauren. Así que solo rodé los ojos y cruzó mis brazos.

Lauren POV
Habíamos llegado ya al aeropuerto, baje un poco más la velocidad para poder estacionarme en un buen lugar lo cual fue muy difícil. Me acercaba más al parabrisas del auto, trataba de ver si había algún lugar disponible pero al parecer exactamente hoy a varias personas se les ocurre viajar y dejar sus autos aquí...¿¡Qué no podían otro día!?
—Lauren, no hay lugar—exclamó Camila.
—¿¡Es enserio!? Eres muy lista Cabello, que bueno que te traje—respondí con una gran sonrisa, la chica mejor dirigió su mirada hacia su ventana izquierda.
—¡Yei!—exclamé al ver que un carro estaba listo para desocupar su lugar, me hice a un lado para agilizarlo. Me recargo en el asiento y puse mis manos detrás de mi nuca, mire a mi "amiga", estaba enojada pues tenía sus brazos cruzados y sus labios torcidos.
Dibuje una leve sonrisa en mis labios y le di un leve goleo en en el brazo para que reaccionara.
Arranque de nuevo el auto y lo estacione, lo apague y gire un poco mi cuerpo para ver a Camila.—No te enojes conmigo, fue broma, me gusto que hayas venido conmigo—dije mientas le daba otro golpe en el brazo.
—Aveces eres muy mala conmigo—exclamó ella en voz baja. Rodé mis ojos y me acerqué a su mejilla, le di un leve beso.—¡Vamos! No hay que perder el vuelo—dicho eso abrí la puerta y me dirigí a la cajuela donde saque todas nuestras cosas. Le puse la alarma y estaba a punto de dirigirme a la entrada del aeropuerto pero note que Camila seguía en el auto.
—No soy de esas chicas que le abren la puerta a otras personas, eso se me hace muy estupido pero bueno...—abrí la puerta y abanique mi brazo para indicarle que saliera del auto.
Camila salí un poco temerosa, ha de ser porque solo traía un leve suéter y el clima estaba del asco. Las nubes habían tapado la luna, el viento era más frío y percatamos que unas cuantas gotas de lluvia caían.
—¡Vamos! No quiero que te me mueras de frío—dicho eso cerré la puerta con seguro y caminamos lo más rápido a la entrada del aeropuerto que por suerte estaba más caliente.
No tuvimos que hacer fila ni nada de eso, solo pasamos al pasillo 43 el cual estaba vacío. Le dimos los boletos a una chica de pelo rubio, ojos azules, piel blanca, tenía una mini falda y una camisa blanca. Era linda pero venía con Camila así que agite mi cabeza y solo le di los boletos. Ella con una gran sonrisa nos dio paso para abordar.
Entrando al avión el cual no estaba lleno de gente, solo había una pareja, una mujer con su bebé y un hombre que ya estaba muy dormido.
Le indique a Camila cuales eran nuestros lugares, ella pidió la ventana, no tuve ningún problema. Se sentó muy feliz y saco de su bolsillo de su pantalón su celular, al parecer ella iba a tener una distracción durante el vuelo.
Puse nuestras cosas arriba de nuestros asientos, me senté de golpe en mi asiento. Me puse el cinturón de seguridad y recargue mi cabeza en el cómodo asiento, no había pasado ni diez segundos y ya no sabía qué hacer, empezaba a mover mis pies de manera nerviosa y mire de reojo a mi acompañante.
Ella estaba clavada en su celular, abría los ojos como plato y cada vez más se pegaba el celular en la cara. La miraba algo extraña pero fue hasta que ella lanzó un grito de desesperación y bloqueo su celular.
—¿Qué pasó?—pregunte, tuve que preguntar ya que quería saber que era lo que estaba haciendo.
—Tal vez me consideres loca, pero... A que escritora se le ocurre dejarme a mitad de oración ¿qué se cree?—dijo de manera rápida. Así que tome su celular y vi que ella seguía en la misma... ¡Esto yo lo escribí! ¿Por qué? Tuve que leer lo que ella estaba leyendo, lo leía detalladamente, cada palabra yo la había escrito, cada sentimiento era sacado de mis pensamientos, todo eso era mío y ella ¿lo estaba leyendo? ¿Lee mi novela? agite mi cabeza varías veces para pensar que lo que estaba viendo era un sueño.
—Dámelo, me gusta como escribe esta chica solo que actualiza después de mil años... Bueno, tendré que leer otra cosa—exclamó Camila mientras arrebataba su celular de mis manos.

N/A
Hola! Perdón por si hay alguna falta de ortografía o algo mal redactado.
L@s amo

P. D. Voten y comenten eso me impulsa a seguir escribiendo.