Me encontraba desempacando todas mis maletas. La casa era de dos pisos, así que yo pedí la parte de arriba, la que compartiría con Briseida.
Josh y Ashton estarían en una sola, y Matthew y Joscelin tendrían su propio cuarto. Eran 7 habitaciones, en una estaban Emily y Emma que eran las amigas de Dazler, que por cierto quiso una sola para ella. Sobró una pero nadie la quiso porque según estaba fea y parecía ya antigua.
Briseida: ¿cuándo haremos la fiesta? -preguntó, igual ella desempacaba sus cosas.
Eider: pues nose si hoy o mañana.
Briseida: pues, yo digo que mañana ¿no?, digo para que tengan mas tiempo de organizar sus cosas.
Eider: tienes razón.
Una vez que terminamos de acomodar nuestras cosas bajamos a la sala. Que ya estaban todos, a excepción de Dazler, Emily y Emma, que de seguro debían estar afuera en la no tan pequeña piscina que había a unos metros de la casa.
Briseida: hola.
-Hola -dijieron todos al unísono.
Josh: ¿cuándo la aremos?.
Briseida: mañana.
Ashton: me parece bien.
Me acerqué a Matthew quien se encontraba sentado en un pequeño sofá.
Matthew: hola.
Eider: Hola -sonreí.
Matthew: ¿quieres salir un rato?.
Eider: si.
Matthew se levantó y se dirigió a la puerta seguido por mi.
Matthew: me gusta esta casa.
Eider: igual a mi -dije cerrando los ojos por un momento al sentir una brisa de aire.
Matthew: hace cuánto qué no habías venido.
Eider: exactamente no recuerdo, pero ya tiene años. Solía venir con mis padres y Dazler cuando estabamos pequeñas.
Caminábamos adentrandonos al bosque, por suerte yo conocía muy bien este lugar. La casa era una tipo mansión, mi abuela -a la cual no conocí- al fallecer se la dejó a mi padre. De pequeña me gustaba imaginar que era un castillo.
Ya era de tarde, así que el viento soplaba mas fuerte.
Matthew: ¿no tienes frío? -preguntó deteniendose.
Eider: no -sonreí.
Matthew se acercó a mi y me dio un abrazo el cual no dude en devolverlo. Con el viento, hacía que pueda sentir con claridad su aroma.
Matthew: no que no tienes frío.
Eider: me gusta abrazarte.
Matthew se separó un poco de mi, me vio con esos hermosos ojos azules y me besó. Cuando nos separamos me volvió a abrazar.
Matthew: Te quiero -susurró en mi oído.
Yo solo lo abracé mas fuerte. Nos quedamos asi en silencio, pero no era un silencio incómodo, si no uno relajante.
Matthew: es hora de que regresemos -dijo separándose.
Eider: ¿tan pronto? acabamos de llegar.
Matthew: empieza a oscurecer y hacer frío.
Eider: ¿quedemonos un rato mas, si?.
Matthew: Eider...
Lo miré a ver y parpadee tres veces seguidas.
Matthew: tú ganas -reí.
Matthew se quitó su chaqueta y me la puso, él quedando solo con una camisa blanca.
Me senté me apoyé mi espalda en un árbol. Matthew se sentó a mi lado.
Eider: ven aqui.
El se acercó y lo obligue a que se recostará en mis pies.
Cerró sus ojos, y empecé a jugar con su cabello negro que le caía en la cara y se revolvía -más- con el viento. Lo miraba fijamente, realmente era guapo.
No me di cuenta cuando me quedé dormida y cuanto tiempo, ya que cuando abrí mis ojos vi que ya era de noche. Sentí un peso en mis pies, y Matt aún seguía durmiendo.
Escuché unos pasos y me alarme, aún que igual podría ser el viento.
Eider: Matt -le hablé- Matthew, despierta -de nuevo escuché los pasos- ¡Matt! -lo sacudi.
Matthew: ¿qué pasa? -preguntó con si voz ronca, amo cuando habla así.
Eider: nada, pero ya es de noche.
Matthew: creo que me quedé dormido -rió- vamos -se levantó y luego me ayudo a mi.
Empezamos a caminar y no volví a escuchar pasos, talvez si fue el viento o mi imaginación.
Luego de caminar en la oscuridad, que por cierto me golpee con una árbol que no vi, Matthew se rió y luego se acercó a mi para abrazarme aún riéndose. Llegamos a la casa, Joscelin estaba sentada en un sofá, que inmediatamente nos miró fijamente cuando entramos.
Joscelin: ¿dónde estaban? -preguntó seria.
Eider: platicando.
Joscelin: ¿más de 4 horas? -seguia seria.
Matthew: ¿qué hora es?.
Joscelin: son las 11:45 -se levantó del sofá- ¡me tenían preocupada! -se acercó un poco mas a nosotros- ya es tarde, hace frío ahí afuera, ¡y ni siquiera avisaron!.
Matthew se acercó a ella y la tomó del los hombros.
Matthew: tranquila -dijo viéndola a los ojos- se nos pasó el tiempo, lo sentimos, ¿si?.
Joscelin: espero que al menos hayan usado condón.
Dónde quedó su seriedad
, y, ¡¿Cómo se atreve a decir eso?!, me alegro que Matt esté de espaldas, porque seguramente yo haya quedado roja.Matthew: te lo aseguro -dijo riendo.
Joscelin iba a hablar pero hablé antes que ella pudiera decir algo.
Eider: ya iremos a dormir -dije acercandome a ellos y tomé a Matt del brazo- ya es tarde.
Joscelin: ¿otra vez, no se conforman?.
Eider: ¡No hicimos nada!.
Joscelin: no les creo -se cruzó de brazos y levantó una ceja.
Matthew: buenas noches.
Dicho eso subimos rápido las escaleras y nos quedamos pegados en la pared.
Eider: está loca -reí.
Matthew: Si -se acercó a mi- ¿tienes sueño?.
Eider: la verdad si, me siento cansada, creo que talvez porque hoy desperté muy temprano.
Matthew: ah -dijo y me abrazó- bueno, pues buenas noches -se separó y me dio un corto beso en la frente.
Eider: buenas noches.
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Vacaciones
CasualeUn grupo de amigos se van de vacaciones a una casa que se encuentra en un bosque, todo es diversión hasta que poco a poco empiezan a notar que pasan cosas extrañas.