Solo tu podrás ser mi princesa

Parte 1. Celos

Tenia dudas al publicar esta historia ya que me encanta este Ship.
La portada e imágenes es algo en lo que trabajaré mientras desarrollo la historia.
Digamos que es una portada temporal.
Me disculpo por los errores ortográficos que llegue a tener la lectura.
¡Y disfruten!
Nunca antes escribi Lemon...

-¡Fue genial!, no puedo creer que hayas tenido el valor de enfrentarte a tu propia madre Mal- comentaba carlos asombrado mientras caminaba al lado de Mal que solamente mantenía una sonrisa
-¡¿Tu crees!?, pues dejame decirte que puedo jurar a que fue la misma sensación que tu tuviste cuando superaste tu miedo hacia los Canes!- respondió con una risa, Mal se abalanzó hacia Carlós y lo tomo por el cuello para revolverle el cabello, un gesto que demuestra la confianza ganada en todos los años que estuvieron juntos en esa isla
-¡Oye basta!- se defendía Carlos que estaba muy rojo
-Obligame niño perro- Mal lo provocaba mientras le sacaba la lengua de forma burlona, ellos jugaban como niños y no se percataron que se acercaban hacia ellos Jay y Evie, que al mirar aquella escena se miraban sorprendidos, Jake tosió para llamar la atención de ambos.
-Disculpen jóvenes, saben donde se encuentra su guarderia? O están perdidos los bebes- arrugando la nariz y comenzó a seguirles el juego, Evie no pudo evitar reír ante la actuación de Jay, realmente se veían tan felices, tan relajados, sin preocuparse por nada mas que su felicidad.

Realmente estaba enternecida, ¿en que momento dejaron de vivir estas situaciones? ¿Como fue que dejo de mirar un segundo, y ya habían crecido? ¿cuando fue que esa isla robo su infancia?

Simplemente negó con la cabeza,no sirve de nada darle vueltas al asunto, lo importante es que todos están aquí, con ella, y era momento de crear nuevos recuerdos juntos.
-Enserio son todos unos niños!- decía Evie entre carcajadas, mientras se reía el resto se miraba, para luego dedicarse una sonrisa traviesa y mirarla nuevamente, la misma no paraba de reir , y cuando les devolvió la miraba ya era tarde. todos saltaron hacia ella para hacerle cosquillas
-Ya paren chicos. ¡¡¡No es justo!!!- Gritaba entre carcajadas. no podía continuar hablando pues reírse la dejaba sin aire.

-¿Tres en mi contra? no es justo- todos reían y se miraban, dejaron de molestar a Evie para arrodillarse en el pasto, cuando se miraban las caras, todos sonrieron pues la paz se apoderaba de sus cuerpos, solo estar en ese momento justo, sin procuparse por robar, o por ser robados, o inclusos peores cosas, solo siendo ellos mismos, en su nueva versión, era algo para disfrutarse sin duda alguna.

-Yo propongo un todos contra todos como en los viejos tiempos- dijo esta vez Jay para romper el hielo, todos se tensaron y se miraban los unos a los otros pero esta vez eran miradas cautelosas, de pronto el más alto rompió de nuevo la tension saltando hacia Carlos para tener una lucha "Amistosa" que siempre tenían, Evie tenia los ojos muy abiertos y Mal sonreia
-Muy bien, !¿Que esperas?!-Retaba a Evie, que cuando la miro, se puso de pie se sacudió su vestido sutilmente y se propuso a responderle con cierto aire engreído.
Eran parte de ella... esos aires.

Mal pensaba realmente en lo odioso que era admitirlo, pero a muy pocas personas le quedaba bien ese papel, pero Evie, ella simplemente le salia tan natural, que te enganchaba con sus encantos, e incluso admirabas su engreídas palabras, como si fuera lo mas único y sorprendente que hubieras escuchado o visto, digna para admirar, como una musa, o la joya mas única que se pueda poseer. Ese era solo un poco del poder en el que te envolvía Evie.

A Mal particularmente le encantaba cuando Evie hacia eso, es como si solo ella detallara cada movimiento de sus labios, cada palabra articulada con su voz, que la ojiverde realmente consideraba perfecta, y aun no ha llegado a conocer a alguien que rivalice con esa voz, esa voz que hace que olvides lo demás y quieras cerrar tus ojos solo para escucharla, y grabartela en tu mente, con la ilusión de pensar que esas palabras que dice con esos tonos gruesos y sensuales tan perfectas solo serán para ella.
-Disculpa, pero... A una Princesa no se la dan ordenes- decía haciendo énfasis en esa palabra,para luego subir su mano al rostro y sonreír altaneramente, realizo una seña para que Mal atacara primero coquetamente.