Six

178 15 0
                                    

Entraron al departamento de Ross.

-Huele a cigarrillo. - Dijo Laura tirandose al sillón.

-¿Quieres uno?

-Si, más tarde.

-Cómo quieras. - Dijo sentándose a su lado. - Veo que te estas acostumbrando rápido, eh?

-Si voy a vivir aquí, primero, haremos algunos cambios a la decoración, segundo, tengo que acomodarme no?

-Cómo digas.

-Bien, iré a inspeccionar.

Se iba a levantar cuando Ross puso su mano en su hombro impidiendoselo.

-No hay mucho para ver, es un departamento pequeño.

-¿Cuantas habitaciones? - Pregunto ganándose una sonrisa pícara por parte del rubio.

-Una.

-¿Una? - Ross asintió. - Pobre....

Ross la miro confundido.

-¿Pobre por que?

-Dormirás en el sofá. - Sonrió. - No te enojes. Es cómodo. - Le guiño un ojo. 

-Ni lo pienses, problemas. Este es mi departamento, mis cosas.

-¿Y yo donde voy a dormir? - Alzó una de sus delgadas cejas.

-Dormirás conmigo. En mi cama. - Sonrió.

-Así que... -Se acercó a Ross. - ¿Juntos?

-Exacto preciosa.

Laura sonrio sin mostrar sus dientes y se sentó sobre el regazo de Ross.

-¿Que haces? - Le preguntó respirando entrecortadamente.

-No lo sé...

Saco su pesada campera de cuero y beso delicadamente su cuello.

-Laura... - Gimió. - Levántate.

-¿Por qué? - Susurró aún con sus labios por su cuello.

-Porque lo digo yo.

Soltó una risa y se separó de Ross. 

-Ya caerás rubio.

Levantó una de sus gruesas y bien definidas cejas. 

-Lo que digas. - Rió jugando con las puntas violetas de su cabello. - ¿Hace cuánto las tienes así? 

-Ehm... - Pensó acomodándose. - Creo que hace un mes más o menos.

-¿Por qué te las hiciste?

-Qué se yo. Estaba aburrida supongo. - Levantó los hombros.

-Gran respuesta.

-Lo se. Oye... - Ross miro a los ojos de Laura. - , ¿Sabes hace cuanto tiempo nos conocemos?

Ross soltó aire y miro hacia la pared.

-Casi un día entero preciosa. ¿Por? - Dirijo de nuevo su vista a la castaña.

-Porque... en el poco tiempo que llevamos de conocernos... - Sonrió picaramente y se sentó de nuevo sobre Ross. Se acercó a su oreja dejando un beso en esta. - te tengo muchas ganas. - susurro en su oído.

-Siempre supe que tengo ese don con las chicas.

Laura se separo y soltó una sonora carcajada, contagiando a Ross.

-Lo que digas, rubio. Un día eh... el tiempo pasa lento.

-Si. Pero tendremos mucho tiempo para hacer lo que queramos, linda. 

Adictos. ||Raura||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora