Depende De Ti || Yayo Gutiérrez/Rubén Doblas ||

Capítulo Dieciséis.

Capítulo Dieciséis.

"Cháfame, Olvídame".

Narras Tú

Otro día más. Rubén se ha ido a otra agencia hace unos días. Debo admitir que me dolió verlo irse, aunque esta vez pude despedirme... Fue lo mejor.
¿La relación con mi marido? Fatal.

* Flash Back *

Fui a abrir la puerta, al parecer a mi marido se le olvidó su juego de llaves.

Tú: ¡Deja de tocar! ¡Ya voy Gutiérrez! - Caminé de prisa, aunque no quise abrirle al inicio de su escandalosa voz diciendo mi nombre, ya es tarde, pero ya qué.

Eduardo: Es que... ¡___________! - Siguió pregonando mi nombre, ¿estaba llorando? ¿Qué le picó? - Abrí la puerta, no me sorprendió verlo todo ebrio, desarreglado, el cabello hecho un asco y... ¿besos? ¿OTRA VEZ? ¿Arañazos? Es que yo lo mato, pedazo de cabrón.

Tú: ¿DE NUEVO EDUARDO? ¿ES NETA? - Exploté, pero ni se inmutó, seguía llorando.

Eduardo: Perdón ___________... Mi amor, perdón... - Su nariz estaba llena de mocos, se parecía a Danny cuando no lo dejaba salir tarde a jugar con el balón. - En serio yo no quería... Perdón.

Tú: - Suspiré con frustración. - Bien, vete a la sala y me dices qué coño traes. Tengo que ver a los niños. - Di media vuelta y subí las escaleras del pasillo.

=...=

Daniel: ¡Mami! - Estaba recostado, tenía una cara de susto. - ¿Estás bien? Escuché que gritaste, ¿peleas con mi Papi?

Tú: Oh cielo, duerme... No estoy peleando con tu padre, es que me lastimé al bajar las escaleras, no te preocupes mi niño. - Sonreí, odio mentirle a mi hijo.

Daniel: ¿Irán al festival de fin de cursos en dos semanas? ¿Le dijiste a mi Papi?

Tú: Es obvio que iremos amor, no me lo perdería por nada. - No se iba a graduar, pero todos los grados hacían un pequeño acto para despedir a los mayores. - Pero ahora necesito que duermas.

Daniel: ¿Puedo invitar al Tío Rubius?

Tú: Sabes que él esta lejos cariño.

Daniel: ¡Por favor Mami!

Tú: Duerme y... Yo le hablo al móvil. - Bien, pasaremos por esto otra vez.

Daniel: ¡Te amo Mami! - Besó mi mejilla y se recostó en su cama.

[...]

Tú: Tienes suerte de que Gustavo tenga sueño pesado como tú. - Él tenía la cabeza gacha, sollozaba en silencio.

Eduardo: Perdón ____________...

Tú: ¿Qué te traes? Ya dime. - Me cruzo de brazos.

Eduardo: Mar- Marcela... Esta embarazada. - Balbuceaba... Espera... - Perdón amor, yo no... No es mío, estoy seguro.

Tú: ¿EMBARAZADA? DIJISTE, ¿EMBARAZADA? ¡EL COLMO GUTIÉRREZ! - Le di una cachetada. - Eres una basofia de humano, te odio, ¿escuchaste? TE JODIDAS ODIO. Me arrepiento de haberme casado contigo, joder... ¿Este es todo el amor que presumías delante de todos? ¡Responde gradísimo idiota!

Eduardo: Yo... Lo siento...

Tú: Quiero el divorcio, esta vez no estoy para juegos.

Eduardo: No, no, no... Ese bebé no es mío. Es una puta, puede ser de cualquiera.

Tú: ¿Seguro? ¡No me vengas con esas cosas Eduardo! - Le di una nueva cachetada, su mejilla esta roja.

Eduardo: Para, por favor. - Le di otra palmada.

Tú: ¿Podrías dejarte de idioteces? ¡Estoy cansada! ¡Actúa como hombre!

Eduardo: - De un instante su mirada de dolor y arrepentimiento cambió. -¿Sabes algo? No te daré el divorcio... No puedo dejarte con mi futuro hijo en el vientre.

Tú: ¡Perdí al bebé! ¿Qué no escuchas borracho de mierda? - Vaya diccionario de groserías que me cargo.

Eduardo: No te preocupes amor... Haremos otro.

Tú: - Retrocedí unos pasos, su mirada oscura se centraba en mi pijama de dos piezas, no eran pequeñas, pero la tela era un poco delgada. - Alejate.

Eduardo: ¿No quieres otro bebé? - Me toma de la cintura.

Tú: De esta forma no Yayo...

Eduardo: Hace cinco segundos era Eduardo... Ay amor, sí que me tienes... ¿Miedo?

Tú: Vete a tomar por culo, no te tengo miedo.

Eduardo: Quiero un hijo nuestro... Otro más... Sirve que me quito a la prostituta de Marce... - Besó mi cuello.

Tú: Por favor Yayo... No hagas esto... No de nuevo.

Eduardo: Tú solo disfruta...

[...]

Mi ropa fue arrancada de forma salvaje, pellizcaba todo mi cuerpo, lo llenó de marcas, me lastimó mis partes íntimas al querer penetrarme, era la peor tortura que había sentido, fue tan bruto... Tan animal. Ese no era mi marido con el que me casé...
Derramó su orgasmo dentro de mí, me dediqué a llorar, más aún sabiendo que en ese lapso de tiempo pude ver una delicada mata de cabellos castaños bajar por las escaleras y quedarse como estatua al ver que era sometida por alguien que decía amarme como un loco. Mi pequeño Daniel acababa de ver a su amado padre lastimar a su madre, esto es todo... Me rindo, no voy a luchar por nada.

[...]

¡Holaaaa! ¡Feliz noche buena adelantada! Yo estoy muy contenta, la paso genial y bueeeh.

Les traigo dos tags que he pospuesto durante un tiempo :v

Pero antes, les dejo una breve opinión de lo que ocurrió con Muñeco, sin Spoiler, obviamente.

#PandiKames®

No tengo idea si pondré algo navideño para la novela, pero ya veremos xD