Imagen multimedia: Angel Cum
Una vez más mi día empezó con retraso. Si, eso era algo habitual en mí: llegar tarde a todos sitios. Eran las 8.30 y yo aún estaba en pijama. Digamos que tampoco me metí prisa para salir de casa. Acabé de desayunar y, como siempre, Brandon ya estaba esperándome en la puerta.
Brandon era mi mejor amigo, llevábamos juntos desde que nos comiamos los mocos. Era un tío leal, gracioso y, desde que entró en la etapa de la adolescencia, un guarro.
— ¡Por fin! Becca la tardona sale de casa —Me dijo.
Me reí e intenté no vacilarlo. Le respondí con mi indiferencia.
— Buenos días a ti también.
Todos los días solía llevarme a clase, aunque me retrasara él siempre estaba allí, esperándome. Hay que añadir que es mi vecino.
Entramos en su coche y nos dirigimos al instituto, está a unos diez minutos.
— Bueno.¿Qué tal llevas los últimos exámenes?— Me dijo.
— Supongo que bien, solo me queda el examen de cálculo y el de Español— Hice una pausa—. ¿Y tú como lo llevas? desde que estás con Brenda digamos que estudias más Educación Sexual que otras asignaturas.
Se rió.
— Es muy buena profesora, la verdad.— Habló con cierto tono de ironía.
Llegamos al instituto y Brandon aparcó en su plaza. En la puerta nos estaba esperando Brenda y Angel Cum.
Brenda se quedó con Brandon, mientras Angel y yo nos dirigíamos a las taquillas.
Angel es jugador de fútbol, siempre está rodeado de animadoras y de la gente más conocida del instituto. También era mi exnovio, si, seguía hablando con él pese a lo que pasó.
El curso pasado, los del equipo de fútbol y las animadoras nos habían preparado una cita traición, desde ese día empezamos a salir hasta que pasados cinco meses la gente comentaba que me los estaba poniendo con Jen Larsson. Cuando me enteré de que cada viernes quedaban en casa de Jen, Brandon y yo aparecimos allí un viernes por la noche. Nos colamos por la ventana, y allí estaban. Jen encima de Angel follándoselo como una perra. Esa noche Jen acabó con el pelo desproporcionado ya que cogiera unas tijeras y le había cortado la mitad del pelo, dejándole media cabeza con el pelo corto y la otra mitad con el pelo largo. Pero no solo había desatado mi rabia contra ella, Angel acabó con la marca de mi mano marcada dos días en su cara y con una foto desnudo escapando de casa de Jen, escapando de mí para que no lo matara. Si, esa foto recorrió todo Nueva Jersey, y también todo Nueva Jersey conoció el micropene de Angel. El tamaño se debió a que hacía frío ya que era pleno mes de enero y a lo asustado que estaba sumándole que se había dejado toda su ropa que casa de Jen.
A pesar de eso, sigo teniendo una relación cordial con él. Otra persona no le habría dirigido la palabra en su vida, pero así soy yo. Becca Hardword.
Llegamos a las taquillas donde estaba esperándonos los jugadores de fútbol y mis amigas. Me despedí de Angel y me fui con Delia y Anna a clase.
Nos tocaba la clase de cálculo, el exámen final. El profesor Huton nos puso a cada una en una esquina y repartió los exámenes.
— Tenéis una hora para terminar. No responderé ni una sola pregunta y no os daré un minuto más para terminarlo. Podéis empezar.
Todos asentimos.
Pasados los sesenta minutos, el profesor Huton empezó a recoger los exámenes.
— La nota de este exámen decidirá vuestro futuro.
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La atenta mirada del cielo
Teen FictionBecca está apunto de acabar el último curso del instituto. Vivirá el verano de sus dieciocho y se encontrará con varias sorpresas que harán que la vida de Becca Hardword cambie, entre ellas la aparición de Derek en su vida.