Cap 20.

243 19 1
                                    

El bebe salió de dentro suyo y lo levantó. Ambos chicos se pusieron de pie con algo de dificultad y ahora con su dongsaeng de frente se observaron por un rato. Ambos cuerpos desnudos, sudorosos y agitados, enredados entre las finas telas, provocaban una visión totalmente erótica a los ojos de cualquiera. De cualquiera.

La puerta de madera, que antes estaba cerrada y crujía debido a la presión que los cuerpos de ambos chicos ejercían sobre ella, ahora permanecía ligeramente abierta. Alguien del otro lado la había abierto, mientras ellos llenaban el silencio del recinto con sus gemidos, y observaba toda la escena con una expresión de suma lujuria. Lo que veía le encantaba y quería quedarse allí. Queria seguir observando ese par de cuerpos perfectos fornicar dentro de ese lugar tan sagrado. La idea le produjo morbo y hasta su reprimida prolongación se vio despierta bajo sus ropas por semejante visión.

KyuHyun y DongHae, totalmente ignorante a su observador se habían vuelto a enfrascar en una serie de besos y caricias que lo único que provocaron fue enardecer a la persona tras la puerta. El mas alto había alzado a su hyung sobre sus caderas y lo sentó entre las delicadas telas sobre el altar de oración donde minutos antes había estado el monje Maun dando su discurso. La mano del bebe arrasó con toda la decoración que había en el altar, como velas, copas, flores y dispuso a DongHae para penetrarlo nuevamente.

~ Alabado KyuHae ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora