Lecciones de Amor (MinKey/2Min)

Capitulo 19

Hola de nuevo!!!
Espero hayan tenido una feliz navidad (aunque técnicamente aun no acaba).
Este es algo así como mi regalo...aunque no es nada navideño ^^'
Déjenme saber si les gusta.... si no les gusta tambien.
Esto es todo, sabe' que las quiero y hasta el próximo capitulo ~^•.•^~/
Espero les guste
....

Minho's POV

Pasamos alrededor de diez días solos, tan solo éramos atendidos por escasos empleados en cosas como las comidas y la ropa pero; eso era todo. Fueron diez días de nostros, ambos, solo viendonos el uno al otro.

Puede sonar cansado, incluso a muchos les podría causar incomodidad, incluso molestia. Pero para mi estar esos días solo con el a mi lado fue como descansar de todo lo que sobrellevaba a diario, y aun cuando el no me lo haya dicho estoy seguro que Kibum piensa lo mismo.

Nuestros días ocurrían tan tranquilos, como naturales. Sin hacer mucho, o ver temas delicados, solo disfrutando de esa pequeña libertad que teníamos suerte de estar disfrutando.

La mayoría del tiempo estábamos adentro, fueron exactamente esos días siguientes a mi cumpleaños que la nieve caía a grandes cantidades haciendo imposible salir por mas de dos días seguidos, pero eso no me preocupaba.

Pasamos tardes enteras pegados a la fogata tal como esa noche. Platicamos de nosotros por horas y horas. Conocí mas de el, mucho mas de lo que ya sabia. Y todo eso tan solo en unos días.

La comida de Kibum siempre ha sido exquisita, pero ahora que estábamos solos, todas sus delicias eran exclusivas para mi. Casi a diario preparaba algo para mi, generalmente la cena. Y ambos disfrutábamos de ella admirando el clima exterior o pegados a la chimenea. Un frío invierno.

No es la estación favorita de ninguno de nosotros, pero era tan bueno ese invierno que incluso llegamos a hacerlo nuestro preferida, solo por esa ocasión.

Ya entradas las noches cuando el servicio seguramente se encontraba descansando nosotros permanecíamos pegados a las ventanas del salón principal; que es donde están mas grandes y altas, para poder admirar el cielo ya sea nevado o estrellado.

Hablábamos de cosas como nuestra vida de niños, cuando tuve que dejar la escuela para tomar lecciones privadas. Cuando me escape de casa, tan solo tenia once, pero incluso desde niño me molestaba este tipo de vida como para hacerlo. El entendio, no fue necesario decir ni una sola explicación, el en verdad entendia. Y también había pasado por todo esos mismos sentimientos.

Comencé a darme cuenta de lo mucho que adoraba su compañía. Ver su cabello dorado siempre a la altura de mis ojos, sentir su presencia a mi lado, percibir su aroma.

Kibum se volvió en tan solo días algo indispensable, incluso creo que ya lo era, pero curiosamente fue cuando estuvimos solos que me di cuenta. Me hacia sonreír, me alegraba los dias, hacia que no me sintiera solo.

Comencé a recordar desde el principio de mis días a su lado. Alguien fuerte, pero que a la vez añoraba protección. Delicado, pero capaz. Una persona alegre, a pesar de su entorno. Alguien que quiere encontrar la felicidad.

Entonces mi cerebro creyó eso en un segundo, una idea descabellada, y con mínimas probabilidades de victoria.

Estábamos cada uno sentado en la pequeña base de las ventanas, el a mi izquierda, sentado sobre esta con sus brazos alrededor de sus piernas y su vista en una brillante luna de madrugada.

No hablábamos de nada en especial, el se veía tranquilo, incluso desde mi lugar podía percibir que ya había había cansancio en sus ojos.

No se que me paso para que hubiera sido tan tonto, todavía no lo se, pero perdí toda vergüenza esa noche. Aunque no me arrepiento de lo que dije.