Ya teníamos todo listo solo faltaban 2 meses para que naciera, mi pancita seguía creciendo. Un día estaba durmiendo con Kevin y sentí que corría algo en mis piernas levanto la sabana y corría sangre en ese momento me asuste los desperté lo más rápido que más pude y muy asustada, nos alistamos rápidamente para ir al hospital, creo que perdí la conciencia ese momento porque pestañe y cuando abro mis ojos aparezcan en una silla de rueda escucho que me dicen que necesitan que me Suva a la camilla, veo como me sacan sangre para asarme exámenes, cuando abrí nuevamente los ojos estaba sola con Kevin...
-no quiero que te pase nada, no puedo vivir sin ti –me dice llorando.
-si puedes
-si pero no quiero -dice con lágrimas en los ojos.
Viene la doctora con una cara muy preocupada diciendo que era una decisión muy difícil era él bebe o yo, Kevin se largó a llorar.
- ¿Cómo manejo tanta presión? no, no te vayas -me pide aterrado.
-solo cuídala como me cuidaste a mi
Lo único que vi después fue como me llevaban a una sala y veía llorando a Kevin...
Empiezo a escuchar menos y se me en peso a nublar la vista y vi una puerta me guie a ella era blanca completamente hermosa cuando la abro veo mi madre que me dice...
-Es hora -con su mano extendida hacia a mí.
Y lo último que pensé fue «tranquila Katy todo va estar bien»
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Hasta la luna
RomansaKaty no era la mas popular y sociable de todas, pero tenia un amigo especial que la apoyaba en todo. Con una gran pena luego del fallecimiento de su madre ella decide continuar su vida hasta llegar a un punto en el que se acaban las riendas.