Secrets Trilogy: MOON (#1)

Capítulo 5

-¡¡No!! Jamás te dejaré! -Dije llorando sin parar, no sería capaz de perdonarme nunca por haberle echo esto a Naomi, en un segundo me pasaron por la mente todos los momentos malos y buenos que tuve con Naomi pero uno prevalecía ante todos

»flash back«
-Selene, ven quiero mostrarte algo -Estaba en mi cuarto arreglándome para mi décimo séptimo cumpleaños, Rebeca me había organizado una fiesta en mi casa invitando a la mitad del instituto.

Naomi estaba recostada en la puerta de mi cuarto con un lindo vestido celeste que le hacía resaltar su esbelta figura.

-Crees que me veo bien -me paré en frente de ella dando vueltas para mostrarle mi nuevo vestido que había comprado con Rebeca en una nueva tienda de la ciudad.

Sonrió amplia mente mientras me veía dar vueltas

-te ves preciosa Selene, mi niña se fue y en cambio me han dado a una hermosa señorita -dijo con una amplia sonrisa y en sus ojos vi orgullo por mi, estaba feliz de tenerla a mi lado.

-Bueno basta de parloteo señorita, ven te quiero dar un presenté por tú cumpleaños -dio me día vuelta y se marchó a su habitación, la seguí sin protestar ¿Qué era lo que me daría? Estaba un poco emocionada ya que los regalos de Naomi nunca siempre eran espectaculares, al llegar a su habitación ví que Naomi tenia un libro en su mano muy viejo y dañado pero lo sostenía como si fuera algo muy importante, se sentó en su cama y me indicó que me sentará junto a ella.
-Sabes éste libro fue de una persona muy importante, que me enseño muchas cosas en la vida y ahora te lo daré a tí, es todo tuyo -dijo entregándome el libro.

-Oh, gracias Naomi es...es fantástico -dije ocultando mi decepción, no era que no me gustara pero realmente estaba muy viejo y dañado, al ver a Naomi vi que tenía una gran sonrisa en su rostro

-Me alegro de que te haya gustado, tenía mis dudas al respecto, ¿sabes? Ese libro fue de alguien importante como te dije ¿tú lo conoces? -Dijo mirándome

-Ciertamente no tengo idea de quien hablas -dije totalmente confundida, ella sonrió de lado mostrándose totalmente orgullosa a lo que no sabia de que poniéndome aún más confundida

-la persona a la que le pertenecía este libro era un hombre valiente y fuerte muchas personas lo admiraban y yo era una de ellas, él me dio este libro y me dijo que me ayudaría a resolver mis problemas y me escribió una dedicatoria en el, ábrelo y mira lo que dice -abrí el libro y ciertamente ahí estaba la dedicatoria

»Estas fábulas nos enseñan que tan grande podemos llegar a ser y a la vez cuanto nos podemos hundir a causa de nuestras decisiones, prometo que no te aburrirás e incluso llegarás a amar esté libro tanto como yo lo amé, cuando me dí cuenta lo mucho que me ayudó e incluso te dará risa como lo descubrí fue idea de mi esposa comprarlo ya que realmente no era para mi sino para la bebé, todas las noches lo leía a la pequeña aún sabiendo que ella no me entendería, pero poco a poco fui dándome cuenta lo valiosas que eran estas historias, ahora que é hemos aprendido de ellas te lo concedo a ti«

Con mucho cariño mi esposa, yo y nuestra adorada bebé Selene...

No sabia en que momento había comenzado a llorar, esté libro era de mí padre, algo suyo, algo real y no sólo historias, esto definitivamente era un tesoro, estaba tan agradecida con Naomi ya que era suyo y ella decidió dármelo, la abracé sin más mientras le decía lo agradecida que estaba.

-Yo, ya he aprendido de el ahora es tú turno cariño, claro no será fácil pero prometo que estaré contigo para siempre, cuando me necesites para cualquier cosa yo estaré ahí para ti no lo olvides -me abrazo aun mas fuerte, estaba agradecida por tenerla ella era todo para mi.