*Nate Maloley*

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Estaba tan cansado de toda esta mierda de ir viajando a cada lugar por máximo 7 horas que se trataba en llegar, desempacar mi traje de esa noche, mirar lo de la luz y sonido, bañarme, comer un poco, dar el mejor concierto de todos, dormirme un rato y adiós, cambio de hoja y para otra ciudad o país.

Así era todos los días, no me mal entiendan amo lo que hago es solo que me gustaría mejor venir a estos lugares con mi chica, con esa hermosa latina que me espera en casa.

Pero después de todo ya voy llegando a casa de sorpresa porque ella no sabe.

Llegue a mi casa después de unas horas yo tenía unas llaves obviamente, introduje la llave en la chapa y gire para desbloquear el seguro entre muy lento para no espantarla y camine hasta su cuarto no sin antes dejar mis cosas y la puerta cerrada, cuando iba por la cocina sentí un ardor caliente en mi cabeza junto con un líquido rojo llamado sangre, me fue imposible no gritar.

-Aaaaaa'!- dije dándome la vuelta para observar a mi chica con un bate en la mano y su cara de "No te tengo miedo".
Diablos lil mama que carajos te pasa? Esa madre duele demasiado.

Nate?,Nate? OH POR DIOS NATE?!-Dijo entre emocionada y asustada. -Oh mierda que carajos te hice?!-Dijo ella llevándose las manos a la cabeza y respirando muy rápido, la conocía bastante bien para saber que se estaba desesperando.

Diablos nena no importa, no fue para tanto pero no te desesperes por favor.-Dije tratando de quitarle las manos de la cabeza, algo que fue totalmente en vano.

QUE NO FUE PARA TANTO?! JODER SI TE ESTA SALIENDO SANGRE DE LA JETA!- Dijo empezando a jalarse el cabello como era costumbre hasta una migraña
Mira, mira-Dije limpiándome la herida de la cual ya no salió sangre, al ver eso ella afortunadamente se calmo.

Ay amor es que me asuste, y con todo este desmadre no te he podido dar la bienvenida a casa.-Dijo pervertida y sin descaro alguno.

Lo se cariño.-Asentí siguiéndole la corriente, al instante la cargue al estilo nupcial por las escaleras hasta llegar a nuestro cuarto, caminé hasta la cama y la deje delicadamente ahí mientras la desnudaba y me desnudaba sin romper el beso que habíamos empezado hace unos 3 minutos.

Esta loca es my girl y no la cambiaría ni por Meghan Fox o Miley Cyrus.

One ShootsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora