Carta a Copper

17 5 0
                                    

Mi problema eres TÚ. Te considero un amigo cuando tú solo te quieres mantener en la zona de conocido o compañero de clase. Decido no hablarte, no por la razón de que tú te puedas volver a romper, sino que yo me hiera más a mí misma. Crees que no eres nada para mí, pero eres más de lo que piensas. Al no hablarme no significa que no te duela, te puede doler menos pero aun así haces daño a DOS personas no solo a ti.

Te veo porque no hay más remedio. No te hablo, no te escucho, no contesto a tus mensajes; pero el olor de tu perfume que desprendes al moverte, me incita a olerlo, es delicia para mis fosas nasales. Me dejaste de dañar y deje de dañarme, salió el efecto contrario pero el resultado fue el mejor.

Solíamos ser como perro y gato, pero con nuestra fuerza de voluntad conseguimos llevarnos bien, demasiado bien. Ese bien que nos destruyó. Empezamos con mal pie, pero conseguimos repararlo mediante mensajes. Horas y horas mensajeándonos. Incluso algunas veces hablando por teléfono, eso ya quería decir que nuestra relación había mejorado y que se estaba reparando del bache que tuvo al principio.

Recuerdo tu pregunta. ¿Cómo va todo? Te he contestado en un susurro, no sé si me has oído, pero creo que es lo mejor. Hago lo que tú haces, digo lo que pienso, actúo como es necesario. Pero siempre, la mala voy a ser YO.

Creo que ya es momento para que las cosas cambien. Querías ser un conocido, lo vas a ser; quieres que te responda los mensajes, lo haré, pero con todo lo que pienso.

Carta a ...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora