Sábado, diez de la mañana, un calor infernal no me dejaba permanecer dos segundos más en la cama, apoye los pies en el suelo esperando recibir su frescura habitual pero no lo conseguí.
Cerré los ojos deseando estar en otro lugar y recordé la absurda cena que había tenido la noche anterior con mi madre y el resto de personas a las que debia llamar familia, las copas arriba brindando por otro logró de la empresa de mi padre en la cual todos contribuían menos yo, obviamente mi presencia sobraba en aquella cena, hablaban de presupuestos, inversiones y un futuro prometedor; se aplaudía el ingenio de mis tías por lograr ganancias que el año pasado habían dado por pérdidas, para mi era todo mas sencillo, no era muy difícil plasmar noticias de última hora, fotografías y chismes de la celebridad del momento con algún comentario picante que hiciera que el público reaccionara, eso era todo lo que debían hacer pero claro, el mundo de la farándula seguramente tenía sus reglas, sus tiempos y lenguajes, los que nunca iba a aprender ni pretendia hacerlo; y para mi, la poco civilizada y anticultural había solo una solución para tener un buen futuro económico, según mi madre, casandome con un buen galán de billetera pesada y el amor vendría después;
así que cada cena se convertía en una entrevista con quien podría ser mi futuro esposo, esa noche despedí al galas No. 205 con un lindo champán frutal que le derrame "por accidente" en su entre pierna.Estaba harta de los pretenciosos con dinero, yo quería elegir a la persona indicada y estaba segura que en algun momento iba aparecer.
Dejé de observar mi zapatilla y volví a la realida, seguía sentada en mi cama soportando el calor, tenía que obligarme a no pensar más en la ridícula cena.
Ese verano me había inscrito con un grupo de exploradores que caminaban por el desierto a las a fueras de mi ciudad, fotografiaban paisajes y anhelaba encontrar algo jamás visto por el hombre, cosa que nunca ocurría, pero su entusiasmo parecía no agotarse nunca así que decidí hacer esas caminatas con ellos ya que por instantes lograban contagiarme de su buen ánimo, pero ya hace varios meses que yo hacía mi propia ruta, llegaba al lugar con ellos pero mi foco no eran las fotografías ni lo No encontrado, yo quería alcanzar una montaña de tierra que se divisaba a lo lejos, nunca conseguí llegar, cada vez parecía alejarse más de mi y los exploradores gritaban mi nombre desesperados al no encontrarme en la formación, debía volver sin haber alcanzado la montaña de tierra;
ese calor y esas ganas de querer huir me habían dado la motivación suficiente para querer alcanzar la montaña de tierra, me puse los zapatos deportivos y la ropa mas ligera que encontré y me dirigí a mi auto.Quise abrir la puerta de casa pero algo la detenía, me agaché y levante una revista, leí la editorial "CF" (lo que significaba Coop family, es decir familia Coop, mi familia) y la foto de la cena familiar de la noche anterior como portada esclusiva, así funcionaba esto, cada acontecimiento familiar era conocido por toda la ciudad y sus alrededores, yo no quería cámaras y flashes, tenía derecho a mi vida privada y era esa la razón por la que no quería ser parte del negocio familiar; agarre la revista, cerré de un portazo y la tire en la basura.
(N/A) Está historia lleva mucho en mi cabeza, espero les guste, algunas cosas son ficción les dejo la tarea de encontrar la realidad. Gracias por leerme!
ESTÁS LEYENDO
No Encuentro La Salida
RomanceAquí estoy, justo donde quería, tal vez es mi lugar en este mundo ¿avanzar? Claro, ya estoy a unos pasos de lo que será mi casa por muchos años o hasta que consiga superarlo a él, aquel romántico que me hizo creer que yo lo era todo y ahora me dejo...