Soportar {Larry Stylinson}

7. Golpes.

Capítulo escrito por mi c:< ¿Preparadas? Here we go...

Las cosas entre Louis y Harry iban relativamente bien. Louis trataba en lo más posible no hacerlo enojar y Harry trataba de mantener su temperamento al mínimo.

Sin embargo las cosas siempre se les escapaban de las manos.

Todo empezó cuando Louis llego tarde una noche del trabajo, con un dolor de espalda y estresado el cien por cierto.

"Qué bonita la hora de llegada" Harry levanto una ceja, cruzando los brazos sobre su pecho.

"También te extrañe" Louis comento sarcástico, frotándose las sienes, queriendo ir a su cama a dormir y nunca levantarse.

"¿Crees que es una bonita hora de llegar, Louis?" pregunto, caminando detrás de él.

"Se me hizo tarde, mi jefe me puso hacer más trabajo y-"

"No te estoy pidiendo explicaciones" lo corto, dándose la vuelta y yéndose.

Louis suspiro.

La segunda vez fue una vez que Louis tuvo el día libre, Harry también había pedido su día libre para poder pasarla juntos ya que últimamente ni siquiera hablaban.

"¿Qué quieres hacer hoy?" pregunto, sonriéndole delicadamente.

Louis se lo pensó.

"¿Qué te parece si hacemos galletas de mantequilla con chocolate caliente?"

La combinación de ambos no le gustaba mucho a Harry, sin embargo asintió, acercándose y besando a su novio en los labios.

"Eso será, bebé"

Harry se dedicó a hacer las galletas, porque según Louis él las hacía más sabrosa.

"Yo hare el chocolate" sonrió.

Harry asintió, concentrado en lo suyo.

Cada uno se concentró en hacer lo suyo, de vez en cuando compartían besos y sonrisas tontas cuando descubrían al otro mirarlo discretamente.

"Yo termine" Harry anuncio orgulloso, metiendo la bandeja con las galletas en el horno "Iré a sentarme en el sofá" aviso, sacudiendo la harina de sus manos.

"En un rato te alcanzo" Louis aviso, limpiando un poco el sucio de la cocina.

"Te espero, mi amor"

Louis sonrió cuando vio el chocolate, sirvió un poco en dos tazas y guardo para cuando estuvieran listas las galletas, agarro ambas tazas con cuidado, tratando de no derramar el líquido y quemarse las manos, pero su suerte era la peor, simplemente la peor.

Cuando iba llegando a donde estaba Harry, se tropezó con la alfombra, haciendo que las tazas se cayeran de sus manos, y una de ellas fuera a parar a las piernas de Harry.

"¿¡Qué mierda te pasa?!" grito, levantándose rápidamente y tratando de calmar el dolor, sintiendo como su piel ardía.

Louis se asustó, retrocediendo.

"Y-Yo lo siento" tartamudeo, agarrando un pañuelo y tratando de ayudar, pero lo que hizo fue empeorar las cosas.

El jarrón que estaba en la mesita se cayó, justo en el pie de Harry.

"¡Louis!" grito, empujándolo lejos de él.

El castaño cayó sentado en la alfombra, mirando todo asustado.

Lo caliente había pasado pero a Harry aún seguía ardiéndole las piernas, sin contar el dolor en su pie.

"¡Eres un maldito inútil!" su tono de voz aumento, estaba furioso, su rostro contraído en una mueca "¿¡Cómo se te ocurre hacer esto!?"

El cuerpo de Louis temblaba, tenía miedo, tanto que no noto que cuando cayó al suelo un poco de los cristales del jarrón se introdujeron en sus manos.

"No fue mi intención" sollozo, intentando levantarse del suelo.

"¡Nunca es tu intención!" gruño, mirándolo, sus manos convirtiéndose en puños "¡Siempre te haces la maldita víctima y yo quedo como el malo!"

"¡No me grites!" Louis sollozo, viendo como la sangre salía de las palmas de sus manos.

Harry ignoro eso, tratando desesperadamente en que descargar su ira.

"¡Te grito porque me da la gana, porque eres un inútil que nunca hace nada bien!"

Louis negó con la cabeza, queriendo acercarse a su novio.

"Harry..."

"¡No me toques!" lo golpeo, haciendo que retrocediera.

Lo golpeo.

Lo golpee.

Detuvo su movimiento en seco, mirando como la sangre se escurría ahora también por la barbilla de Louis.

"Bebé..." susurro, asustado.

"No" Louis negó, ahogando un sollozo en su garganta "Aléjate de mí"

Salió corriendo escaleras arriba, con Harry detrás de él.

"¡Louis, detente!" lo sujeto del brazo.

El castaño trato de zafarse cuando llegaron al último escalón.

"No quiero nada contigo"

"Tendrás que escucharme" apretó más su agarre.

Louis forcejo de nuevo, negando con la cabeza.

Su relación era dañina y nadie podía negar eso.

"¡Te odio!" grito con todas sus fuerzas, sintiéndose sin aire de repente.

Harry abrió sus ojos, mirándolo incrédulo.

"¡¿Es porque hay otro, verdad!?" grito, moviéndolo por el brazo, tratando de desquitarse por las palabras antes dicha que le habían dolido.

Louis no podía odiarlo.

Louis se asustó, y retrocedió, tratando de soltarse.

No vio el escalón que estaba a pocos pasos de él.

"¡Louis!" trato de agarrarlo, pero no fue lo suficientemente rápido.

Harry observo como el cuerpo de Louis rodaba escaleras abajo, escuchando el fuerte impacto que dio al llegar al final, sus oídos pitaban.

"¿Bebé?" pregunto.

Pero, ¿qué pasa cuando la obra de cristal se parte?

Entonces es demasiado tarde.

FIN.