Mi Primer Novio

Un milagro

Me cambie para ir al colegio, con mis pantalones anchos y mi remera rosa, baje a desayunar, agarre dos tostadas prepare la mochila, le di un beso a mamá y me fui caminando al colegio.

-¡Hola Agus!, lamentó mucho lo de Joaco- Bajo la cabeza y me cálido con un fuerte abrazo.

-Hola Jose, yo también lo lamento mucho- Se me escapó una lagrima.

-¿Después de la escuela Queres venir a casa?

-Me encantaría, pero no puedo, tengo que ir a la casa de Joaco a hablar con María.

-Uh, Bueno, lo dejamos para otro día.

Entramos a clase.

-Buenas Días Alumnos- Dijo Susana con cara de sueño- Hoy hablaremos de todo lo que estuvimos haciendo en todo el año, y también les voy a dar el nombre de un libro para que lean en sus casas, el libro se llama El Anteojo de Galileo.
Todos Anotaron el libro, a mí me llego un mensaje de texto de María que decía: ¡Llámame es urgente, un milagro!. Le pedí permiso a Susana para salir de la clase, estaba tan dormida que me dijo que sí sin problema.

-Hola María, ¿Qué pasó? ¿Por qué tanta urgencia, le pasó algo a Joaco?

-Hola Agus, Joaco abrió los ojos y hablo, pero después los serró, necesito que vengas a la clínica por favor.

-Es que.... La escuela... Susana...

-Deja, yo ya hable con la directora.

Colgué el celular agradeciéndole por a ver hablado con la directora, Salude a Jose y me fui directo a la clínica.

-Hola, yo soy Agustina, vengo a ver a Joaquin...

-Ya sé quién sos, María dijo que podías pasar sin ningún problema- me interrumpió la secretaria.

-Gracias.

Entre a el consultorio en donde estaba Joaco, le agarre la mano y lo mire h le empecé a hablar.

-Hola Joaco, no sabes cómo está Maia, meta decir que sos su novio y esta re- hincha, te extraño mucho ¿sabes?

Me agarro la mano.

-¡Joaco me escuchas!
Silencio total, él no decía nada.

-¡Joaco por favor Tenes que estar escuchándome!

Se hacerlo un enfermero y me dijo que me valla.

-¡No por favor déjenme el me necesita!

-¡Vete!

-¡¡¡¡¡No me iré déjame déjame déjame!!!!!-Ya me estaba volviendo loca, pero sabía que Joaco me estaba escuchando.
De repente vinieron más enfermeros q sacarme. Me abarraron los tres del brazo y me estaban sacando a los empujones, mientras que yo gritaba,

-¡No por favor no!- Ya estaba llorando y gritando como una loca que estaba medicada.
Estaba sería de la puerta hasta que vi  ue Joaco abrió los ojos, se levanto de la cama y grito.

-¡Sueltenla!