Diario de una adolescente

Cápitulo 3: "un poco más de mi"

Al llegar a casa, saludé a mi abuela y camine directo hacia mi habitación, me saque mi uniforme y me puse una polera blanca que me llegaba a las rodillas, amo las cosas grandes no lo mal entiendan, saque mi celular lo conecté a una radio y empecé a escuchar música a todo volumen.

- Is it too late now to say sorry? Cause i'm, missing more than just your body- cante lo más alto posible mientras estudiaba, que gran manera de estudiar tengo.

De pronto mi celular empezó a vibrar, tenía un mensaje de mi mejor amigo.

- "adivina que paso hoy:s"- me dijo.

-" odio las adivinanzas Martin"- le dije un poco molesta.

- " no es para que te molestes Smith, bueno, mi novio sinceramente me tiene más arriba de la coronilla ya que no me toma interés, ahhhhg lo odio, ¿te puedo llamar?:("- dijo Martin un poco triste.

-" Claro, llámame"- conteste.

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Les contare un poco de mi, se puede decir de mi que soy una adolescente que está feliz estando con sus amigos y amigas, bromea, ríe, conversa y trata de alejarse de sus problemas, pero al llegar a casa es totalmente diferente.
Amo las noches, ya que miles de sentimientos y pensamientos fluyen de mi, recuerdo cosas buenas que me pasaron en mi "infancia" se preguntaran porque las comillas, no tuve una infancia que todos quisiesen vivir, mi padre y madre me pegaban, me trataban mal e incluso se podría decir que era hasta un error haber nacido.
Odio mi vida hasta aquí, 14 años de pura mierda e insultos, me he intentado suicidar dos veces pero como siempre mi organismo rechaza las pastillas que tomo, me cortaba, y al llorar por las noches me golpeo hasta dejar en mi cuerpo moretones y rasguños.
No me gusta para nada hablar de mi o compartir mi vida con mis amistades, solo con las que de verdad confio saben todo de mi, pero sólo lo que yo quiero que ellos sepan, soy una chica fría por fuera pero por dentro soy la más sensible que puede existir.
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-Hija, despierta- susurro mi abuela sacudiendo mi brazo muy despacio.

-¿Tomaras once?- me preguntó dulcemente como siempre lo hacia, la amo.

-Si mami, deja levantarme y voy- le dije, levantándome de mi cama y tomando rumbo hacia el living comedor.

- Y cómo te fue hoy, cuéntame - me dijo sonriendo.

- Muy bien, en la prueba de química me fue súper por lo que yo pienso, Martin e Ignacio me hicieron reír bastante y eso, nada fuera de lo normal- le dije, revolviendo mi comida mientras veís "la jueza".

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Vi mi celular y tenía un mensaje del niño que me gusta, bueno el se llama Juan, lo conozco desde hace casi dos meses, y no me gusta totalmente pero si me atrae.

- "Holaa Fran:3"- me dijo y haciendo que inconscientemente se formara una sonrisa en mi rostro.

-"Hola Juan n-n"- le conteste.

Pasaron más de dos horas hablando con el, me dieron las 23:50 p.m hablando de muchas cosas que nos habían sucedido ese día, lo quería demasiado, es el mejor.
Me despedí de el y el de mi, siempre que hablaba con el instantáneamente se formaba una sonrisa en mi rostro.