Me encuentro andando sin rumbo en las calles de Wisconsin, esta lloviendo una agua helada, que hace que mi vello se ponga de punta. Mis zapatos están mojados, y siento como la lluvia traspasa mi ropa y moja mi pelo.
Miro a un lado, a otro, no hay nada de luz, ni un sólo rayo de claridad. Está todo oscuro. Muy oscuro. Miro al cielo, ni siquiera la Luna aparece para dar algo de luz.
Escucho un grito. Me giro lentamente, encontrándome con una gran pantalla, que proyecta una sala de parto, y una mujer recibe un bebé en sus brazos. Espera...ese bebé...¿Soy yo?
La pantalla se apaga, dejándolo todo oscuro de nuevo. No veo nada, todo está oscuro de nuevo.
Escucho otro sonido a mi izquierda, sólo que esta vez no se de que se trata. Me giro, para encontrarme con una mujer, demasiado similar a la del vídeo, que se acerca a mi con lentitud.
La miro a los ojos. Esos ojos. ¿Quien no recordaría esos ojos? Los recuerdo como si fuera la primera vez que los vi, es decir, cuando nací.
Ella se va acercando cada vez más, hasta que nuestras manos están a punto de rozarse.
-Hola, pequeña...- Susurró.
Lágrimas empezaron a salir. No pude evitarlo. Era ella, no había duda. La he encontrado. Ella por fin está conmigo, podré abrazarla, volver a sentir el calor de esa persona tan especial. El calor de una madre.
----------------
Me levanto agitadamente. Miro a mi alrededor. Era un sueño. Sólo un simple sueño. Mi madre no estaba. No la iba a abrazar. No estaba conmigo.
No, algo tiene que significar. No pararé hasta encontrarla. Ella está viva. Yo lo se, y haré todo lo posible por encontrarla, cueste lo que cueste.
Me levanto y voy hacia mi espejo, en el cual observo mi reflejo: Una chica pálida, rubia, con ojos verdes y con ojeras, se nota cansada, con un pijama de Mickey Mouse, y con pantuflas de conejito.
Voy hacia mi armario, y elijo mi ropa, algo simple. Voy hacia el cuarto de baño, me pongo la ropa y me peino. No me gusta maquillarme, pienso que es demasiado...no sé, superficial para mi gusto.
Bajo, me tomo un vaso de leche, ya que no tengo mucha hambre, cojo mi mochila y ya estoy lista para dirigirme a mi peor pesadilla.
------------
-Bueno, hora de entregar los trabajos que me entregásteis en la clase anterior.- La profesora de música comienza a repartir los trabajos, y llega a mi pupitre.
La nota hace que de mi rostro salga una pequeña sonrisa. Un 9, me ha puesto un 9. Es la mejor nota que he sacado desde que he llegado a este Instituto. Toca la campana de salida de clase, así que recojo mis cosas y me dispongo a salir de la clase.
-Señorita Watson, me gustaría quedarme a hablar con usted un momento.- Em....¿okay? Me parece raro, pero vale. Me dirijo a su mesa y esta sigue hablando.- No sé si lo sabrá, pero ha sido la nota más alta que ha habido en la clase.- Espera, ¿Qué?
-¿En-enserio?
-Enserio.- Dice, sonriendo.- Creo que si te esforzaras como has hecho en este trabajo, en mi asignatura serías de las mejores alumnas que he tenido. Yo se que música ha sido una asignatura a la que no le has prestado mucha atención, ni le has dado mucha importancia, pero si lo hicieras serías de las mejores, Ashley.- Dice, aún sonriendo. Me quedo callada un rato, hasta que ella pregunta.- ¿Y bien?
-Pues...no sé que decir...- Digo riendo, un tanto sorprendida.
-Tu sólo piensa en lo que te he dicho, ¿vale?- Asiento con la cabeza, y esta me hace un gesto para que salga del aula.
¿De verdad tengo talento para la música? Tiene razón en que no le he prestado mucha atención durante estos años en secundaria, pero, ¿para un 9? ¿Enserio? Nunca pensé que se me podría dar tan bien algo.
Tal vez la profesora tenga razón, tal vez esto es lo que de verdad quiero hacer con mi vida. Pero, ¿y si no soy tan buena y sólo lo dice para que me esfuerce más? Es difícil creer que eres buena en algo cuando llevas prácticamente toda la vida fracasando, pero sólo hay una forma de averiguarlo.
Salgo al patio, donde Dylan me espera en la puerta.
-Hola Ash.- Dice este, sonriendo.
-Hola, ¿nos vamos?- Él asiente y nos dirigimos hacia donde se encuentran su hermano y Connor.
-------------
No paro de pensar en el sueño de esta mañana. Me quiero centrar en estudiar para el examen de matemáticas de mañana, pero se me hace imposible.
Dios, pero yo se que ella tiene que estar bien, ella está en algún lado, esperando a que la encuentre, yo se que la volveré a ver, estoy segura.
De repente me empieza a doler el estómago. Mierda. Mañana me toca el período. Bien, valla semanita que llevo. Miro la hora. Las 19:00. No consigo concentrarme y llevo una hora y media intentando estudiar.
-A la mierda.- Cierro el libro y el cuaderno con odio, me levanto y me tiro al sillón, donde me vuelvo a dormir.
---------
El sonido del disparo de una pistola me despierta. Miro a mi alrededor, me suena la casa en donde me encuentro. Me miro en un espejo. Soy una niña. Una adorable niña vestida con un camisón blanco y trenzas doradas.
Escucho un llanto, el cual llama mi atención. Salgo de la habitación y bajo las escaleras, y lo que veo se me quedará grabado para siempre...
N.a:
Hola! La cosa se pone interesante, no? 7u7
Espero que os este gustando. C:
Vieron a Connor? LO QUIERES VIOLAR, SI, TE HABLO A TI, NO TE HAGAS LA TONTA, YO LO SE.
Okay, okay, ya me calmo...
Bueno, muchos besos :3
-SGP♡
ESTÁS LEYENDO
Be Free
Teen FictionAshley, una chica insegura, frágil, pero con carácter y personalidad, ha sido capaz de enfrentarse a todas las dificultades que se le han venido encima por muchas que fueran. Siempre ha sabido luchar, pero nunca ha sabido darse cuenta de sus valores...