Mal De Amores

TEAM [V]

Narra Mandy

Sólo conseguí despertar a mi hermano, Nick y Melinda. Fuimos con el coche lo más rápido que podíamos. Nick y mi hermano intentaron forzar la puerta pero había otro pasaje por el jardín. En el momento que íbamos a abrir la puerta trasera del jardín, la puerta se cayó ya que un tipo se estaba peleando con Tony, yo y Melinda entramos a dentro y mi hermano y Nick intentaron parar la pelea que Tony estaba teniendo a fuera.
Por si acaso nos cogimos objetos de madera que había en la cocina, no había nadie en la planta baja asi que corrimos hacia arriba. Melinda vió a otro tipo, bastante alto y corpulento y corrió hacia él. Se cerró alguna puerta pero no sabíamos cuál.

-¡¡¡No por favor!!!- gritó Krei llorando.

-¡¿Dónde está la puerta?!- le dije a Melinda.

Krei abrió una puerta cercana a nosotras, salió sin mirar a dónde y el tipo alto le lanzó un jarrón grande, casi le llegaba a la cabeza de Krei así que mi instinto fue cubrir a Krei aunque yo saliera perjudicada. Melinda ya había cogido una tabla de madera grande y se puso delante nuestro, el jarrón dio contra la tabla y por falta de fuerza, Melinda se vió empujada hacia nosotras y las tres caímos al suelo, casi Krei por las escaleras pero pude agarrarla bien.
Casualmente Deanna y mi otra amiga Marie, salieron por detrás del tipo y una le dió con un rodillo de la cocina en la espalda y la otra sin nada, le dió un puñetazo en la cara. No sabía si le rompió la nariz pero le dió bien fuerte.
El tipo quedó k.o. en el suelo, sangrando por la nariz, Krei llorando a mares y temblando a la vez bien recogida conmigo. Melinda se cortó un poco la cara y se hizo daño en la cadera, yo por poco me tuerzo el tobillo y Krei casi se me cae por las escaleras pero conseguí agarrarla en el 3er escalón.

-¿Estais bien?- corren Nick y mi hermano al vernos.

-Ahora la única que podrá estar bien será Krei si nos vamos ya.- digo yo.

-Pero no me dejéis sola por favor.- dice Krei llorando.

-Claro que no te dejaremos sola. Chicos ayudádme a coger sus cosas, nos la llevamos al hotel.

Melinda se levantó y le pregunté que si le dolía mucho el corte.

-Tranquila, se me curará pronto. Voy a lavarme el corte con agua y jabón.

Los otros me ayudaron a sacar las maletas de Krei y todas sus cosas, bajamos y Tony y el tipo con el que se estaba peleando estaban k.o. al igual que el tipo alto. La pobre e inocente Krei, iba con unos leggins superfinos, una camiseta corta y fina y el pelo mojado porque se acababa de duchar.

-Ahora iremos a mi habitación y estaras más calentita.

-¿Tienes hambre?- dice Nick.

-¿Nick?- digo yo.

-¿Que? Alomejor se le bajó el azúcar, del susto.

-Tengo sed.- dice Krei.

Ya estábamos a 10 minutos de llegar al hotel y Krei tenía cara de cansada, a parte de que aún tenía el rimel marcado de las lágrimas.
Llegamos y mi hermano me vió que intentaba acabar de despertar a Krei.

-Ven, ya la llevo en brazos.

Le sonreí y la llevó en brazos. Afortunadamente todo mi grupo estaba conmigo. Al fin. Melinda llevaba una maleta de Krei, Deanna otra y Nick llevaba la maleta de abordo de Krei y yo llevaba su bolso con el móvil y todo. También tenía la suerte de que todos estábamos en la misma planta así que no tenía que bajar a por alguien aunque tuviera el teléfono de la habitación.
Entramos a mi habitación y le pusimos la calefacción. Krei se despertó y la acompañé a lavarse la cara. Se sentó y nos contó lo que vió, aunque fuera poco.

-Yo sólo vi que Tony estaba enfadado y hablando con alguien. No supe quién eran esos dos tipos, al principio parecían gente normal pero luego ya empezó todo.

-Menos mal que yo he viajado hasta aquí.- digo yo.

-Pero también es mi culpa por confiar en quién no debía.

-No es culpa tuya que Tony sea un obsesivo y controlador. Tampoco sabías que él era quién realmente escribió el mensaje.- dice Deanna.

-Pues claro que no mujer. Has ido con los ojos bendados, ya no te preocupes por eso. La culpa es de él por no saber ver o admitir que tu no puedes ser de él.- dice Nick.

-Bueno...- baja la cabeza, la sube otra vez y mira a Deanna diciéndole.-Gracias por hacerme ver las cosas claras. Realmente no parecías tu, pero tu sonrisa no la puede reemplazar nadie. ¿Cómo... cómo...?

-¿Por qué estamos aquí?- dice Deanna y Krei asiente con la cabeza.

-Te estamos siguiendo desde el principio del viaje. Bueno desde el primer día no pero al día siguiente ya empezamos a buscarte por toda Appledorn.- digo yo.

-¿Y eso?

-Chris se puso en contacto con Sollie. Ya que él, Derek, el hermano y el manager de Chris habían visto la nota que les habías puesto, Chris quiso quedar con la pandilla para hablar y mirar de hacer algo. Alessandro encontró una foto en la que tu y Tony saliais juntos y entonces ya nos pusimos en busca de información pero no encontramos nada. Por suerte yo iba a Amsterdam la misma semana. Chris estaba y sigue estando superpreocupado por ti. Si vieras lo tierno que él se ponía cuándo le preguntamos cosas de ti...

-Lo se, y no debí desconfiar de él. Soy una idiota.

-Pero otra vez te decimos, no es tu culpa que Tony hiciera lo posible para engañarte.- dice Nick.

-Ya pero...

-No te eches las culpas. Ahora vamos a dormir y mañana será otro día.

A la mañana siguiente, Krei y yo nos despertamos a la vez junto con Deanna. Los chicos estaban aún durmiendo, pero yo junto con Deanna, Melinda y Marie, fuimos a almorzar abajo.

-En teoría tienes el vuelo abierto, ¿verdad?

-Sí. Puedo volver a mi casa cuándo quiera.

-Nosotros nos vamos a ir mañana, ¿que te parece si ya te ayudamos a peparar la maleta total y salimos por las tiendas?

-¿Ahora salir?

-Si quieres...- dice Deanna.

-Me apunto.

Krei entonces parecía más tranquila. Eso me dejaba más tranquila aún.
Krei ya llamó para que le guardaran sitio en el avión para irse el mismo día que nosotros.

-¿Vosotros cuándo cogéis el avión?

-A las 2pm sale. ¿Y el tuyo?

-A la 1:30pm.

-Mejor, así podremos estar seguros de que te vas bien.- dice Melinda.

-Sí. ¿Cómo está la herida?

-Bien, no me hace tanto daño cómo ayer. Gracias.

Coincidimos con los demás, nosotras íbamos a coger nuestros platos y ellos vinieron, al fin. Ese día lo pasamos muy bien, sobretodo Krei. Nos gastamos todo lo posible en comidas, tiendas y cenas.
Mañana teníamos que levantarnos pronto así que nos fuimos a dormir hacia las 10 de la noche.

-Gracias por estar aquí.

-De nada.- le digo a Krei sonriendo.

-Realmente fuiste mi ángel de la guarda. No volveré a cometer este error.

-Si no fue culpa tuya, ya lo sabes.

La tapé con la sábana y puse la temperatura de la habitación adecuada para que ella luego no tuviera que despertarse para destaparse.

-Buenas noches. Tan bien se está que yo me dormiré en un segundo.

-Buenas noches, cómo un lirón.

"Cómo una hermana."

Suspiró dormida y apagué la luz. Hasta que ella se fuera a España, no sabría cuándo la volvería a ver. Me esperaba una gran temporada de trabajo.