Llamadas.

508 12 0
                                    

No debo pelear con Carlos, eso no me beneficiaría para nada. Él es una distracción a mis padres y a las demás personas de que estoy andando con Harry, ¡Harry! Se me vino en la mente, no he hablado con él desde el primer día y eso fue hace unos días, lo extraño.

Busqué mi celular, suspiré. Estoy nerviosa, no quiero que se acabe esto. Marcaba su número lentamente mordiéndome el labio de la preocupación y miedo.

*

-¿Aló? – La voz ronca que esperaba contestó en la otra línea.

- ¿Harry? – Pregunté confiada.

- ¡ __ (tn)! ¿Cómo estás, pequeña?

- Bien. – Dije en tono seco y sintiéndome la peor en este momento. – Te extraño mucho ¿sabes? – Mis ojos empezaron a desagarrar lágrimas, estaba preocupada por lo de Calor y también obviamente lo extrañaba.

- Yo también te extraño. – Paró. - ¿Qué tienes mi princesa?

- Nada, solo emoción… - Dije aún llorando.

- Cuéntame, me preocupa verte así, enserio. Quisiera estar contigo en este momento, abrazándote…

- Peleé con Carlos… Creo que por ahora no podemos andar…

- ¿Qué te hizo? – Dijo frío.

- No es nada importante, es solo una peleíta de amigos, nada por qué preocuparse. – Recordé todo lo que pasó, no podía contarle a Harry. Esas cosas son de Carlos y yo.

- ¿Segura  que no me tengo que preocupar?

- Segura. – Sonreí fingidamente aunque no me estuviera viendo. – Hablamos luego, Harry.

- ¿Vas a ir al concierto, verdad? De hecho, ahora mismo estoy ensayando…

- Depende como estén las cosas, Harry.

- Ok chao, aquí me están mandando a cerrar porq- Se colgó en la otra línea.

Dejé mi celular a un lado de la cama, me arrecosté a ella. Me concentré en mirar el techo, ahora me acuerdo de que nunca he hecho esto. De hecho, me doy cuenta de que mi cuarto está pintado de azul claro… Me acuerdo ese día perfectamente, elegí este cuarto porque es mi color favorito. Poco original ¿no?

Aggh, tengo que disculparme con Carlooos. Tengo que ir a ese concierto.

-¡LEGUÉEEE!- Gritó mi mamá desde abajo cerrando la entrada de la casa.

No tengo ganas de salir de este cuarto, ni tampoco ganas de hablar con nadie. No estoy bien pero tampoco estoy mal, definitivamente no sé cómo me siento en este momento.

*Toc, toc* Sonó desde la puerta, es mi mamá tocando de seguro.

-Hija, ¿estás ahí? ¿Te sientes bien?

- Sí mamá estoy bien. –Respondí por igual.

- No has comido, tu comida aún sigue ahí ¿No vas a comer? – Dice.

- No, luego. No tengo hambre. - ¿Quién iba a comer así?

Sentí sus pisadas alejarse lentamente.

Suena mi celular, lo contesto.

-¿Ahora qué? – Contesté de mala gana.

- Amiga, soy yo, Karen. – Dijo. - ¿Estás bien? ¿Peleaste con Carlos, verdad?

- …

- Me lo imaginaba… - Dijo. - ¿Cómo fue eso? Ustedes estaba bien, con un humor a mil, ¿qué pasó?

- No sé, solo pasó. – Me siento mal, las lágrimas corrían rápidamente en mi rostro necesito a alguien con quien hablar, al menos que no sea de ese tema. – Vente. – Le dije.

Cerré la llamada rápidamente sin importar lo que iba a decirme, dejé mi celular a un lado.

En 5 minutos o 10 llegó Karen a mi casa, amablemente saludó a mi mamá y las 2 subimos a mi cuarto.

-Sabemos las dos que no puedes pelear con él. – Dijo sentándose en mi cama.

- Lo sé. – Suspiré y me senté también.

- ¿Qué vas a hacer ahora?

- ¿Disculparme? – Dije en tono de duda.

- ¿Cuándo lo vas a hacer?

- ¡No lo sé! – Respondí.

- Ok…

Karen estuvo toda la tarde conmigo, me obligó a comer ya que no me era bueno para mi salud. Hicimos finalmente los deberes justas y a las 7 o más o menos se fue de mi casa.

Amar hasta morir -Harry Styles. (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora