Durmiendo con Stephen

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Me sentía feliz. Desde ese día mi vida cambió. Conocí a alguien, luego de tanto tiempo de estar sin tener contacto con ninguna persona (prácticamente toda mi vida). Y en ese momento no supe que él sería la mejor persona que pude haber conocido jamás.

Nos quedamos la tarde hablando de nuestras vidas y nuestra rutina. Me pareció muy raro lo que solía hacer: le hacían todo favor, vestirse, lavarse, comer... solía hacer equitación (yo jamás me acerqué a un caballo)... ayudaba un poco a su padre con sus deberes como rey... recibía pretendientes... y muchas cosas más que jamás hice.

A él le pareció aburrida mi vida, con lo cual tenía la pura razón. Literalmente en mis días realizaba exactamente la misma rutina. Lo único que le llamo la atención fue mi gusto por la lectura,  aunque criticó mi gusto el cual consideraba infantil. Si leo cosas infantiles, pues me gustan los cuentos infantiles.

Le conté que mi parte favorita de esos cuentos era el final, donde los protagonistas vivían felices para siempre. Él al escuchar mi discurso sobre el amor sólo me sonrió y me acarició la cabeza. Me sentí algo incómodo, pero era una incomodidad agradable.

No nos habíamos dado cuenta de que ya era muy tarde.

-Me quiero morir Edward. Ya está anocheciendo y no podré ver mi camino para volver a mi hogar-

-¿Pero no te sabes el camino el camino de memoria?-

-A oscuras no veo nada-

-Mmm... lo lamento- dije pensativo, buscando una solución- ¿Que tal si duermes aquí?-

-¿Seguro? Sería muy amable de tu parte-

-Sería un placer recibirte en esta humilde torre-

-Ahora es una humilde torre ¿no la detestabas?

-Mi odio se fue... porque cumplí uno de mis sueños-.

Sonrió. No pude evitar devolver la.sonrisa.

-¿Donde podría dormir entonces?-

-Buena pregunta. No hay más habitación que esta. ¿Y si compartimos mi cama?- pregunté inocente.

Se hizo un desagradable silencio. Luego él se desternilló de risa. Yo no entendía nada.

-Edward, las parejas comparten cama...-

Me sonrojé. La verdad mi humillación no tenía comparación. Era esperable. No acostumbraba socializar con las personas. Tarde o temprano diría alguna locura. Solo pensé en esconderme, hasta que se me ocurrió una buena respuesta, o al menos eso era en mi opinión.

-Lo lamento. No tenía idea... pero no hay otro lugar para dormir, y nadie tendría que enterarse...-

-¿Lo mantendríamos en secreto?-

-Seguro. Sería nuestro secreto- dije sereno. "Nuestro secreto". Sonaba lindo.

-Mmm... de acuerdo. ¿Me prestas un piyama?-

-Están en el armario. Toma el que quieras- señalé el viejo mueble. Él era más grande que yo, por eso le quedó chico.

-Mmm... no me queda tan bien- no pude evitar reirme al verlo. Primero que nada, su rostro demostraba decepción y vergüenza.  En segundo lugar, la parte superior de su piyama enseñaba parte de su cuerpo. Era bien notable su delgadez. Y por último, el pantalón le quedaba bastante ajustado. Apenas podía caminar.

-Nadie más que yo te verá-

Me reí. Él me imitó. Me recosté sobre mi cama y él me miró dubitativo. Se sentía incómodo,  mas otra opción no le quedaba. Se recostó a mi lado. Me dio la espalda y me dijo "buenas noches".

-Buenas noches, Stephen. Descansa bien-

No escuché una respuesta. Al cabo de unos minutos empecé a escuchar unos ronquidos. Dicen que son molestos, pero fueron de mi agrado. Me di vuelta y lo observé durmiendo. Se veía muy tierno. Estuve a punto de abrazarme a él... mas no quería molestar sus sueños. Solamente le di también la espalda y me quedé dormido con una sonrisa dibujada en mi rostro.

Quién diría que dormir con Stephen sería tan fascinante. "Las parejas comparten cama". A mi me gustaba compartir cama con él,  y lo seguiría haciendo. ¿Eso nos convierte en pareja? Si fuera así,  me encantaría ser su pareja.

En los cuentos que leía siempre un príncipe y una princesa terminaban juntos. Sentían amor entre ellos. ¿Cuándo te enteras que amas a alguien? Supongo que amar a alguien es querer estar junto a esa persona, disfrutar de su compañía, entregar todos tus sentimientos a él... ¿Por qué debían ser siempre entre un hombre y una mujer? Yo podría sentir lo mismo por un hombre... creo que lo estaba sintiendo en ese momento. Por Stephen... creo que ese mismo día empecé a sentir algo profundo por él... Recién lo conocía,  pero no pude evitar querer estar con él.

Esperando un Final FelizDonde viven las historias. Descúbrelo ahora