Capitulo 15

14.2K 1K 68
                                    

Bienvenida a la familia 

Su voz es tan irritante que puede poner de malas a un hada con solo saludar, es exasperarte su modo de ver las cosas y su ignorancia ante la situación. No se como Bladimir la puede aguantar, se que llevamos la misma sangre... pero ¡Vamos! hablar con ella es como hablar con un niño de 1 año haciendo un escándalo. 

- Hija ¡¿Por que no saludas?!- pregunto con voz alegre- Nos has extrañado ¿verdad?

- No. No soy tu hija, y no tengo por que saludar si no quiero- dije secamente 

- ¡Miriam Nadelina Ladys Manouchehri, no le hables así a tu madre!- exigió

- ¡No soy Miriam Nadelina Ladys Manouchehri! ¡Mi nombre es NOAH MIRANDA REDIC BALBONTI! ¡Y ella no es mi madre, mi madre es castaña ojos negros y es una bruja! ¡Y para tu información esta enterrada a 3 metros bajo tierra!- grite enojada

- ¡No me alces la voz señorita!¡Ten mas respeto a tu padre!- grito furioso 

- ¡Por que hayas puesto la semilla no te da el derecho de ser mi padre!- grite de la misma forma, me fulmino con la mirada y le respondí de la misma forma.

- ¡Vasta! ¿por que tanto escándalo?- pregunto el Alfa, Bladimir y yo le miramos mal 

- ¡Cállate!- gruñí enojada, y pude notar que no fui la única que le contesto mal al jefe. Bladimir al darse cuenta de su error, suspiro fuerte mente y acomodo su traje. 

- Lo siento, Alfa, pero mi hija me saca de quicio demasiadas veces- menciono educada mente. Pude sentir como mi dentadura crecía y mis uñas crecer rápidamente. 

- ¡No soy tu hija!- gruñí 

-Si lo eres y me debes respeto mocosa ¡vuélveme a gruñir y...- lo interrumpí 

- Te pateare el culo.- lo arremede ridículamente- me has dicho esas mierdas antes ¡Y la que termina pateando culos soy yo!- reñí  

- ¡No! ¡Yo soy el que termina pateando tu culo, y si no quieres que arranque tu garganta mas vale que me obedezcas, así que sube al auto y hazte cargo de tu manada!- rugió 

- ¡No es mi manada! ¡¿Por que no le pides a la zorra de tu hija que se haga cargo?!- 

Las puertas se abrieron estrepitosamente dejando mis palabras al aire, una chica rubia entro alegremente, sus ojos son pequeños con pestañas alargadas, labios finos y rosados, mejillas sonrosadas y redondas, cabello largo, rubio y muy lacio, piernas largas y débiles, delgada con complexión fina. 

-¡Hermanita!- chillo alegremente 

Su voz era como escuchar un piano desafinado... Irritante. Mi ira creció al momento en el que intento abrazarme, pedazo de hipócrita. Antes de que me abrazara Sina por acto reflejo, tomo control de mi cuerpo, la tomo del cuello y la azoto en el piso 

- ¡Tu y yo no somos hermanas! ¡Yo jamas seré hermana de alguien como tu!- gruñí mirándola con desprecio 

- Pe..ro... no.. puedo..res..pirar- susurro y la solté de golpe

- Te dejare vivir solo para que te hagas cargo de la manada- gruñí, me levante de golpe al notar que estaba cubierta por una camisa solamente.

- ¿Ya lo encontraste?- gruño Bladimir

- Eso no es de tu incumbencia...- gruñí 

- ¿Les gustaría quedarse a cenar? Necesito hablar unas cosas con usted, Alfa Bladimir- dijo seriamente

- Esta bien... Dile a la manada que regrese al hotel, y dile a Hamilton que venga de inmediato- le ordeno a Leiá, esta salio corriendo hacia la puerta, dejándola entre abierta, donde dos pequeñas cabezas se asomaron y me observaron con detenimiento. Abrieron la puerta de par en par y corrieron hacia mi dos pequeños niños castaños, sus ojos eran grandes, y muy lindos, uno es hombre y la otra es mujer. El pequeño llevaba un adorable traje y la pequeña y lindo vestido azul. 

El es MIO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora