Soportar {Larry Stylinson}

2. Placer.

La espalda de Louis dolía como el infierno. Su jefe lo había puesto a cargar unas cajas y llevarlas hasta el almacén, a él, solo a él.

¡Estúpido viejo!

Le faltaban aproximadamente como diez cajas y no creía que aguantara un poco más.

"Hey" un chico se acercó hasta él "Permíteme ayudarte"

"Oh, no, no es necesa-" antes de poder terminar el chico agarro la caja de sus manos.

"No es ninguna molestia" asintió.

Camino con Louis detrás de él hasta el almacén, dejando la caja apilada junto a las demás.

"Gracias" sonrió con cansancio, estirando su cuello.

"No hay problema, puedo ayudarte con las demás también y no acepto un no por respuesta"

Louis no puso objeción alguna, primero porque sentía que en cualquier momento iba a caerse al piso y segundo porque el chico era alto y tenía músculos, así que unas simple cajas para él no era problema alguno.

"De verdad, muchas gracias"

"Siempre a la orden" sonrió "Un gusto, soy Keyler"

"Louis" estiro su mano, estrechándola.

"Primera persona que conozco" ladeo la cabeza, haciendo una mueca "Soy nuevo por aquí y bueno pensé que tú tal vez podrías enseñarme el lugar"

Louis lo miro, sintiéndose mal.

"Lo siento" se disculpó "No creo que pueda" tengo un novio que es muy celoso "Ya que estoy muy ocupado"

Keyler asintió, comprendiendo.

"Está bien"

"Pero a penas este desocupado te busco" Louis ofreció, agradecido por la ayuda que recibió.

Ambos intercambiaron números, dándose un estrechón de manos y despidiéndose.

"¡Louis!" su jefe grito, llamando su atención "¡Te pago para trabajar no para que converses!"

Sí, estúpido viejo.

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Cuando llego a su casa con la mochila en su hombro y demasiado estrés junto, como todos los días, se llevó la grata sorpresa que todo, absolutamente todo se encontraba en perfecto orden, tan limpio que podía ver su reflejo en el suelo.

Miro para todos lados, buscando a su novio con la mirada.

"¿Harry?" llamo, dejando su mochila encima del sofá.

"Aquí en la cocina"

Camino hasta el lugar, llevándose otra sorpresa.

"¿Estás cocinando?"

Harry asintió, sonriéndole.

"Quería hacer algo lindo por ti, sé que ayer me comporte como un verdadero idiota, bebé, lo siento"

Louis sonrió, amaba cuando Harry se ponía en plan cursi y meloso.

"Está bien" respondió.

Suspiro, sonriendo también y acercándose a él, besándole los labios suavemente.

"Te amo demasiado ¿lo sabes, cierto?" pregunto contra sus labios.

Louis asintió.

"También te amo"

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Luego de almorzar ambos se sentaron en el sofá a ver una película.

Harry hizo palomitas y sirvió refresco.

"Ven aquí" abrió sus brazos, haciéndole señas a Louis.

Este sonrió y se acercó a él, quedando con su espalda pegada al pecho de su novio.

"¿Cómo te fue en el trabajo?" Harry pregunto, abrazándolo por la cintura.

"Horrible" confeso, colocando su cabeza en el hombro de su novio "Mi jefe creo que me odia, estuve cargando cajas todo el día."

"Oh, bebé" Harry beso su hombro, comenzando a dar leve masajes a sus muslos.

Louis cerró los ojos, concentrándose en las carias que su novio le brindaba.

"Hace bastante tiempo que no estábamos así" susurro, acariciando los brazos de Harry.

"Lo sé, y me odio por eso"

"Ambos estamos muy ocupados"

"Pero tú te matas trabajando, amor, lo siento"

"No te disculpes" sonrío, relajándose ante el masaje que Harry había comenzado en sus hombros.

"Estas muy tenso" susurro, besándole el cuello.

Louis solo asintió con sus ojos cerrados, suspirando al tener un momento de tranquilidad.

"Hace mucho tiempo también que no nos tocamos" confeso, haciendo una mueca.

"Lo sé" repitió, dando más besos en la piel de su cuello.

Con movimientos lentos llevo una de sus manos a la entre pierna de Louis, comenzando a tocar, al mismo tiempo que mordía su cuello.

Poco a poco el miembro de Louis fue endureciéndose bajo su tacto.

"Te amo, mi amor, mucho aunque a veces no lo demuestre" Harry susurro, bajándole los pantalones junto a los bóxer.

Agarro su entre pierna ya dura, comenzando a masturbarlo, bajando y subiendo su mano a un ritmo lento.

Louis gemía bajito, como si tuviese miedo de que ese momento pueda esfumarse y que solo sea un sueño de él.

No aguanto mucho, se corrió en la mano de su novio, gimiendo su nombre y arqueando un poco su espalda.

"H-Harry" jadeo.

"Shh, aún no he termina contigo"

Se levantó del sofá y termino de desnudarle, cargándolo por los muslos para llevarlo hasta la habitación.

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Louis se agarraba fuertemente a la cabecera de la cama, sentía como sus paredes se abrían a cada embestida de su novio.

"Tan apretado para mi" Harry susurro, agarrándolo por las caderas y entrando más profundo en él.

Louis se encontraba sobre sus rodillas y manos, intentando no caerse de cara, sosteniéndose para mantener el equilibrio debido a los fuertes moviendo de su novio.

Harry lo penetraba fuertemente, abriendo sus nalgas para poder entrar más profundo.

Sentía un ligero dolor en su espalda baja, pero eso no se comparaba al placer que en ese momento sentía. Era un desastre en gemidos y jadeos sumamente agudos.

En la habitación lo único que se escuchaba eran sus respiraciones agitadas y el sonido de la piel al chocar.

Harry se corrió con un gruñido dentro de él, llenándolo con toda su semilla.

"Bebé" gimió, saliendo de él, respirando profundamente.

Lo agarro por las caderas y le dio la vuelta. Quedando de espaldas a la cama. Harry abrió sus piernas y llevo su dedo índice a la entrada de él.

El semen se escurría entre sus nalgas y se sentía sensible ante el tacto de su novio.

Harry movió su dentro de él por un momento, dándole un poco más de placer.

"Tenemos que tomar un baño" sonrió "Y luego si quieres podemos dormir abrazados"

Louis asintió soñoliento, cerrando sus ojos.

"Sí, eso me gustaría"

Harry le beso la frente, apartando los mechones de cabello.

"Ven, amor"

Lo cargo hasta el baño, besándole los labios suavemente.