Obsessed {j.b}

2.

Estaba recostada en la cama de Sarah ya lista y preparada, mientras ella se terminaba de arreglar. Sarah me había prestado su ropa porque decía que era imposible que me deje ir con la que estaba en su casa, siempre tan exagerada. Finalmente me puse un vestido azul al cuerpo, con la espalda al descubierto y unos tacones negros de plataforma. Estaba viendo la televisión cuando ella salió del baño.

-Wow! Te ves hermosa zorra!.- le dije mirando su vestido ajustado arriba y algo más suelto abajo. Le quedaba perfectamente, y resaltaba mucho sus pechos. Sarah era una chica muy hermosa aunque nunca lo reconozca, pero cada vez que le decía que debería ser modelo, ella decía que no le agradaba para nada la idea.

-También tu! Como desearía tu cabello mal.dita perra.- nos reímos juntas.

Justo en ese momento sonó el timbre de la casa, y bajamos prácticamente corriendo porque sabíamos que eran las chicas. Sarah abrió y todas soltamos un gritito al vernos.

-Las extrañaba tanto!.- Gritó Amber y saltó sobre nosotras con Emily y Amy detrás.

-Me están aplastando el cabello que me acabo de cepillar idi.otas!.- Chilló Sarah y todas reímos excepto ella.

-Debemos irnos! Seguramente Brad me está esperando ya.- Dijo Emily sin pensar.

-¿Quién es Brad y por qué no sabía de él,Emily?- le dije y se dió cuenta de lo que había confesado.

-Un chico que la trae loca.- Amber guiñó el ojo.

-¿Nos pensaba decir algo señorita Emily?.- dijo Sarah.

-Yo...La verdad es que estoy tan distraída, él simplemente...me desconecta.- dicho esto se sonrojó. Emily era la más inocente de nosotras, era raro oírla hablar de que le gustaba un chico.

-Ya veo...EMILY ESTÁ ENAMORADA!.- gritó Sarah.

-Claro que no! El sólo me gusta Sarah, no exageres.- rodó los ojos.- Vámonos de una vez.

Subimos al auto de Amy, que por cierto estaba algo callada desde que llegó.

-Amy, ¿Está todo bien?.- Me miró y supe al instante que no.

-Si, ¿Por qué debería no estarlo?.- dijo y volvió la vista al frente.

-Sabes que puedes contarme lo que sea.

-Pues no ocurre nada Becca.- Apretó los labios.

-¿Segura?

-Segura.- Sonrío. Pero pude notarlo, ella estaba ocultando algo. No quería seguirla presionando así que me uní a la conversación de las chicas hasta que llegamos al club.

++++

Sarah y Amber estaban bailando y ríendo en la pista como locas, ambas ya consumidas por el efecto del alcohol. Emily había encontrado a el tal Brad y estaba con él en alguna parte, y Amy había desaparecido, fué simplemente pisar el lugar que ya la había perdido de vista. Yo estaba ahora mismo en la barra, creo que ya había tomado lo suficiente. Pero no estaba ebria, nunca lo estoy, nunca llego a tomar demasiado. Me estaba aburriendo y hartando de los constantes coqueteos del barman, así que me paré y me dirigí hacía el baño de damas.

Cuando recién habíamos empezado a salir a bailar todas juntas, nuestra única condición era si o si ir al baño juntas, no nos permitíamos ir solas y me reí de eso. Porque ahora estábamos todas dispersas por ese enorme lugar.

Una vez en el baño, hice mis necesidades, me moje la cara y lavé las manos. Estaba por salir cuando escuche un sonido extraño, como una queja. Automáticamente pensé que era un gemido, ya que no era raro que estuvieran teniendo relaciones en este lugar, pero cuando el sonido que obviamente alguien emitía volvió a escucharse me sorprendí al darme cuenta que era una queja de dolor. Alguien estaba sollozando y quejándose. En ese momento supe que tenía que irme, que no era bueno que entre ahí, pero mi instinto hizo todo lo contrario a lo que mi mente decía y me fuí acercando cada vez más. Casi suelto un grito cuando vi sangre por debajo de la puerta. Alguien estaba sangrando ahí dentro.

Pensé en pedir ayuda, en llamar a alguien, pero nuevamente mi instinto me jugó en contra y abrió la puerta. Se me cortó el aliento.

-...Amy...- No sabía que hacer.

-Santa mier.da Becca.- intentó levantarse pero soltó un quejido que me trajo nuevamente a la realidad.

-AMY! ¿QUÉ CARAJ.OS HA SUCEDIDO?- me acerqué a ella pero me esquivó con la mano.- ¿QUIÉN TE HIZO ESTO?, ESPERA LLAMARÉ A LAS CHICAS!.- Sentí como me arrebataba el celular de una patada.

-No harás nada Becca.- La miré estupefacta.

-¿Qué quieres decir?

-Exactamente lo que dije.- intentó levantarse y esta vez la ayudé.

-PERO ESTÁS SANGRANDO, AMY ¡POR DIOS!.- Sentí su mano golpear con mi mejilla.- ¿Qué dem.onios?

-No puedes decir nada de lo que acabas de ver, Becca.- frunció el ceño.- Yo... lo siento por eso.- miro al suelo.

-¿Qué sucedió Amy?.

-No puedes saberlo Becca.

-¿Por qué no?.

-No quiero que termines como yo.

-Amy me asustas Dios, ¿Cómo puedo ayudarte?.

-No puedes! Nadie puede ayudarme! Y no tienes que involucrarte en esto! Te quiero Becca, por favor, no quiero que te ocurra nada.- comenzó a sollozar.

-AMY, ¿ESTÁS LOCA?! IREMOS YA A UN HOSPITAL Y ME CONTARÁS LUEGO.

-¡¿NO ENTIENDES!? ES MUY PELIGROSO BECCA! TIENES QUE OLVIDAR ESTO.- Intentó salir corriendo pero la tomé del brazo.

-¿Por qué?.- Me miró y entendí todo. Ella no me decía para protegerme de algo, de alguien. Ella tenía miedo, mucho miedo.

-No le digas a nadie lo que viste.- dicho esto se fué corriendo dejándome perpleja..