Novena Carta

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A veces la gente se aleja de mí.
A veces yo me alejo de la gente.
A veces obligo a la gente que se aleje.

Por eso;
aunque seas inalcanzable,

aunque no te importe,

aunque no sepas cuanto te amo y nunca esto sea correspondido,

por favor,

No me dejes.

porque la soledad me atrapa, y mis colores, de tonos grises y fríos, se oscurecen, se opacan. La sombra de la soledad te persigue, y te da cuenta de que la soledad no es quien te persigue ahora, ya no huyes de ella; porque te has convertido en ella.

Y créeme, la soledad y la tristeza son el mejor dúo que puedes conocer, son los encargados de los actos que nos hacen humanos, pero, cariño, no quiero ser humana.

Poems For HimDonde viven las historias. Descúbrelo ahora