Mi sexy vecina (adaptada) (terminada)

Epilogo

NARRA AUTORA TODO EL EPILOGO:

 Lauren: ¿Dónde te habías metido? –preguntó abrazándola desde atrás y besándole el cuello.

Camila: Uhm... solo me fui cinco minutos.

Lauren: Los más largos de mi vida.

Camila: Me encanta lo exagerada que eres... -rió ella, dándose la vuelta entre sus brazos y rodeándole el cuello con los suyos- ¿Te he dicho que te quiero?

Lauren: Mmm... solo dos veces.

Camila: Oh... pues ya van tres, te quiero.

Lauren: ¿Y yo te he dicho que eres la novia más hermosa que he visto en mi vida?

Camila: Vas a conseguir que me sonroje –dijo ella rozando sus labios con los de Lauren.

Lauren: Entonces tendré una hermosa vista, señora Jauregui.

Lauren capturó los labios de Camila en un beso tierno y suave, mientras se movía con ella al ritmo de la música, muy lentamente.

Dinah: Hey, hey –interrumpió la conocida voz de su amiga Dinah- ¡que barbaridad! –sé quejó al descubrir que su prima y su amiga continuaban besándose- pueden parar...

Lauren: Y tú puedes ir a molestar a otra parte –le contestó, mientras abrazaba más a Camila, quien rió.

Dinah: Grosera.

Lauren: Aguafiestas.

Dinah: Pues si quieres me voy, pero no acompañaré a tu esposa a que se cambie de ropa y llegaran tarde al aeropuerto, ¡se perderan la luna de miel! –se burló.

Refunfuñando Lauren deshizo el nudo de sus brazos y dejó que su preciosa esposa se fuera con su prima.

Lauren: Cuídamela –gruñó.

Dinah: Siempre –dijo guiñándole un ojo.

Lauren vio a su esposa alejarse con su prima, y sintió su corazón se encogía, ¡Cuánto la amaba! Jamás había pensado amar así a nadie, y menos a un huracán, porque Camila era un huracán, se llevaba todo lo que encontraba a su paso, como se había llevado su corazón.

Aún no se podía creer que ya hubiese pasado un año desde que se habían conocido, un año desde que la vio en el portal de su casa, un año desde que la besó pillándola por sorpresa, un año junto a ella,
disfrutando de ella.

El tiempo había pasado volando.

Después de unos meses de noviazgo y convivencia, con una fecha puesta para la boda, se lo habían tomado con calma, y lo habían organizado todo tranquilamente, ya tenían casa, un hogar para ellas dos que pronto estrenarían.

Tenían una vida juntas, y un futuro por delante, a partir de ese momento, como mujer y mujer.

Aún no se lo creía, había ansiado tanto ese momento... aún no se creía que ya estuvieran casadas.

Pero por suerte, así era.

La risa conocida de Camila llamó su atención y alzó la vista para encontrarse unos brillantes ojos, que la miraban intensamente, una sonrisa se alojó en su rostro, y se acercó a ella, para abrazarla cuanto antes.

Camila sonrió y se acurrucó en su pecho.

Camila: ¿Nos vamos? –preguntó ella.

Lauren: Oh si... -contestó roncamente.

Camila: ¡Siempre igual!

Lauren: ¿Acaso te vas a quejar?

Camila: Oh, claro que no.

Lauren la abrazó con fuerza antes de besarla levemente en los labios y anunciar en un grito que se iban.

Vivan las novias, se escuchó que la gente brindaban, pero ellas estaban absortos el uno en el otro.

El amor rebosaba e inundaba sus sentidos.

Camila: ¿Me vas a contar ya donde vamos? –preguntó ella mientras se acurrucaba junto a Lauren en la parte trasera del coche.

Lauren: ¿Importa eso? No vas a ver más allá de las paredes de la habitación del hotel.

Camila rió y le sacó la lengua, y ella aprovechó para besarla.

Poco después llegaron al aeropuerto y embarcaron en el avión, rumbo a su destino, donde pasarían dos semanas disfrutando de su luna de miel.

Un suave cosquilleo en su vientre hizo que Camila se estremeciera, poco a poco abrió los ojos y descubrió a Lauren observándola, mientras deslizaba los dedos por su vientre.

Lauren: ¿Se notará pronto? –preguntó.

Camila sonrió, apenas hacía una semana que se había enterado de la noticia; estaba embarazada.

Casi, y podría decirse literalmente, fue corriendo a contárselo a Lauren, quien la abrazó y le dio vueltas por el aire antes de pensar en el niño, cuando se acordó la puso asustada en el suelo y preguntó si era malo, ella había reído y luego la había besado, desatando así una tormenta de pasión que ambas habían controlado juntas.

Camila: Nos daremos cuenta cuando empiece a notarse –contestó ella.

Lauren se inclinó y depositó un tierno beso en su vientre aún liso, un beso que la hizo emocionarse, hasta el punto de que las lágrimas inundaron sus ojos.

Lauren: Espero que estés cómodo ahí dentro, pequeñín, porque tu mamá y yo vamos a estar atareadas.

Camila rió mientras sorbía por la nariz, podía ser tan tierno en un momento, y tan pasional en otros...

Camila: Te amo –dijo ella.

Lauren: No más que yo a ti –susurró, y deslizó su lengua a lo largo del vientre de Camila, haciéndola temblar.

FIN

----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO ESTA NOVELA 

LES REGALO ESTE CORAZON<3 UN ABRAZO  Y ESTE FINAL 

LOS AMO CON TODO MI RIÑON

PD: SI QUIEREN LEER OTRA NOVELA CAMREN VISITEN "UN BEBE INESPERADO" EN MI PERFIL