Solo Una Carta

Capitulo 26 Maraton 4/7

Toda duda, y mas a modo de confirmación se vio todo por delante de un árbol en el que me escondía. Estaba en la laguna, ya era el día siguiente y el chico que tenía en frente era quien creía ser. Ahora sí logré sentirme destrozada.

El muchacho estaba sentado en una banca, su mirada era perdida y constantemente se movía en busca de algo. A pesar de ello no podía demostrar emociones.

No lograba demostrar alguna reacción y sólo me dediqué a quedarme de pie oculta detrás del árbol.

Peeta estuvo esperándome a la hora acordada, y estuvo allí alrededor de una hora. No salí de mi escondite.

Lo que más quería, era ver a mi Peeta sentado en la banca, al chico que me escribía a diario cartas que me hacían sentir única y especial, cartas que me hacían sentir SU Kat... Pero sólo podía ver a un chico desconocido, a un actor famoso, no al chico del que estaba perdidamente enamorada.

Buscaba como salir de aquel lugar, pero todo se desvaneció cuando lo ví parado frente a la banca pateando con gran furia el asiento. Fue cuando salí de mi escondite, y para más remate fui encontrada inmediatamente por él. El muchacho se detuvo, y, sorpresivamente para mi, se puso a correr en mi dirección.

-¡No te acerques!- Dije con una voz firme cuando apenas estábamos a dos metros de distancia.

-Kat por favor no, perdóname, sólo quiero...

Todo sermón preparado por su parte tuvo que tragárselo junto con el grito de dolor que hasta yo sentí que fue producido por mi cachetada.

-No me llames así- Dije intentando parecer serena ante esta situación.

Su mano se acercó a su mejilla, y supe que realmente le había dolido el golpe... a mi mano también le había dolido.

-Lo siento...

-¿Lo sientes? Yo no, yo no lo siento, porque yo a ti no te conozco.

-Vamos Kat...-Esta vez no pudo continuar porque ahora me acercaba a él, pero sólo para darle un gran empujón que logró hacerle perder el equilibrio.

-¡Que no me llames así!¡Tu no eres nadie!¡Nadie! ¡Sólo eres un desconocido! ¡Sólo soy Katniss ! ¿Si? ¡Kat no existe, porque el chico que me llama así no existe! ¡No existe!- Dije nuevamente empujándolo

-Kat yo estoy aquí- Mencionó tomándome fuertemente de los hombros, aplastándome entre su cuerpo y un árbol.

-No, no lo estás- Dije al fin comenzando a soltar mis primeras lágrimas

- Sí, si lo estoy, y está contigo sólo tu Peeta, porque sólo soy yo-

-¡No! ¡Tú no eres el chico que me gusta!- Logré decirle y fue cuando me soltó, aunque no por ello se apartó de mí.- ¿Ves lo que haz hecho?¿Por qué hiciste toda esta basura?-

-Si, si se lo que hice... y no me siento bien por ello...

-Sólo puedo decirte que te odio... Porque es precisamente lo que has dicho en tu carta lo que ahora siento. Te odio, y te lo digo en la cara. ¡Ahora! Porque yo si ando con la verdad por delante. Sólo eres otro tonto que se cruzó en mi camino. ¿Eso querías escuchar? Pues ahí lo tienes.

-No me digas eso Kat.

-¡¿Quieres callarte?! ¡Lograste convertirme en una estúpida y siempre me ocultaste la verdad!

-Nunca te mentí...

-¿Ah? ¿Ahora me vendrás con que mentir y omitir son cosas distintas? ¡Míranos ahora con tu "omitir de palabras"! ¡Eres un idiota Mellark! ¡Eres un maldito!

-Kat no...

Peeta se quiso acercar otra vez, pero lo empuje antes y cayó al piso. Luego, a mi vista se cruzó un hombre que venía rápidamente hacia mi.

-¿Sucede algo muchacha? ¿Necesita ayuda?- Preguntó parando al muchacho para luego mirarlo horrendamente y atajándolo para que no se me acercara.

- No... Sólo, sólo quiero que no se acerque... No deje que me siga por favor...

-Kat...- Me dijo con un hilo de voz mientras yo comenzaba a retroceder para luego comenzar a correr hacia casa.