8040 - 07 [XiuHan- EXO]

Desconocido

"Xiumin... Xiumin; sus gritos eran ahogados y desesperados, buscaban su atención; Ayudame...; su delgado cuerpo seguía corriendo, tambaleándose entre las paredes... Xiumin"

El reloj volvió a sonar por segunda vez, se despertó sudoroso y agitado, tomo una ducha rápida para llegar temprano al trabajo. Hace ya una semana que empezó a trabajar en un pequeño restauran a una hora de la casa, no era un gran restauran , muy poco frecuentado por grandes personalidades, solo llegaban pequeños grupos familiares y algunos estudiantes quienes disfrutaban del agradable ambiente, Xiumin era el encargado de servir los café y algunos batidos.

Las mañanas en el restauran por lo general eran tranquilos, pocos clientes llegaban.

Un chico delgada de piel blanca, cabello castaño algo desordenado, cruzo la puerta de aquella instalación con la respiración algo agitada, "el chico de mis pessadillas?" pensó, su corazón se paralizo al distinguir su rostro a poca distancia de la suya. Cuerpo delgado, cabello castaño, ojos oscuros, rostro agotado, su atuendo, jeans negros y franelilla blanca dejando al descubierto sus delgados brazos, su mirada triste. Sin duda debía ser el chico que no dejaba de clamar su nombre.

-Un latte vainilla por favor- ordenó el chico delgado después de calmar su respiración

Una punzada atravesó el pecho de Xiumin al escuchar esa voz, la misma que gritaba su nombre incansablemente, pequeños extractos de su pesadilla invadieron su mente, el callejón, su cuerpo tropezar con las paredes, su cabello mojado, y sus ojos, los mismos que lo veían en ese preciso momento, la entrada de otro cliente lo hizo volver en sí. Sirvió el café y a cambio recibió el dinero.

El chico se sentó en una esquina del lugar, alejado de las ventanas y la puerta, disfrutaba del momento, de vez en cuando dejaba escapar un suspiro mientras cerraba los ojos. Una lágrima resbaló por su mejilla sobre una perfecta sonrisa dibujada en aquel rostro triste. No supo cuando se fue, no lo vio salir.

Se dispuso a limpiar algunas mesas y se percato de una nota sobre la mesa de aquel chico "nunca estuve aquí" leyó en susurros, hizo un gesto de confusión, no entendía aquel mensaje ¿acaso estaba cuerdo? Doblo la servilleta y se la guardo en el bolsillo.

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-No puedes preocuparte por un simple desconocido- le reclamaba Baek

- Pero era el mismo que aparece en mis pesadillas ¿Cómo no preocuparme? – muchas cosas empezaban a darle vuelta en su cabeza

-Por cierto en unos días empezare la universidad

-Lo que significa que ¿tendré que trabajar el doble?

-Xiu eso no es problema, optare por una beca

-Pensé que me dejarías toda la carga- bromeo

La noche transcurría lento, Xiumin solo pensaba en quien podría ser aquel chico. Una melodía lejana capto su atención, se asomo por la ventana para escuchar con más claridad pero se hizo aun más lejana.

-¿Escuchas eso? – le mencionó a Baek

-¿escuchar qué? Debería llevarte al psicólogo- rodo los ojos

-Esa melodía, es hermosa- cerro los ojos en un suspiro

-Te he dicho que no duermas con audífonos

"no estoy loco" pensó, reviso nuevamente su bolsillo y desdoblo la servilleta recordando aquella desconcertante nota, ahora decía algo realmente distinto "8040-07". Ahora si estaba confundido, hasta hace unas horas decía otra cosa ¿Cómo pudo pasar eso?

-A dónde vas tan tarde? –Baek estaba en pijamas

-Necesito tomar un poco de aire fresco- dijo tomando su chaqueta

Las calles lucían frías y oscuras, se alegro de haberse abrigado lo suficiente, fue por un café algo alejado de casa. Sus manos comenzaban a enfriarse.

De regreso quiso cortar camino por un callejón, algo brillante capto su atención en aquella oscuridad ¿un brazalete? Sus curiosas ojos espiaron el lugar, saco su linterna de bolsillo y se acerco lentamente. Un chico era el dueño de aquel brillante brazalete y estaba muriendo ahí "la pesadilla..." susurro sorprendido, el chico empezaba a quedar sin aliento, Xiumin se despojó de su abrigo para cubrir aquel débil cuerpo. "8040-07" era la cifra del brazalete. Lo subió a su espalda, lo único que se le ocurrió era llevarlo a casa.

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-Baekhyun baja a ayudarme – Xiumin depositó al chico en el sofá, puso agua a calentar, saco sus edredones. No sabía qué hacer.

-Hyung es de madrugada- un soñoliento Baekhyun bajaba los escalones con pasos pesados-¿Tu amigo está ebrio?

-Algo así – Xiumin corría de la cocina a la sala – ayúdame a preparar la sopa, voy por algo de ropa.

Debía buscar la manera de reanimarlo, debía salvarlo no se perdonaría si dejaba morir a una persona.