Capítulo 4: Intercambio

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Narra: María.

Estaba corriendo por el centro de la ciudad hacía mi destino. Cuando de repente choco con alguien.

Maria: Auch- Dije agarrandome la cabeza.

Xxx: Lo siento- Dijo y se largo a correr.

No pude mirarle la cara, y él tampoco vió la mía. Sólo pude ver que tenía el pelo corto.

Maria: Al menos ayudame!- Dije pero no hubo caso, ya se había ido- Baka.

Me paré y seguí mi camino hacia la veterinaria.

Al llegar apoyé la cara en la ventana como niña de tres años queriendo un dulce. Y pude observar un perro negro con osico y pecho blanco. Este me miró a los ojos...

Maria: Dios mío! Son iguales!- Hice una pausa- KAWAII!!!!

Sus ojos eran celestes, idénticos a los de Kuroko.

El perro, al ver mi reacción, meneó la cabeza a un lado y me miró extrañado. Pero despúes ladró felizmente y meneandome la cola.

Entonces me decidí, era el indícado.

Entré a la tienda. Era enorme, había un montón de animales en jaulas y en casitas. Recorrí el enorme pasillo lleno de animales hasta el mostrador.

Entonces una chica con un uniforme de trabajo color amarillo claro, cuello y mangas color blanco, con una patita de perro en el bolsillo de su remera me atendió.

Xxx: Hola, mi nombre es Camelia- Dijo presentandose- Que se le ofrece?

Maria: Quiero el perro que esta en vidriera- Dije decidida.

Camelia: Huh? Que perro?- Dijo confundida.

Maria: Em, uno chiquito color negro y blanco con enormes ojos celestes- Dije haciendo señas con mis manos de cuál chiquito era.

Camelia: Jum...CECILE!!- Dijo llamando a alquien.

Ante tan repentina acción di un saltito para atrás.

Una voz se oyó en respuesta.

Cecile: Mande!- Gritó desde la parte de atrás para luego se oyera cosas caer y un grito.

Camelia: Huh, esta me romperá la tienda...-Dijo sosteniendose el arco de la nariz con los dedos- ¿QUE ROMPÍSTE?

Cecile: N-nadaa!- Dijo nerviosa.

Luego la puerta de la parte trasera se abrió soltando un montón de loros.

Maria: Waaaah!!!- Grité escondiendome debajo de la mesa.

Camilia: Nada, eh?- Dijo de brazos cruzados- Esperame un segundo.

Dicho esto se fue a la parte trasera y se escuchó varios gritos de dolor y cosas caerse. Luego de unos minutos volvió y antes de cerrar la puerta gritó.

Camilia: Y ME LEVANTAS LAS JAULAS!!- Dicho esto la cerró- Lo siento- Sonrió amablemente.

Yo solo solté una risita nerviosa.

Camile: En que estabamos?...ah si, ¿Que se le ofrece?- Dijo sonriendo.

Maria: Amm, el perro de la vidriera- Dije obvia.

Camile: Huh? Que perro?- Dijo confundida.

Aish.

Maria: Un perro chiquitito color negro y blanco con enormes ojos celestes- Dije cansada.

Origenes (Una chica en Seirin 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora